Nuestro amor no comprendido. (Jeff the Killer x Ticci Toby) (Editando ♡)

Proxy.

Narra Jeff

Meses atrás Slender intento atacarme, ese poste hizo que los estúpidos policías casi descubrieran mi escondite.
Vivo en una pequeña cabaña en el bosque y a el poste no le agrada para nada, ya que el bosque "es de él" o es lo que siempre dice, sus malditos proxys no ayudan, dos idiotas Masky y Hoodie un par de homosexuales.
He escuchado que hay uno nuevo, más joven que los otros, debe de ser un débil niñato, el poste debe de estar muy desesperado para recurrir a un niño. Justo ahora, estaba caminando por el bosque con el objetivo de llegar a el cementerio donde estaba mi familia. Se que un asesino debería ser un psicópata a sangre fría, sin sentimientos, ni emociones, pero ese tipo de persona no era yo. A veces de verdad los extraño.

Camine por el frío de la noche y a lo lejos vi las lápidas de mis padres. Caminé a paso lento hacia ellas, estaban tan solas como siempre. Hace días, logré escuché que mi hermano había sobrevivido, pero ha pasado mucho tiempo, no se cuánto exactamente, días, meses, tal vez años desde eso. Leves gotas de agua me sacaron de mis pensamientos.

— Genial.. — Dije con sarcasmo.

Gotas de lluvia empezaban a caer, cada vez más y con más velocidad. No quería irme, aún no, no me moví hasta que escuché algo detrás de mi, me gire y vi una sombra cerca. Una nueva víctima.
Me acerque a paso lento y me di cuenta que eran tres, saque mi cuchillo listo para atacar, pero antes de poder hacer algo, una de esas personas corrió a otro lugar y saco una especie de hacha con la que le corto la cabeza a una mujer que no había visto. El cadáver de la mujer cayo al suelo y en ese momento la luz de un trueno iluminó la escena. Un chico alto, de cabello castaño, un suéter café con dos hachas en mano con unos gogles y un bozal que cubría la mayor parte de su rostro. Las otras dos personas se acercaron a él. A esos idiotas si los conocía.

"Darle un buen susto servirá para que vea quién manda aquí."

Pensé con una sonrisa en mi rostro, me acerque a ellos con la mayor seguridad posible.

— Pero miren a quienes tenemos aquí, un grupo de idiotas. — Caminé a paso lento a ellos.

— ¿Tu no lo estas? — Dijo el de la mascara de mujer, Masky. Di un gruñido de enojo, como odiaba que me insultaran.

— Por lo menos yo no seré el idiota que morirá a manos de el asesino más hermoso. — Sostuve mi cuchillo con fuerza y una gran sonrisa en mi cara. Masky y Hoodie salieron corriendo dejando solo al chico, esto será mas fácil de lo que pensé.

— Creo que tus amigos te han abandonado. —

— ¿Qué te hace pensar que son mis amigos? — Dijo en tono serio, su voz era como la de un chico de 17 años, pero tenia un tono desinteresado y grave al momento de hablar.

— ¿No me tienes miedo? — Dije comenzando a caminar a su alrededor.

— ¿Por qué te tendría miedo a un mapache? —