La brisa golpeaba mis mejillas, vestida de negro y sin alguna sombrilla que me cubriera de esa brisa, podía sentir mis mejillas mojadas no solo por la brisa de la lluvia, si no por mis lágrimas, un día gris como yo en estos momentos, perfecto día para ser un cumpleaños, además de estar rodeada por los conocidos de mis padres y mis amigas, que mas podía pedir en estos momentos, cuando estas viendo los dos ataúdes de las dos personas que estuvieron conmigo desde ese momento que abrí mis ojos, en los momentos en que di mis primeros pasos y aquel momento en el que pude decir "Mamá" y "Papá" un momento en el que mi corazón esta destrozado, tan solo con verlos a ellos dos cubiertos de tierra y flores blancas, llenos de las lágrimas de todas las personas cercanas a nosotros, personas que tanto como yo amábamos en esta vida, ahora solo me quedaba seguir adelante sin ellos y poder cuidarme a mi y a mi pequeña prima, la cual mis padres amaban como si fuera su hija.
El tiempo transcurrió y yo seguía frente a ellos, arrodilla y suplicando a dios que me los regresara, que no podía seguir sola, aun no podía creer que ellos me había dejado sola, tan solo pensar en que unos días atrás ellos dos estuvieron conmigo y que me habían hecho reír, pensar que si hubiera evitado que ellos se fueran de viaje, no estarían en estos momentos cubiertos de tierra y conmigo de rodillas llorando bajo esta lluvia que no podía hacer que olvidará mis penas, que no me ayudaba a soportar el hecho de creer que ellos están así, yo no podía y no puedo creer que mis padres estén ahora en un lugar donde no muchos nos hacemos a la idea de estar ahí, de estar en el "paraíso" porque aun así sigo sin poder creer eso, que ahora estoy sola y no saber que hacer, cuando yo se hacer cosas que ellos me ensañaban y una de esas cosas fue "Seguir adelante y sonreír" pero aun así, no puedo seguir adelante y sonreír, en estos momentos en los que debería estar feliz, estoy más triste que algo triste en este mundo.