La vida y sus extrañas manías

Capítulo cuarto: Quien algo quiere saber, algo tiene que investigar

El padre de Genevieve no quiso desvelarnos el motivo por el que se encontraba en el colegio pero, por alguna razón que desconozco, tuve la corazonada de que aquello se debía al caso del asesinato de mi tío.

Comenzó a llover de forma intermitente, era una de esas típicas tormentas de verano que simplemente consiguen que el ambiente sea un poco más húmedo durante un periodo corto de tiempo. Las horas pasaban tan lentamente que incluso las gotas de agua que hacían carreras por el cristal de la ventana avanzaban más rápidamente que las agujas del reloj. Aquel día las clases se me hicieron interminables, ya que sólo pensaba en una cosa: comenzar cuanto antes la búsqueda del asesino de mi tío Javier. Este pensamiento me acompañaba más intensamente desde que vi a la policía esa mañana en el pasillo del instituto, ello me hizo reflexionar sobre si el asesinato de mi tío tenía relación o no con el instituto o si, por el contrario, la visita matutina de la policía no tenía nada que ver con el caso.

-"Nacho, ¿me éstas escuchando?"

Era Genevieve quien me había hablado y la respuesta era clara: no había escuchado nada de lo que me había dicho. Es más, ni siquiera sabía en qué clase estábamos.

-"Lo siento, estaba navegando entre mis pensamientos, ¿qué me decías?"-dije tratando de sonar poco distante.

-"Te decía que si habías oído lo último que ha dicho el profesor, pero ya veo que no... ¿Te ocurre algo?"-dijo esperando impacientemente mi respuesta.

-"La verdad es que sí, desde que he visto a tu padre esta mañana he estado pensando en si su visita al instituto tiene relación con la investigación del caso de mi tío...".

-"¿Piensas que la persona que mató a tu tío tiene algo que ver con el colegio? No sé, me parece una teoría un poco rebuscada"-comentó Genevieve bajando la voz para que no la escuchara nadie.

-"Ya no sé qué pensar, tu padre no ha querido desvelarnos nada acerca de su presencia en el colegio, y el caso prioritario en estos momentos en el departamento es el asesinato de mi tío... Así que existen muchas posibilidades de que esa sea la razón por la que estaba aquí tu padre".

La mañana transcurrió lentamente, muy lentamente. No podía parar de pensar en que alguien había matado a mi tío y en que muy probablemente esa persona estaba relacionada con el colegio. Algo me decía que así era, sin embargo, mi mente no era capaz de establecer relación alguna entre el colegio y mi tío Javier.

Tras mucha espera, sonó la campana que marcaba el fin de las clases y Genevieve y yo comenzamos a recoger lo más rápido que pudimos para salir cuanto antes.

-"Genevieve, esta tarde tu padre estará trabajando, ¿no?" - pregunté cuando nos alejamos del bullicio escolar.

-"Sí, hoy tiene que doblar, ¿por qué lo preguntas?".

-"Necesito saber más acerca del caso... A lo mejor tu padre tiene algo de información en su despacho, algo para saber dónde empezar a buscar" - dije con decisión.

-"Entiendo que quieras saber más acerca de la muerte de tu tío pero... ¡estás hablando de hurgar en el despacho de mi padre! Si se da cuenta de que alguien ha rebuscado entre sus papeles, sabrá que yo tengo algo que ver, soy la única que sabe dónde está escondida la llave de su despacho"- respondió con clara preocupación en su tono de voz.

-"Si no fuera tan importante para mí no te pediría este favor, pero la policía no me dice nada y necesito saber algo..." - comenté angustiado.

-"Está bien. Mi padre volverá a la hora de cenar, así que tienes toda la tarde para investigar. Eso sí, procura no colocar ningún papel fuera de lugar o se dará cuenta de que alguien ha entrado"- concluyó mi amiga después de haber pensado en la respuesta durante un buen rato.