Candy y Terry se separaron en una noche de invierno pero lo que no sabían era que se volverían a ver más pronto de lo que pensaban aunque ahora las cosas serán muy diferentes.
¿Podran ser felices por fin después de tanto sufrimiento?
(Ésta historia...
El tren se detuvo en la estación de Nueva York,por fin había llegado el momento de hablar con Susana Marlow. Terry bajó del vagón del tren y ayudó a Candy a hacer lo mismo. –Llegamos Pecas,te llevaré al hotel para que descanses un poco y yo iré a mí departamento a bañarme,después iré a ver a Susana,Candy si no quieres ir conmigo...yo lo entiendo. –Claro que iré contigo amor te dije que no te iba a dejar solo en esto y así será ya lo hice una vez y no quiero que vuelva a pasar estaré esperándote en el hotel. –Entonces vamos Pecas.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Llegaron al hotel,el mismo donde Candy se hospedó cuando fue al estreno de Romeo y Julieta,estar ahí le trajo muchos recuerdos tristes de esa fatídica noche cuando tuvo que renunciar a su gran amor y de pronto las lágrimas corrieron por sus ojos de esmeraldas. “¡Vamos Candy! No llores–pensó–Él está contigo ahora y ya nada podrá separarnos.” Después tomó un baño para relajarse y se recostó un rato mientras llegaba Terry el cansancio la venció y se quedó dormida. “EresunamalditatraidoraCandy,nocumplistetupromesadijistequenoloveríasmás y meloquitastenoteimportóqueyolehayasalvadolavida,peroestonosequedaráasíyomeencargarédequenuncapuedanserfeliceslooyes ¡NUNCA,NUNCA,NUNCA!” –¡Noooo!–grito Candy muy asustada–¡Solo fue una pesadilla pero era tan real! Dios mío por favor ya hemos sufrido mucho y merecemos ser felices,no permitas que nada malo le pase a Terry,te pido con todo mi corazón que Susana comprenda que nos amamos y nos deje vivir en paz. Por favor Señor protege nuestro amor de toda maldad.
Candy estaba tan concentrada en su oración que no escuchó que alguien tocaba a su puerta. –Señorita,señorita ¿se encuentra bien–dijo el empleado del hotel. –Si...si espere,enseguida le abro. Candy abrió la puerta y el empleado del hotel le dice: –Abajo la está esperando el señor Terence Granchester. –¡Oh! Si muchas gracias,dígale por favor que enseguida bajo. –Muy bien señorita,se lo diré. “No le contaré nada a Terry de la pesadilla que tuve hace un momento,no quiero preocuparlo” Candy bajó rápidamente a la recepción del hotel ahí la esperaba Terry se veía guapísimo se había afeitado y se recogió su hermoso cabello castaño,sus ojos aguamarina brillaban como hace tiempo no lo hacían. –¿Estas lista Pecas? –Si amor vámonos.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Caminaron hacia la casa de las Marlow,Terry iba decidido a terminar con Susana y Candy iba pensando en la pesadilla que había tenido,él se dió cuenta de su nerviosismo y le pregunto: –¿Que te sucede Pecas? Desde que salimos del hotel te noto rara ¿Te sientes bien? –Estoy bien mi amor,no pasa nada–dijo Candy bajando la cabeza. –Candy te conozco muy bien y se cuando me estás mintiendo,si vamos a casarnos debemos decirnos siempre la verdad. –Perdóname Terry tienes razón lo que pasa es que me quedé dormida hace un momento y tuve una horrible pesadilla no quise decirte nada para no preocuparte. –Ay Candy tú siempre pensando en los demás ¿que fue lo que soñaste amor? –¡Fue espantoso Terry! Soñé que Susana me veía con mucho odio y me llamaba traidora también me decía que nunca podremos ser felices que ella se encargaría de eso,tengo miedo que intente hacerte algo,si eso pasa yo...yo no podré soportarlo. Candy empezó a llorar desconsolada,Terry la abrazó con ternura y le dijo: –No tengas miedo mi amor,ella no podrá hacerme nada. Todo estará bien,nos casaremos y ya nada ni nadie podrá separarnos. Al fin llegaron a casa de Susana,Terry se adelantó y tocó el timbre,una mucama abrió la puerta y se quedó muy sorprendida al verlo. –¡Joven Terry! ¡Usted aquí!