Capitulo 4:
Narración desde el punto de vista de Adeleine.
Luego de decirle mis "últimas palabras" a mis hermanos, cerré poco a poco mis ojos, sintiendo que todo a mi alrededor empezaba a desaparecer como si el viento me llevara a un lugar desconocido; pero me di cuenta que no estaba en lo correcto, estaba en el mismo sitio - en la Mansión Dumbledore- fue en ese instante que pensé que todo había sido un efecto secundario, un desmayo, causa de la lucha anteriormente dada.
Me fui levantando un poco aturdida con el pensamiento rondado, causando así un dolor de cabeza fuerte, cuando pude aclarar bien mi vista, pude lograr visualizar a mi hermana Ariana a unos cuantos pasos de mi. Ella estaba algo desorientada -un poco más de los común- pero estaba bien. Solté un suspiro, por fin todo iba a estar tranquilo, posterior a eso me dirigí hacia ella, pero antes de llegar escuche unos sollozos que me hicieron cambiar de parecer. Les tenía que demostrar a mi hermanos que estaba allí, junto a ellos.
Rápidamente me acerque a ellos, estos se encontraban abrazados, me afectó un poco pero pensé en la alegría que tendrían con mi resurrección, mi despertar o lo que se que haya pasado, con esto en mente apure mi caminar. Cuando estaba a punto de tocar el hombro de mis dos hermanos, mi mano desapareció, para otra vez estar ahí, como si fuera transparente; otra vez intente tocar el hombro, pensado que mi mente estaba jugando conmigo, pero no, se había repetido lo mismo. Allí fue cuando caí en cuenta que no estaba ni muerta, pero tampoco estaba viva, estaba como en una especie de ¿limbo?
Empecé a desesperarme, a llorar y a gritar, pensando que era un muy mal sueño, uno donde estaba sola y no sabia que hacer. Así fueron pasando las horas, hasta que recordé el cuento del Giratiempo, el joven hechicero y el oscuro mago, y pude llegar a hipótesis que ese podría ser mi caso o eso quería creer, porque si no era eso, entonces estaba perdida, muy perdida.
Con eso en mente, decidí aprender a utilizar mis nuevas habilidades para poder ser una buena protectora para mi familia, al principio no fue fácil era como empezar mi primer día en Hogwarts, pero al final con un poco de sacrificio y esfuerzo empezaron a surgir mis habilidades.
Al no tener mi varita, tuve que aprende a canalizar mi magia sin ella, es decir, reforzar mis estudios en hechizos no verbales. Fue un poco complicado, ya que no tenía con quien practicar , pero eso no me desanimo, al tiempo logre hacer muñecos o estatuillas móviles que hicieran hechizos o movimiento de ataque y con eso pude obtener mi cometido. Debo admitir que más de una vez me dieron una paliza.
Algo que también pude percibir con el tiempo, es que los únicos seres que me veían eran las criaturas mágicas, y gracias a eso pude aprender de las mismas, era lo único que me hacía olvidar mi realidad, mi vida anterior, mis hermanos, mis amigos...
Ahora regresando de mi... lo que sea que tengo a de admitir que no todo era tan malo; al estar entre la vida y muerte, podía estar junto a mis hermanos o cualquier otra persona como por ejemplo mis amigo o mi vecina Batty, en forma de espectro, con ello conseguí ayudarlos de forma indirecta en duras decisiones o en combates mágicos aturdiendo al enemigo y también se podría decir que algunas veces pero solo en algunas... bueno... ¿a quién engaño? cada vez que puedo, voy al callejón diagón para poder crear o ayudar a cualquier niño a hacer una broma o travesura.
