Capitulo 22

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Terry se quedó con Candy esa noche en el hospital,al día siguiente el médico fue a revisarla nuevamente y dijo:
-Ya puede irse señorita White, aquí está su alta.
-¡Hurra!-grito Candy muy contenta-al fin podremos regresar a Chicago Terry.
-No tan rápido amor,primero hay que preguntarle al doctor si puedes viajar-respondió Terry.
-No hay ningún problema señor Granchester pero al llegar a Chicago la señorita White debe guardar reposo por lo menos durante tres días.
-Entendido doctor-dijo Candy-muchas gracias por todo,ahora si me permiten,voy a vestirme.
-Muy bien señorita White,con su permiso-dijo el médico.
Terry se quedó sentado en el pequeño sillón donde había dormido sin ninguna intención de moverse de ahí.
-¡Terry Granchester!-gritó Candy-Dije que voy a vestirme.
-Claro Pecas por mí no hay ningún problema,adelante-dijo Terry sonriendo de lado.
-¡No te hagas el gracioso y sal de aquí de inmediato!-gruñó Candy.
-¡Vamos Pecas! No es la primera vez que te veo mientras te cambias de ropa jajaja.
-¡Terryyyyy! Entonces en el festival de mayo tú si me...
-Te ví pero no te miré mi amor.
-Nunca me dijiste que significan esas palabras Terry.
-Es muy sencillo Pecas,lo que quise decir aquella vez es que ví que estabas ahí pero no miré mientras te cambiabas de ropa porque ante todo soy un caballero,lo dije de esa manera para hacerte enfadar y creo que lo logré jajaja.
-¡Ay mi amor,nunca cambiarás!
Pero ¿sabes algo? Eso es lo que amé de tí desde que nos vimos en el barco,tu forma de ser tan auténtico,tan sarcástico,tan...tú,te amo mi duquecito rebelde.
-¡Candy! Nunca me habías llamado de esa manera.
-¿Como?
-Duquecito rebelde.
-¿No te gustó mi amor?
-¡No Pecas!
Candy puso una cara triste, estaba a punto de llorar cuando Terry suelta la carcajada y dijo:
-¡Jajaja!¡Me encantó mi amor! Aunque todavía no sé si seré yo el próximo Duque de Granchester.
-¡Me engañaste!¡Ahora verás!
Candy empezó a hacerle cosquillas a Terry y él apenas podía hablar,en eso caen los dos en la cama Terry encima de Candy se quedaron viendo por un momento pero después sus labios se unieron en un apasionado beso. Candy empezó a experimentar sensaciones que no había sentido antes Terry se dió cuenta porque él también sintió algo diferente y empezó a recorrer el blanco cuerpo de Candy cubierto únicamente por una delicada bata rosa pero antes de que llegaran más lejos él se detuvo,se levantó de la cama y dijo:
-Mi amor perdóname yo no quise...sabes que te amo y que nada me gustaría más que estar contigo pero...ahora no es el momento ni el lugar apropiado, tenía que detenerme.
-No te preocupes mi vida yo también quiero estar contigo, pero tienes razón debemos hacer las cosas bien aunque...a mí no me gustó que te detuvieras.
Candy se ruborizó al decir eso pero era lo que sintió en ese momento,cuando todo volvió a la calma Terry le dijo:
-Creo que será mejor que salga para que puedas vestirte y podamos regresar a Chicago hoy mismo Candy.
-Si Terry debo escribirle al tío abuelo Wiliam para contarle nuestros planes en cuanto regresemos.
-Tienes razón yo también debo escribirle a mi madre para contarle de la boda y darle las gracias por hacerte reaccionar, creo que se pondrá muy feliz,te espero afuera Pecas.
-Si mi amor no tardaré.
Terry salió del cuarto de Candy pensando en lo que acababa de pasar,era algo nuevo para él y estar con su amada pecosa su deseo más grande pero también sabía que debía esperar a su noche de bodas,pues no quería arruinar la reputación de Candy y pensaba:
"Como quisiera que el tiempo pasara pronto Candy ansio tanto tenerte entre mis brazos y ser uno solo contigo mi amor,ojalá que tu padre adoptivo no se niegue a darnos su permiso y su bendición, quiero casarme contigo cuanto antes"
Sus pensamientos fueron interrumpidos por la voz cantarina de Candy:
-Amor estoy lista,podemos irnos cuando quieras.
-¡Ehhh! Si Pecas vámonos.

