Estoy roto, roto en mil pedazos y es verdad que fui yo él que me puse de rodillas a suplicarte que me rompieras en los más pequeños trocitos las veces que hiciese falta para no enamorarme de ti.
Lo conseguiste, espero.
Pero me encuentro roto, vacío y perdido.
Perdido sin nadie a quien poder abrazar.
Aunque ya no quiero abrazarte no puedo evitar echarte de menos.
No me importa echarte de menos, supongo que es una fase, supongo que pasará.
Supongo que no debo suponer.
Pero aunque ya no quiera besarte sigo mirando en cada foto esos preciosos labios.
Ahora beso otros labios.
Ahora abrazo otros cuerpos...
Ahora soy más yo y eres menos tú.
Ahora soy más feliz.
Pero no más feliz que cuando estaba contigo...
Esto es el final...
Y ahora que ya no estás.
Que de verdad ya no dueles.
Y que por fin dejaste de ser tú.
Dejo de escribir.
Para siempre.

ESTÁS LEYENDO
Por encima de todo
RomanceLa verdad que somos historia retratada en un par de versos, una historia que se comparte, que recorre todos los callejones de Internet y que por casualidad ha terminado delante de tus narices, llamalo magia. Bueno ¿estas listo para introducirte en e...