𝑨𝒍𝒎𝒂 𝑫𝒆 𝑪𝒓𝒊𝒔𝒕𝒂𝒍 ×𝑲𝒂𝒈𝒆𝑯𝒊𝒏𝒂×

Automático

La confrontación no se veía nada bien. Primero porque Kageyama había arrastrado a Hinata hacia la salida del lugar, la dirección opuesta a donde Oikawa se encontraba.

—¿Kageyama?— Hinata se esfuerza por hacerlo regresar al mundo—. Oye, Kageyama...

Segunda, porque Oikawa no parecía querer enfrentar esa verdad aún.

Kuroo se resignó en cuanto vio que Hinata se alejaba detrás Rey, no parecía muy cómodo pero la hacía sin protestar.

—Kuroo— Oikawa rompe el beso, viéndolo directamente a los ojos—, dejalo.

La expresión de confusión no se dejó esperar.

—¿A quién?

—A Kenma.

—Deja a Kageyama.

El labio superior de Oikawa tiembla.

—Eso pienso hacer.

Y, por otro lado, el chico con su recién roto corazón por fin para su andar detrás del edificio. Llora, Hinata solo observa, apreciando como cada pequeña lágrima representa a su corazón.

Pero está confundido.

—¿Qué debería hacer?— pregunta, secándose las lágrimas con las manos.

Hinata siente su pecho doler. Él no quería verlo llorar así.

—¿Debería disculparme?— pregunta, aún peor.

Hinata suspira.

—No hagas nada...

Pero, Kageyama, en pleno auge de emociones, no distingue las palabras.

¿Debe ir? Porque sus pies se mueven solos.