Los días transcurrieron y el fin de semana había llegado, para ser más específico, hoy era domingo y Niall había prometido llevar a Sasha al parque, así que el rubio estaba sentado en el tercer escalón de la entrada viendo circular las nubes por todo el infinito mientras esperaba a su hermana.
Niall y la chica de ojos oscuros se habían visto un par de veces durante la semana en el pueblo, no habían pasado de cruzar unas cuantas palabras y dar señales de saludo a lo lejos; sin embargo, el rubio la había mirado más veces de las que se imaginaba y podía contar, puesto que la de mechones ondulados transitaba enfrente de su casa todas las mañanas cuando iba camino al pueblo para cumplir con la lista de encargos de su pariente y aunque ella no se diera cuenta, el irlandés siempre la observaba desde su ventana.
El tiempo de espera terminó y Niall se dio cuenta de eso ya que oyó la dulce risita de su hermana, la menor caminó despacio hacia su hermano y lo abrazó por detrás, con algo de dificultad logró enrollar sus bracitos sobre el cuello del rubio y luego le plantó un beso en el cachete, a lo que el irlandés se sonrojó sólo un poco.
Ambos juntaron sus palmas y comenzaron a andar con rumbo al parque, Niall miraba todo a su alrededor y de vez en cuando, echaba un vistazo para saber que hacía su hermana, en el camino la niña se encontró algunas pequeñas piedras y las pateaba lejos para lanzarlas fuera del camino.
Cuando llegaron al espacio repleto de árboles y hierba fresca, iniciaron su caminata por los alrededores, después de dar varias vueltas al perímetro experimentaron un leve cansancio, pero cuando Niall menos se lo esperaba, de repente su hermana salió corriendo sin ninguna dirección aparente y él la siguió para tratar de alcanzarla, pasaron varios minutos recorriendo todo el lugar, volando sobre la alta hierba, pero cuando fue momento de hacer una maniobra y cruzar, el pequeño cuerpo fue atrapado entre las firmes extremidades superiores del rubio, afianzó su agarre con seguridad y la infantil figura fue elevada ligeramente en el aire, escandalosas risas llenas de plena alegría escaparon de los rosados labios de los hermanos, permanecieron en ese estado de felicidad por varios minutos más hasta que al irlandés le empezó a doler un poco la espalda baja de tanta carcajada.
Niall dejó en libertad el cuerpo de la pequeña y luego ambos se miraron un segundo, se inclinaron intentando recuperar el aliento mientras aspiraban y expulsaban con pesadez. Al cabo de un rato, habían recobrado el sentimiento de vitalidad y decidieron que era momento de otro juego, Sasha sugirió jugar a las escondidas y a Niall le pareció una excelente idea, para saber quién sería el que iría a esconderse y quién se quedaría a contar, ambos acordaron en jugar piedra, papel o tijera antes, el ganador escogería el destino del otro, tres intentos habían pasado ya y en todos ellos el rubio había salido perdedor, el irlandés había sido muy dulce ya que su derrota había sido algo casi a propósito, su próxima tarea sería contar en lo que su hermana iba a ocultarse.
Una eternidad más tarde, que más bien habían sido unos minutos en los cuales el rubio alcanzó a nombrar hasta el número cien, dejó en libertad sus ojos ya que éstos fueron aprisionados por el dorso de sus manos, se incorporó en pie ya que los instantes previos estaba descansando sobre la hierba danzante, inspeccionó hacia todos lados pero no logró enfocar rastro de la sombra de su hermana, así que decidió emprender la búsqueda.
Niall se ubicó sobre el sendero e inició con la caminata de nuevo, sus pasos recorrían el camino de tierra con libertad mientras su mirada exploraba cada detalle del paisaje tratando de descubrir algo fuera de la armonía; se podría decir que las cosas iban bien, el irlandés no había logrado identificar a su hermana en el campo pero el rubio se estaba divirtiendo mucho sólo admirando todo a su alrededor.
Más adelante se topó con una presencia familiar y con otra no tanto, la figura femenina de mediana estatura caminaba despacio hacia él y cuando estuvieron lo suficiente cerca, se detuvieron y se miraron con simpatía, alegres de volver a verse.

ESTÁS LEYENDO
Hogar, dulce hogar.
FanfictionEl año escolar universitario ha terminado, las vacaciones de Otoño han llegado y Niall retorna a su pueblo natal de Mullingar, en Irlanda; para pasar unas relajantes vacaciones con su familia. En el camino conocerá a una persona que le robará el a...