Para los que tienen duda sobre mi vida fantasmal, mi vestuario cambia todos los días, (no pregunte el cómo, porque ni yo misma lo se) ademas de que nunca duermo, ni me alimento, ya que no lo necesitaba y al parecer nunca envejeceria. -Forever young-
Retomando un poco el después de mi "muerte", tengo que admitir que los cuentos de niños, son una vil mentira o mejor dicho, no cuentan la historia completa, fue complicado y desastroso ver como mis hermanos se peleaban en mi funeral o como se llevaban a Ariana, ya que una supuesta "amenaza" para el Estatuto Internacional de Secreto Mágico y por eso la colocaron en el Hospital San Mungo de Enfermedades y Heridas Mágicas. Fue un total conflicto, ya que ni Albus, ni Aber lo aceptaban, pero no lograron hacer nada para sacarla. Lo único positivo de eso fue que unieron fuerzas y por fin se reconciliaron, además de que tal vez Ariana estaba a salvo con personal calificado, pero no fue así a los días desapareció, nadie la encontraba y tampoco yo. Era como si hubiera muerto. Me sentí culpable por no cuidarla, empezó nuevamente mi desesperación y depresión pero rápidamente me recupere ya que recordé que todavía tenía que cuidar de mis otros dos hermanos.
Con todos estos sucesos, en menos de dos meses, Aberforth al principio no quería culminar su último año en Hogwarts para no dejar a Albus solo, ya que temía que le pasara algo o muriera mientras él estuviera en el colegio, pero al final aceptó, gracias a mon, es decir, mi. Se preguntaran ¿por qué hermosa Adele? pues ya que soy del mas allá moví algunas "cartas" con mi magia (no respondere esa parte), haciendo que el día que llegara la lechuza con la carta de ingreso, también llegará otra para Albus, preguntado si él pudiera ocupar el puesto de transformación y también el de jefe de casa de Gryffindor; debido a que el otro profesor que se ocupaba de estas tareas, se había retirado por la edad. Finalmente Albus acepto para estar junto y proteger a nuestro hermano.
Luego de que mis hermanos estuvieran bien en Hogwarts, a las pocas semanas me estaba dirigiendo a la boda de mis mejores amigos Hardwin e Iolathe quienes se había comprometido, en la temporada en la que yo estaba estudiando para ser medimaga.
Ese día fue tan inolvidable, debido a que cuando ingrese al patio de la mansión Potter, me dirigí hacia donde se encontraban las sillas para esperar y ver la unión, en cada uno de estos puestos había un cartelito con el nombre de la persona a la que le correspondía sentarse en ese lugar. Lo especial fue que en la primera fila, donde se sienta los familiares más cercanos, se encontraba mi nombre: Alexandra Dumbledore, heroína caída y mejor amiga de los novios y en letras pequeñas No tan buena bromista, ni jugadora como el Sr.Potter pero si lista
Cuando vi eso, me prometí dar todo para poder regresar y así lograr ver a mis seres queridos, además para poderle recordarle y restregarle a mi querido amigo que yo soy perfecta en todo y el en nada. Aún no se como Iolathe lo soporta.
Con esta idea en mente logré finalizar mis primeros año como "fantasma", me sentía orgullosa ya que Aberf, había culminado sus estudios y había empezado a trabajar en una pequeña tienda de artículos de calidad para Quidditch y Albus siguió con su trabajo como profesor , mientras que yo visitaba todos los países posibles, en busca de nuevas criaturas y nuevos conocimientos sobre ellos
Para después en el verano acompañarlos para seguir con la búsqueda de Grindelwald y de estar forma él pudiera pagar por sus acciones en Azkaban
Lo que más nos preocupó durante la investigación fue que según fuertes cercanas, Gellert ese mismo año- 1901- había logrado poseer La Varita de Saúco.
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Espero que les guste
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J.T.
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The Greater Good (Newt Scamander)
FanfictionTodo esto comenzó el día que fui a buscar a mi hermano Aberfort del Andén 9 3/4, al llegar a casa tuve un mal presentimiento, sentimiento que me provocaba todos los días el nuevo amigo de Albus mi mellizo. Ciertamente esa tarde no fue para nada comú...