El Internado San Temuer

Capítulo 3: "Primer pie en el precipicio"

Liam no podía creer a quién sus ojos veían, era Anastasia Thompson la que entró por esa puerta sana y salva.
Ella venía entrando normalmente como cualquier día a clases, no afectandole lo que le había sucedido anoche, toma asiento junto a su hermana Antonella en un puesto que se encontraba a la izquierda de donde se sentaba Liam, él de inmediato se paro a hablarle.
-¿Que haces aquí? ¿Donde estabas? - Pregunta Liam desconcertado.
Anastasia no alcanzó a responderle nada porque la profesora Ana mandó a que se sentará Liam de inmediato.
-Liam Collins a tu asiento-
-Necesito hablar con Anastasia-. Responde Liam.
-Pués yo necesito dar una clase de historia-. Responde la profesora.
Liam se fué a su asiento y no se pudo parar en ningún momento ya que la maestra Ana lo tenía bien vigilado.
-¿Qué querrá Liam ahora?-. Susurra Antonella.
-Saber donde estuve anoche, supongo-. Responde Anastasia.
-No es el único al que le gustaría saber donde pasaste la noche-. Expresa Antonella.
Ni Anastasia sabía que responder a eso, así que pensó su mejor excusa.
-Castigada-. Responde firme Anastasia.
-Eso ya lo sé Liam nos lo contó, lo que me interesa saber es: ¿Cuál será tu castigo?, eso me tiene preocupada- Responde Antonella.
-¡Silencio! Si no paran de hablar las separare-. Interrumpe la profesora.
La conversación entre las mellizas Thompson se detuvo, luego de los regaños de la maestra a nadie le quedaba ganas de hablar.
La clase de historia terminó, el recreo comenzó y Liam ya no aguantaba más de no poder hablar con Anastasia, se dirigió hacia ella verdaderamente sorprendido una vez más.
-¿Que te ha pasado?- Pregunta Liam, curioso.
Ambos caminan un poco por los pasillos hasta encontrar un lugar para hablar sin personas alrededor.
-¡Respóndeme!- Expresa Liam ya perdiendo la paciencia.
-Al tú, cerrar las escaleras no tenía por donde escapar así que tan sólo me escondí en un rincón de allá abajo y pensaba en pasar la noche ahí, moría de frío, escuché unos ruidos que no me dejaron dormir, eran las personas que habíamos visto que seguían rondando por esos lugares buscándonos, uno de ellos se dirigía por donde entramos tú y yo y abrió la entrada por dentro precionando algo que se encontraba en una esquina de alguno de los últimos escalones de la escalera, él o ella subió y no lo ví bajar, entonces me colé y subí; no había nadien en la sala así que aproveché de escapar, mi mejor opción era dormir en una de las habitaciones vacías y ahí pase la noche, luego desperté en la mañana mientras Antonella, Rouse y Ruth se duchaban fuí por mis cosas y esperé que salieran todas de las duchas, me bañé y me cambié ropa, luego fuí a la cocina cuando todos tomaban desayuno y comí algo, nadie me notó así que quize llegar tarde para aparentar haberme quedado dormida y no levantar sospechas.- Cuenta Anastasia.
-Pensé que te habían cogido ellos-. Expresa Liam.
-Por suerte nó, ¿Cómo se te ocurrió dejarme ahí abajo?- Pregunta Anastasia molesta.
- Te perdí de vista, pensé que ya habías subido, me seguían y tan sólo escapé-. Cuenta Liam.
- No volveremos ahí abajo, es peligroso- Expresa Anastasia.
- No sabemos ni lo que sucede ahí- Responde Liam.
- Es mejor no saberlo, ¿Que le has dicho a mi hermana y nuestros amigos sobre mí?- Pregunta Anastasia.
- Que había sido una reunión de profes cualquiera en el salón 13, nos pillaron porque estornudaste y me dijiste que escapará, te echaste la culpa de todo y finalmente que te habían castigado- Responde Liam.
-Bueno, haremos creer eso, prométeme Liam que nadie sabrá lo que en verdad sucedió anoche y que no volverás a bajar ahí nunca- Expresa Anastasia.
Liam piensa por un momento y finalmente responde.
- Esta bién; Te lo prometo, pero debemos investigar lo que sucede ahí y ¿Si tiene que ver con el internado?-. Pregunta Liam.
-No es problema de nosotros-. Responde Anastasia.
Liam sólo responde con un suspiro, sabía que en el fondo su amiga tenía razón pero la curiosidad le mataba por dentro. Tocaron el timbre y los alumnos ingresan a clases nuevamente, Liam y Anastasia solo se concentraron en las materias que les pasaban sin tocar ni pensar en el tema de nuevo.
Se dieron fin a las clases y los estudiantes quedaban libres hasta la hora de estudio obligatoria.