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Su cita fue tan cliché pero perfecta, él la llevo a un restaurante de comida italiana, hablaron de todo y de nada, luego fueron a ver una película, fue de esas películas románticas-cómicas que a nadie suelen gustar pero la intención al elegirla fue que hablarían para conocerse más, se sentaron hasta atrás en la esquina con la intención de seguir hablando sin interrumpir a nadie, aunque solo hubieran 5 personas más. Mía no tenía en la cabeza besar a Theo pero sabía que si se daba la oportunidad ella no se negaría y él pensaba que sería muy atrevido de su parte besar a Mía en su primera cita pero creía que la chica Clark era atractiva y quería saber si besaba bien. Al final es cierto que la curiosidad mató al gato pero el gato murió sabiendo

En efecto no vieron la película ya que hablaron la hora y media que duraba y aún así siguieron hablando aún después de llegar a la casa de Mia donde extrañamente no había nadie en su casa, o todos estaban en su cuarto o todos habían salido pero tuvieron la privacidad que a ambos les gustaba.
Mía le contaba a Theo como iba a en colegio cuando él tuvo la suficiente valentía para acercase a ella pero sin besarla, sus labios solamente se rozaban.
- ¿Te quitarías si te beso? - preguntó tontamente Theo.
Mía no le respondió solo le sonrió y lo beso, tan lento y tiernamente definitivamente no fue el mejor beso de ambos pero figuraba en uno de los más tiernos. Ambos disfrutaron de ese momento. Theo jalo a Mía y ella quedó a horcajadas encima de él.
- Lo acabo de descubrir, acabo de descubrir que me encanta tenerte así - comentó el chico, Mía sonrío, separándose de él y poniendo su frente en el cuello de Theo.
Ella se aventuró y beso el cuello del chico, un escalofrío recorrió a Theo y se apartó un poco de la ella.
- No hagas eso - dijo el jadeando.
- ¿Quieres que pare? - preguntó dulcemente Mía.
- No - contestó el chico con una sonrisa pícara.
Mía sonrío y siguió besando el cuello del chico hasta que Theo la movió y quedaron recostados en el sillón.
Ella puso su cabeza en el pecho de él, justo donde podía escuchar el latir de su corazón.
-¿Por qué te quedaste tan quieta y callada? - preguntó Theo con un poco de burla en su voz.
- Shhhh - respondió la chica - estoy escuchando tus latidos.

Y cuando menos se dieron cuenta los dos se quedaron dormidos. No sintieron cuando Sky, Jake, Kendall y Logan llegaron a casa y como grandes hermanos no los despertaron aunque como hermanos responsables Jake y Logan se acercaron a ver donde tenía las manos Theo, al asegurarse que estuvieran en un lugar adecuado subieron lentamente las gradas y cada uno se dirigió a su habitación sin hacer ningún ruido.

Mía recostada en el pecho de Theo y Theo sintiendo como su ventaja en la apuesta subía hasta las nubes.

Querida Mía: ¿Mi debilidad? Tus ojosWhere stories live. Discover now