Toda la vida de April ha sido normal, ha pasado desapercibida en la escuela, pero, ya en el penúltimo año se encuentra en aprietos cuando no solo un guapo chico, sino dos chicos muestran interés en ella. ¿Quién será? ¿El típico chico gilipollas apue...
¡Oh, no! Esto no es bueno, esto no es bueno, luego de pegarle a alguien en el estómago tan fuerte como para sacarles el aire es obvio que no le pides un favor, y si lo haces no te lo van a hacer, ya entiendo por qué el director Kelvin siempre me dice que tengo que pensar tres veces antes de hacer algo, que idiota, mi hermano nunca me va a perdonar, le va a decir a mi papá y adiós River para siempre, ¡Mierda! Okay, vamos a calmarnos, respira, ¿Cómo podrías hacer que tu hermano no te delate? Tu hermano...quien está enamorado de una de tus mejores amigas ¡Ya lo tengo! Solo tengo que convencer a Marissa de que salga con Matt y todo resuelto, eso espero.
-¿¡Cual es tu problema; estás loca o que!?
-Yo no fui, un ladrón pasó y te pegó en la barriga y, si no hubiera sido gracias a mi por llegar a tiempo de la casa de Marissa probablemente te habría secuestrado y prostituido, no eres feo; en todo caso debes agradecerme a mi, y también darme mucha Nutella.
-No seas idiota, el único caso en el que hubiera perdido la memoria a corto plazo sería si me hubieras pegado en la cabeza.
-Buena idea, solo debo encontrar una roca...
-Inténtalo y estás muerta.
-Claro, es cierto, debería usar mi puño, bueno, hermanito, quédate quieto y...
-Muy tarde, iré a contarle a papá que tuviste una cita con un chico y se besaron.
-¡Espera! Debe haber algo con lo que te pueda convencer de no contarle a papá.
-Te escucho.
-Puedo obligar a Marissa a que vaya en una cita contigo.
-No la puedes obligar a hacer eso, ella debería aceptar porque quiere, no porque la obligas.
-Aw, que hermosho, pero así no funcionan las cosas.
-Así deberían funcionar.
-¡Ya sé! Puedo darte consejos y ayudarte a conseguir a Marissa, después de todo yo soy la persona que más la conoce y sabe sus gustos ¿Trato?
-Trato, pero tendrás que hacer más para que siquiera intente sacar la imagen de ese chico con su lengua en la garganta de mi hermana menor.
-Buenos días, hermanita-dijo mi adorable hermanito con un vaso que alguna vez estuvo lleno de leche.
- ¡Wow! Cambias de agua a leche ¡Genial!
-Vamos, no te pongas brava, lengüitas.
-Idiota.
-Lengüitas- dijo justo antes de que le enseñara mi dedo favorito.
-Alístate, faltan 20 minutos.
-¿¡Veinte minutos?! No voy a alcanzar, Matt.
-Relájate, hermanita; ¿Quien te entiende? Primero te pones brava porque te levanto con dos horas de adelanto y ahora porque dormiste más estás toda poseída.
-Solo vete.
Me tenía que vestir bomba luego de ese beso con River, así que me puse unos shorts claros, una ombliguera gris, mis Converse blancos y mi saco beige, sin bañarme, igual me había bañado ayer en la tarde, no se va a notar ¿Verdad?
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-Wow, mira tu armario se debe estar comiendo la tela de tu ropa, pues está muy escasa, aparte ¿Te bañaste?
-Wow, mírate intentando utilizar la charla de vestirme apropiadamente conmigo, y no, no me pude bañar gracias a ti.
-Bueno, te acabas de quedar sin Nutella para el desayuno.
-Bueno es que me importan tus ideales sobre el hombre perfecto y todo eso, entonces, Marissa, ¿Cual es tu tipo de chico?
-¿Por qué tanto interés repentino en Marissa? estás sospechosa-dijo Kate antes de que le hiciera señas de que se callara y le contaría después.
-Soy una buena amiga y lo quiero saber, es todo.
Antes de que empezara a hablar me aseguré de estar grabando en el celular. Al final dijo un montón de cosas que mi hermano no es: Detallista, fiel, monógamo y todas esas expectativas típicas, tengo mucho trabajo para cambiar a mi hermano. La campana sonó y tuve que entrar a dos horas de tortura de matemáticas y allí nos introdujeron a otro chico nuevo, Chase Matthews, y, siendo sincera, es un total 10, ojos marrones al igual que su pelo despeinado, dentadura perfecta y cuando sonríe, además de que se le forman los hoyuelos, sus ojos se achinan, y es alto, cuando digo alto me refiero a un 1.90cm, pero se sentó al lado de Megan, la perra del colegio con el típico nombre de zorra, lástima, lo va a arruinar, igual, ya tenía el típico porte de chico malo, además yo ya tengo a River. ¡River! vaya, no lo he visto en todo el día desde ayer. Contacto visual... acaba de haber contacto visual y ya caí en su hechizo, ni siquiera me había dado cuenta de que lo estaba mirando.
-Ten, la vas a ver mucho más que yo-dijo al terminar la clase al entregarme una foto suya, ridículo.
-¿Perdón?
-Vi como me mirabas en clase y pensé, le haré este grande favor, te veré luego...espero-dijo antes de guiñarme el ojo-al parecer no hace falta que Megan lo arruine, ya venía arruinado.
No lo conozco todavía y ya sé que va a causar muchos problemas.
