Solo tú.

Capítulo 4

Estaba sentada en mi cama con la cabeza pegada a mis rodillas abrazandola con mis manos frias, miraba por la ventana grande que daba al balcón veía  las gotas de lluvia  que resvalavan. No entendía  que pasaba conmigo no podia conciliar el sueño en tres días  y cuando por fin lograba dormir  tenía  extrañas sensacionales.

—Jayden, ¿te sientes mejor?—Mi mamá  entro a la habitación.

—Si mamá — me en volví  entre sus brazos.

—No tienes fiebre, creo que no ire al  trabajo para cuidar de ti.

—Mamá,  no tienes que hacerlo. Descuida estoy bien.

—¿Segura?.

Asenti, mi madre sonrió  y salio de la habitación, un suspiró y termine por recostarme, la lluvia había parado, puse mi short deportivo, playera y tenis. Era momento de salir a correr un poco al parque, algunos rayos de luz salian de entre las nuves. Acomode mi coleta alta y comenze a correr.

—Bena tarde Jayden.

—Buenas tardes señora Darlin.

Continue trotando al rededor del parque, después  de tres vueltas estaba exhausta, sentia mi ritmo cardiaco acelerado. Paré,  recuperando el aliento levante mi cabeza con las manos en la cintura una parvada  de cuervos negros estaban  en un arbol una especie  de miedo recorrio mi cuerpo, uno de ellos empezó  a aletear, comencé  a correr con todas mus fuerzas tratando de salir del parque, golpe fuerte.

—Tranquila.

—Lo siento yo huía —dije asustada.

—De ellos—Nicolas señalo a los cuervos—Son indefensos.

—No lo creo.

—Solo por que uno te atacó,  no debes juzgar al resto.

—¿Como lo supiste?, que  tonta el unico que se dio cuenta fue Adam.

Asintió.

—Pero él  insistió  en que no lo mencionara a nadie.

—Descuida ese secreto esta a salvo conmigo.

Sonreí,  después  de unos segundos reaccione a la situación.

—¿ Tú  que haces hablandome?

—Lo sé. Estaba de camino a casa de Adam.

—Adam es mi vecino.

—¿Enserio?—sonrió.

Entre abrí  mis labios  levante mis cejas y sonreí—jamás  te había  visto sonreír.

Suspiro—También  eso lo sé .

—Creo que todo sabes.

Me miro profundizando sus ojos verdes en mi—No todo Jayden.

Continuo su camino después  de decir esto.

—¡Oye, espera!—dije tras él.

—¿Si?.

—No creo que seas tan malo como  todos te tachan en la prepararoria.

Hizo una linea recta entre sus labios y volvió  a mirarme fijamente —Es mejor que pienses como los demás.

Lo mire firme—No me gusta pensar como los demás.

Después  de esto lo deje parado en medio de la calle y continue trotando hasta casa. Llegue a la puerta y cuando saque las llaves para abrir calleron hasta el piso me incline para levantarlas y escuche un susurro serca de mi oído,  mi nombre en repetidas ocasiones pero no había  nadie. Estaba sola mire hacia casa de Adam y Nicolas entro. Abri la puerta  una punzada  en mi cabeza comenzó  a atormentarme, camine tambalenate logre llegar al sillon de la sala. Intentando relajar mis musculos me recline y mi mente se fue a otro lugar.