Salieron del hospital hacia la estación,Candy le dice a Terry:
-Amor antes de ir a la estación me gustaría ir a ver a Susana.
-¿Que estás diciendo Candy? Esa loca casi nos mata.De ninguna manera.
-Por favor Terry solo será un momento.
-Esta bien vamos a ver al detective Jones para que nos diga en donde está internada.
-Gracias mi amor.
Llegaron a la estación de policía y los recibe el detective Jones:
-Buen día señor Granchester, creí que se habían ido a Chicago,veo que ya está bien señorita White,me alegro mucho.
-Buen día detective Jones,hoy regresamos a Chicago pero antes de irnos queremos ver a Susana ¿nos puede decir en dónde está internada por favor?
-Desde luego señor Granchester yo los llevaré a la clínica.
-Detective Jones-dijo Candy-¿Que pasará con el cuerpo de la señora Marlow?
-Ya avisamos a sus familiares señorita White,ellos se harán cargo,pero a la señorita Marlow no quieren verla.
-Entiendo detective Jones.
-¿Podría llevarnos a la clínica por favor detective?-dijo Terry.
-Por supuesto señor Granchester.

Nuestros rebeldes subieron al auto del detective Jones,cuando llegaron al hospital psiquiátrico el detective les dice:
-Debo advertirles que la señorita Marlow ha perdido completamente la razón y está muy agresiva dice cosas sin sentido y además atacó a uno de los enfermeros,tuvieron que ponerle una camisa de fuerza y sedarla,por favor tengan cuidado no se acerquen mucho a ella.
-De acuerdo detective Jones-dijo Terry-solo la veremos un momento ¿Verdad Candy?
-Si Terry-respondió Candy.
-Entonces entremos-dijo el detective Jones.
Cuando entraron vieron a Susana en el jardín del hospital sentada en una silla de ruedas,estaba acompañada por una enfermera que al ver a los recién llegados le dijo:-Tiene visita Susana.
-¡Mamá! ¡Viniste por mí! Debemos ir a casa y empezar con los preparativos de la boda,Terry regresará en cualquier momento.
-Susana-dijo Candy-soy Candy ¿me reconoces?
-¿Candy? Lo siento pero no conozco a nadie con ese nombre.
De pronto Susana vió a Terry y dijo:-¿Quién eres tú? Te pareces mucho a Terry mi prometido ¿Eres algún pariente suyo? ¿Sabes cuándo vendrá por mí?
-Así ha estado desde que llegó-dijo la enfermera-no reconoce a nadie,solo pregunta por su madre y por su prometido.Pero nadie ha venido a verla.
-¡Pobre Susana!-dijo Candy-a pesar de todo no le deseo ningún mal Terry.
-Yo tampoco le deseo nada malo Candy pero cada quien cosecha lo que siembra,ella se obsesionó conmigo y su egoísmo fue tal que no le importó estar con alguien que no la amaba,ahora se quedó sola y además está enferma.
-Terry...¿Podemos ayudarla?
-No Candy,que sus parientes se hagan cargo de ella, nosotros debemos regresar a Chicago.
-Adiós Susana-dijo Candy.
-¿Quién es Susana?
-Candy vámonos,ya no tenemos nada que hacer aquí.

Los chicos salieron del hospital psiquiátrico,se despidieron del detective Jones y tomaron un carruaje para ir a la estación de tren y regresar a Chicago.

Continuará...

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