- ¿Baek? ¿Compartimos baño? Estoy demasiado cansado como para esperar a que termines..
Abro la puerta despacio, para no asustarlo y evitar sorpresas.
- ¿Ah? - lo busco y está con los ojos muy abiertos y tratando de taparse con ambas manos en sus partes bajas. - S-si, espera.
- Lo siento. - me burlo de su reacción. Como si fuera la primera vez que lo veo así. Entre todos nos conocemos hasta el alma.
- ¡¡Solo gírate quieres!! - apenado grita y cierro la puerta recargándome en ella.
- No seas llorón baekki.. - sigo riéndome de él. - solo me quiero dar un baño rápido, con permiso ~
Avanzo hacia él y me voy quitando la ropa. Está atento a mis movimientos y no dudo en hacerle señas y sonreírle.
- Yah, date vuelta Soo.
Nos bañamos en silencio y en 10 minutos ya estamos saliendo en toalla hacia la habitación de Baek.
- ¿Puedo dormir aquí? - lo tomo de las mejillas y las estrujo, me gusta molestarlo.
- ¿No tienes tu propia cama? ¿Qué tiene de especial la mía? Deberías dormir en la tuya de vez en cuando.. no seas así Soo, se puede encelar tu cam.. - habla rápido y yo solo puedo reír por su cara.
- La tuya es especial, porque tú estas en ella. - lo suelto y me aviento a su cama.
- Tu ganas. Solo por hoy.
- Si, y sirve que nos despertamos juntos para ir a correr.
- ¿Se pusieron de acuerdo sin mi? A qué hora van a ir. - se recuesta a mi lado y apaga la lampara del buró.
- No, solo tú y yo. Nadie sabe así que programa alarma a las 7.
- ¡¿Me estás diciendo que en nuestro único día de descanso quieres ir a correr a las 7am?!
Se sienta y enciende de nuevo la lámpara, estrujando ahora él mi camisa de dormir.
- S-si..
- Eres-increíble. - dice mientras se sube encima mío haciéndome cosquillas y se acerca lentamente a mi rostro, todo está en silencio y transcurre en cámara lenta.
- Buenas noches, dormiré en el cuarto de Kyungsoo ~
La voz de Suho nos sorprende y Baek vuelve a acomodarse a un lado mío dejando el cuarto a oscuras sin decir una palabra más.
<Por fin mostraste iniciativa y Suho nos tuvo que interrumpir..>
Me giro para dormir y cierro los ojos, estoy agotado.
...
Por la mañana suena la alarma y no tengo ganas de ir a correr, prefiero seguir acurrucado entre las sábanas de Baek.
- Vamos, cámbiate que iremos a correr.
- Ya no quiero ir ~
Hago pucheros y volteo para abrazarlo y que nos quedemos acostados un rato más, pero Baek ya está de pie poniéndose las zapatillas para correr.