Margarita

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-¿Por que estas enojado, cariño?

La semana había sido dura, Taehyung estaba en un estado de negación y enojo, descarrilando la paciencia del pelinegro. La razón, ver a Yoongi platicar con una pelirroja en el centro comercial, quien resulto ser la hermana mayor de su jefe, y ademas, de estar comprometida.

Taehyung se mantuvo en silencio, con aquel semblante de indiferencia. Yoongi suspiro, pasando su mano por su nuca, frustrado.- Vamos Tae, tengo que volver al trabajo.

-Vete entonces.- El rubio se levanto, dejando de regar las flores. El pesado ambiente se notaba hasta fuera del local, y las flores volteaban sus pétalos, ignorando la infantil disputa que daba su dueño.-Seguro te vas a encontrar con ella.

Caminando rápido, subió las escaleras, azotando la puerta. Otro suspiro no tardo en salir de los labios del mayor. ¿Por que Taehyung tenia que celarse de una platica donde el tema principal era el extenso tema de todo lo bueno que tenia el prometido?

Yoongi tomo su celular, marcando a la empresa al escuchar los constantes golpeteos en la parte superior.-¿Disculpe? Si, necesito el día libre. Tuve un percance y no podre ir hasta mañana.-Yoongi colgó al escuchar la positiva, y bufando, comenzó a cuidar de las flores, dejando a su rubio obstinado terminar su rabieta. 

Pasada la hora, donde el pelinegro atendió a varias personas, ya con los conocimientos necesarios, Taehyung bajo ahora mas calmado, frunciendo el ceño al ver a su novio atender gentilmente a un hombre de edad avanzada. De pie, en el umbral de la puerta, visualiza como agilmente quita los tallos sobrantes, manchando aun mas su camiseta de verde.

Sin poder evitarlo, sonríe y se acerca a las petunias con tranquilidad, a sabiendas de que el pelinegro lo sigue con la mirada.

-No fuiste al trabajo.

-Estar contigo es primero.-Se acerca, rodeandole la espalda y olfateando su exquisito aroma, que ahora tiene un toque de rosas perfectamente mezclado.

-Seguro, primero ella des...-Interrumpido, siente como lo voltea, chocando con su mirada filosa. Sus mejillas se colorean de un intenso rosa, poniendo sus manos en el pecho del mayor.-..pues...yo.

-¿Crees que elegiría primero a la hermana de mi jefe comprometida que a mi tierno y bello novio rubio obstinado con un pequeño síndrome de berrinches infantiles? Por favor, Taehyung.

-No tengo un síndrome de berrinches.-Dice, haciendo un pequeño puchero, alejando su mirada de la ajena, posandola en el letrero de la puerta.

-¿Y ese lindo pucherito ahí?.-Le da un pequeño beso en la mejilla, haciendo que el rubio volteara, y volvió a acercar sus labios al pequeño, besándolo con tanto cariño y ternura. Instintivamente, cierra sus ojos y se deja llevar, sintiendo como este enrolla sus brazos en su nuca, sonriendo victorioso. Se separan, viendo el rostro enrojecido de vergüenza del rubio, sin borrar su sonrisa.-¿Ya me perdonas, cariño?

Taehyung asiente, sintiendo de nuevo los labios de su novio y se siente tan afortunado, sintiendo esos ocho meses de noviazgo tan bellos, y al separarse, sonríe, abrazándolo con fuerza, riendo junto al pelinegro, quien se quito ese peso de encima al ver de nuevo la alegria del rubio.

-Tae, bebe.- El rubio suelta un ruidito, indicándole que prosiga.-En dos meses.... Taehyung, cásate conmigo.

La margarita simboliza la pureza, la lealtad al amor y la inocencia propia.

Ah no me maten por favor.

Amor De Rosas [YT]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora