El niño de los ojos verdes

Capítulo 4

Hora de irse.

Un año después.

-Papá, mamá ¿Por que le hacen esto a la família?- digo yo enfadada, aún que ya se que no se puede cambiar- Con los catorce años recién cumplidos y nos vamos de la ciudad.

-Ya lo emos hablado. Lo hacemos por trabajo.- dice mi padre como por quinta vez- Y además, tendrás a Lydia.

-¡Papaaaa, el coche ya está aquí desde hace diez minutos!- grita Nate desde fuera.

-Dile que ya vamos- dice mi mamá.- Que se espere un poco.

Ya estamos en el aeropuerto, junto a la família de Ly. Estamos esperando a entrar en el avión.

-¿Cuantos aviones tenemos que coger?

-Dos, el primero va a NYC y después de ese cogeremos otro y nos iremos a donde los autobuses para ir al pueblo y a la nueva casa.- Dice Ly como si fuese un poema y lo estuviera recitando.

Yo rudo los ojos- Gracias, sabelotodo.

-Chicas ya nos toca. Poneros cada una con su família por favor.

-Si Sra. García.

Pasamos por donde unos señores nos pedían el DNI y el pasaporte. El que nos atiende tiene unos 40 años y es el típico amargado al que no le gustan los niños, ya que cuando paso con Tommy lo mira con mala cara.

El avión dura 9h. Yo no sé hasta que nivel se puede llevar el aburrimiento, pero al parecer... muy alto!

Cuando ya estamos en NYC hacemos una cola de una hora para pasar los controles.

Al salir de los controles vamos a un restaurante que hay por ahí.

- Escuchad. Cuando empiece el Instituto queremos que intentéis integrarnos.- dice mi padre cogiendo otra patata- Por eso os hemos puesto a todos en una academia de ingles.

- Y antes de que os quejeis. Es obligatorio.- dice el Sr. Robinson separando las sílabas de la última palabra.

-Pero mamá, yo tengo un alto nivel de inglés. - dice Nate.

-Hijo, lo único que tienes alto es el ego.

-Woooooo.

Ya bajando del segundo avión, a las 3:30 a.m Tommy se duerme en mi hombro mientras los adultos llaman a una compañía de taxis.

-Y tu que piensas hacer, porque para ti ha ser mas difícil, no? Ya que eres más mayor y tal...-pregunta Lydia a Nate curiosa.

-Si, la verdad es que dejar a mis amigos... y a mi novia- en una milésima de segundo se le nota la tristeza, pero tan pronto como aparece desaparece. - Pero lo bueno es que me van a comprar un iPhone X.

Por mucho que Nate y yo nos peleemos, siempre hemos tenido un lazo muy fuerte. Ya que cunado eramos pequeños los padres de Ly y los míos trabajaban mucho y el nos hacía de niñero.

Las dos casas están al lado. ¡Son enormes! Nada comparado con la de antes. No, no señores. ¡Es el triple, o el cuádruple! La mía tiene un jardín delantero con arbustos y flores a los lados. Por fuera, la casa es blanca y tiene un camino de piedras. Para llegar a la puerta de entrada hay tres escalones de piedra. Por dentro las paredes son blancas, hay un salón-comedor muy amplio. Los sofás son color crema, hay una mesa de café de vidrio y una chimenea. La mesa de comedor es de madera oscura y amplia. También tiene una cocina, esta no es muy grande, pero es moderna y con una bonita isla.

-Emy y tu compartirán habitación- oigo a papá hablando con Nate.

-¿¡¿Que?!? ¡No, yo necesito privacidad! -contesta el

-Si, papá que él esta en esa "etapa" y no quiero traumarme- entro en la conversación- Además Tommy es pequeño, no puede dormir solo. Así que yo me ofrezco.

-¡He, que las normas las pongo yo!- dice papá con cara de enfado falsa- por eso Emily dormirá con Tommy.

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Sorry por tardar tanto en publicar. Es que mi hermana se va a E.E.U.U. y he estado aprovechando para estar con ella.

Gracias por leer,
Linin⭐