Capítulo 2

65 11 8
                                    


—¿Joder qué quieres Hoseok?

—Bien pasiva que eres y di-diciendo malas palabras.

—Dejame en paz y dime qué pasa.

—Es-estoy en problemas.

—¿Qué hiciste esta vez?— le pregunto temiendo por la respuesta.

—Quise bailar co-con un chico.

—¡¿QUÉ TE HICIERON?!

—Casi me mat-

—¡QUÉ!

—Solo me dieron una fuerte paliza— dice con una sonrisa débil— estoy en los baños.

—Voy para allá.

—Pero viste-

Sin dejarlo terminar cuelgo la llamada dejando de lado la comida y la serie que estaba viendo, me pongo el pantalón de chandal de nuevo ya que me lo quité por tener un poco de calor, las mismas zapatillas y salgo corriendo hacia el garaje.

—¿Pasa algo?

Pregunta una empleada de la casa sorprendiéndome bastante, negando con la cabeza entro al auto encendiéndolo en un dos por tres para tomar rumbo hacia el club teniendo en cuenta el atajo que él me  dijo.

Aprovechando del semáforo rojo extraigo un cigarrillo de donde mi hermano los guarda, lo enciendo empezando a absorber ese humo maligno hacia mis pulmones dejando después salir un poco.
Sin casi luces las calles se van poniendo más oscuras y solitarias para disfrutar de una caminata nocturna recordando malos momentos pero no para ir por tu hermano golpeado.

Como cuál alma lleva el diablo manejo tomando el atajo recomendado saliendo directo hacia mi destino, gracias al poco tráfico me encuentro aparcando el auto frente al lugar, con una última calada dejo caer lo sobrante del cigarrillo.

—Nombre— exige el guardia.

—Park JiMin.

Con semblante serio camino tras la alfombra roja hasta llegar a la puerta principal la cual dos hombres en un perfecto traje la abren dándome hacia el caos.
Admirando el lugar con curiosidad por ser mi primera vez no la demuestro, con la mirada doy una rápida mirada a todo el lugar; hombres y mujeres elegantes por aquí y por allá, estruendosa música, todos divirtiéndose y el amigo de mi hermano divirtiéndose con chicas a su lado.

Con un suspiro decido ignorar tal escena, camino un poco más aguantando palabras subidas de tono, miradas juzgantes e inapropiadas. Entrando al baño disimuladamente busco a mi hermano, y es allí , en un rincón lo veo casi que acostado.

—Mira no mas como te han vuelto— le digo preocupado.

—Eso no es nada JiMinnie mas bien llevame a casa.

—Como quieras pero tendrás que mostrarme el causante de tus golpes.

Pasando su brazo por mis hombros con dificultad lo empiezo a levantar recibiendo quejidos lo su parte, este hombre acaso come piedras.

—JiMin.

—¿Qué pasa?

—M-me sorprende que estés vestido normal.

Juro que lo hubiera dejado caer si no hubiera entrado alguien, con un pequeño golpe en uno de sus brazos agacho la cabeza sonrojado.

—Llego mi salvador— dice mi hermano.

Dándole un dura mirada lo dejo caer recibiendo un fuerte chillido de su parte, pero que se joda para eso tiene a su amigo, a mí no me necesita.
Sin mirarlos me salgo del baño hacia cualquier parte, si fuera por mi le pegaba un puño a los dos. Con melancolía camino entre los tumultos de gente perdiéndome entre ella. Aprovechado de los meseros con sus tragos tomo dos de cada uno pasándomelos como si fuesen agua, me lastima que mi hermano no valore aunque sea lo poco que hago por él. 

—¿JiMin?

Me doy vuelta un poco tambaleante hacia la persona detrás mío.

—¿Jin?— pregunto algo inseguro.

—¿Cómo has estado pequeño?— me pregunta mientras me apreta entre sus brazos.

—B-bien ¿y tú?

—Como siempre.

Sin decir nada más me dejo llenar de su calidad entre sus brazos para romper en llanto lamentable, a veces me gustaría poder hacer muchas cosas para que mi hermano no piense que solo soy una cara bonita que no sirve para nada.

—Sé lo que necesitas.

Mirándolo a los ojos con algo de esperanza veo como se acerca a mi oído empezando a susurrarme cosas, analizando la situación decido hacerle caso.

—¿Aceptas?

—Si.

Tomados de la mano me dejo guiar por él a una zona ya bastante alejada de donde estaba anteriormente, de camino tomo otro trago y otro más hasta llegar a una zona privada, entramos al lugar; mientras yo miro todo curioso, Jin me guía seguro entre los obstáculos. Esto si se puede llamar club nocturno no como lo de aafuera, las luces neón alumbrando más que nunca produciéndome dolor de cabeza.

—No creo que te pueda acompañar pero aquí está lo que necesitas.

Con un beso en la mejilla me deja solo en este sillón frente una gran barra, dejando de lado que se haya ido le pido al lindo chico un par de tragos que me hagan olvidar la tristeza.



...



Trago tras trago dándole a mi vista un espectáculo de colores.

Alguien hablándome al oído.

Unas manos tocándome sin pudor. 

Besos húmedos no solo en un lugar.

Unas manos fuertes guiándome a la oscuridad.

Los espectáculos de luces se han ido

Algo bajo mío moviéndose.

De nuevo esas manos tocando todo a su paso.

Risas, humo, besos, introducción...

Oscuridad......Olvido.




(=^・ェ・^=)ˏ₍•ɞ•₎ˎ(ㅇㅅㅇ❀)

Como lo dije antes , cuando acabara
dos historias mías comenzaría con esta
y pues aquí estoy.

Como cada historia mía tiene un orden
esta tomará el día de mi anterior historia :'V
Ósea los viernes.

Se editará los errores al final de la historia.

♥ Gracias por leer ♥

Estafador (Kookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora