Capítulo 11

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Despertó con unas terribles ojeras ayer no durmió lo suficiente, le salva que hoy sea Domingo y no tenga clase, de lo contrario ya estaría dormida en plena clase de trigonometría.

Aquel mensaje la dejo atónita después de diez meses le hablo nada mas y nada menos que su ex, en un tono no muy agradable.

¿Donde quedaron todas tus promesas?
3:45am

En el pasado...él no se equivocó, fué ella, pensó que tenía todo claro, solo lo pensó.

Terminamos hace 10 meses, supéralo.
3:46am

Esto es una tortura, que te termine la persona que amas sin razón alguna es eso... tortura

¡Me terminaste sin motivo alguno!
3:47am

Tal vez el tiempo sea la solución, ella sabe lo que el hizo, ahora no quiere otra cosa mas que centrarse en sus estudios.

¿Quién es ese tal Leonardo? ¿Porque para comentando tus fotos?
3:48am

Caen lágrimas de sus ojos, tal vez tenga razón y el tiempo sea la solución.


Usted a bloqueado a Alvaro Fuentes de su facebook.

Los recuerdos la invaden, pero no es tiempo de recordar nada, debe descansar.

Hace 10 meses...

Se encontraba solo en su casa, vestía una ropa deportiva que resaltaba su piel morena. A pesar de que el siempre andaba ocupado se tomó su tiempo para ver a su chica.

-Estas hermosa, Pamela.

Sus palabras hacen que se sonroje, extrañaba su voz y sus piropos tan directos, aquella chica que se encontraba parada en la puerta de su casa hacía que su corazón se descontrole.

-Te extrañe mi terrorífico, también te vez... -Lo mira de cuerpo completo, era mas que hermoso- expetacular.

-No sabes como lloraba Beatriz sin tu presencia.

-Envíale besos y dile que la amo.

-Ella dice que te ama más.

-No hay duda que seras un buen padre - Afirma ella mientras acaricia su mejilla.

Beatriz era la hija imaginaria de la relación, Alvaro tenía planes a futuro con aquella chica de ondeado cabello y que mejor idea que crear una hija imaginaría con el nombre de su suegra ...¡Sí! Así se llama la mamá de Pamela.

-¿Te puedo abrazar?

-Eso no se pregunta.

Y tras esas palabras unas sonrisas y un fuerte abrazo. Él no sabe cuanto lo extraño, es difícil conformarse con videollamadas y eso lo saben ambos. El tiempo había transcurrido demasiado rápido, una relación de 5 meses no es fácil de llevar y peor si viven lejos y estudian en lugares diferentes.

-¿Recuerdas lo que te dije ayer en la videollamada?

-¿Te refíeres a tu sorpresa no tan sorpresa? -Pamela pronuncia por un largo tiempo la última palabra.

Se escapá otro beso, ella recuerda cada una de las conversaciones que tienen a diario.

-Pues hoy quería entregarte esto.

Alvaro se quita la mochila y rebusca en su interior hasta sacar una pequeña caja de color negro, regresa su mirada a Pamela ella salta de emoción, le encantan esos pequeños detalles.

-Es para tí mi querida Pamela.

Esta emocionada, él abre la caja con delicadeza y saca un  hermoso collar en el cual resalta un enorme corazón, se miran y sin decir nada la chica se voltea y él mueve suavemente su cabello para colocarle el collar, cuando termina de ponerlo Pamela gira hacía él y lo abraza por el cuello, él le corresponde colocando sus manos en su cintura y agacha su mirada para poderla ver.

-Te estoy entregando mi córazon, cuídalo.

Sus palabras eran sinceras, le da un beso en la frente, se siente amada y protegida no hace falta más, él la abraza fuerte hasta que siente como lento sus cuerpos se van uniendo, siente su respiración agitada.

-Yo no tengo que entregarte hoy, me siento mal -Dice ella mientras desvía su mirada al collar y luego al piso- Me haces sentir mal ¿Sabes?

Él sabe como se siente, pero no le importa ese regalo tiene un propósito oscuro debajo.

-Yo te lo entrego porque quiero, no espero nada a cambio - Dice él mientras toca suavemente su mentón y hace que lo mire a los ojos - aunque tu sabes con que me conformaría...

Pamela sabe a que se refiere él, y le incomóda, lo ama y todo pero... no esta preparada. Discimuladamente retira su mano de su mentón y por decir "discimuladamente" se refíere a empujarle.

-¿Y esta vez que?- Exclama enfadado.

-Te me pones bien pervertido Alvaro.

Tras decir eso se deja caer en el muelble de su casa y se cruza de brazos.

-Tu me pones así.

-La típica excusa de todo hombre, eres un pervertido- Arquea sus cejas y desvía su mirada.

Alvaro tiene que utilizar el plan B, si se siente incomóda nunca obtendrá lo que mas quiere de ella.

Rapídamente se dirige a la cocina, arriba del refrigerador se encontraba un tarro de maní, con el maní en brazos se dirige a Pamela.

Tose para intentar llamar su atencíón, nunca falla.

-¿Sabes que eso es ilegal? -Comenta observando el frasco de maní que llevaba en sus manos.

-Pero solo es maní.

-Eso losé -En un movimiento rápido le quita el frasco- Lo único ilegal es que intentes hacerme cambiar de humor dandome maní.

-Y si es ilegal, ¿Por qué ya vas comiendote la mitad del tarro?

-Porque yo soy ilegal- Le saca la lengua.

Pamela jala del polo de el chico haciendo que caiga al muelble donde le da un beso, pasan unos cuantos minutos hasta que decide hablar Alvaro.

-¿Me puedes prometer algo?

Él la mira a los ojos, ella lo mira confusa.

-Lo que usted diga.

-Prometeme que nunca terminara esto.

Esta mas confundida que antes, pero segura, ¿Qué podría pasar? Él es un chico centrado, ama escribir leer, tocar guitarra, es respetuoso y ella lo mismo con un  toque de locura.

-Te lo prometo, mi terrorífico.

Acaba de hacer una gran promesa, estar juntos por siempre, pase lo que pase... juntos.

-Beatriz dice que eres la mejor madre del mundo.

-Dile  que ella tiene a el mejor padre del mundo.

Por un momento se deja llevar, sus manos se dezlizan suavemente por su espalda, ignoran que el tarro de maní este por los suelos, eso es lo de menos ahora, estan enamorado pero quién iba pensar que está sería la última vez en la que los dos se sentirían tan cerca.

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El Grito Del Amor [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora