The death of a tiny me -Joker- #GYA

01 La infancia

Probablemente el ser pequeño era hermoso y maravilloso en la memoria de todos pero para mi, para este ser demacrado eran las memorias de un infierno encarnado en la tierra, un infierno que marcó cada parte de mi ser y me arrebató lo poco que tenía. Yo fui una bendición mal recibida, odiada y detestada. La mujer que me dio la vida, de profesión era prostituta y mi padre otro de sus tantos clientes. Era una aberración que una cualquiera tuviera una criatura cuando no podía ni comer decentemente ¿En cuestión al hombre que llamo padre? Le ordenó a la puta de Laura que abortara y nunca se comunicará con el, claro que las cosas no fueron así. Desde temprana edad estaba en lugares que solo un hombre desgraciado visitaría, Laura logro juntar el dinero suficiente para que pudiera ir a la escuela a los seis años, pero poco ella sabía que desde los cuatro yo me escapaba del apartamento de quinta para ir a la librería, aprendía cosas básicas con Doña Clara, claro, que mujer más bondadosa siempre ayudando a un pequeño e inocente niño a instruirse sobre cómo funcionaba el mundo, que era el abecedario y la lectura, las matemáticas, la historia y otra gran cantidad de libros que pudiéramos encontrar. Al principio era difícil tener que estar horas sentado en un pupitre, escuchando a una aborrecida mujer hablando de cosas que ya conocía, que tedioso era tener que compartir mi tiempo libre con otros niños que no hacían silencio, gritaban, saltaban y corrían como si no hubiera un mañana, que horripilante era tener que volver a una casa vacía, fría y cayéndose a pedazos, lo único que me hacía creer que todo iría bien era doña Clara, tan divina como siempre me recibía después de la escuela para leer y compartir momentos de silencio y paz en la biblioteca