Omen (Yaoi/Gay)

Capítulo 3 ''Un Disparo en la Oscuridad''

Hola (?) *inserte el meme de han pasado 84 años* ( ͡°; ͜ʖ; ͡°)

En una de mis otras novelas ya expliqué el motivo de mi larga ausencia, pero para los que no leen esa otra historia, he estado de vacaciones. Vacaciones que no tuve hasta principios de julio que es cuando por fin terminaron mis clases, por lo ya podrán entender que no tuve tiempo de escribir. Como siempre intento escribir cuando puedo.

A todo esto quiero decir que nunca dejaré mis novelas sin terminar, así que por favor tenedme paciencia :'^

Y antes de leer el capítulo quería aclarar por última vez que Elara no supone ninguna ''amenaza''. Esta historia es yaoi, por lo tanto no habrá un romance entre Elara y Cedric. Son solo amigos. Así que no la odien, por favor (?) Elara is bae.

Y hablando de Elara <tres

*La foto del capítulo es un hermoso fanart de ella hecho por Guacamole- Muchas gracias nuevamente, asdfjkld.

*La música del capítulo, que como siempre invito a que la escuchen mientras leen, es ''A Shot in the Dark'' de Within Temptation.

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Al salir de clases, Elara y yo nos dirigimos a la parte del pueblo más frecuentada y dónde había todo tipo de pequeños establecimientos, en busca de pistas que nos ayudaran a llegar con el significado de aquel tatuaje.

-¡Hay demasiado tiendas aquí! ¿A dónde vamos exactamente? -gimoteó Elara, mareada de tanta vuelta.

-Estoy seguro que tiene que haber una librería por aquí... -murmuré, sumido en mis propios pensamientos.

-¿Como esa? -señaló Elara, apuntando hacia una tienda con el nombre de ''Librería Olde Wells'' que estaba al otro lado de la acera.

Enarqué una ceja, observando con atención el letrero de la tienda y el escaparate. Qué extraño. Nunca me había fijado en que había una librería con ese nombre por aquí.
Aparté la mirada del establecimiento y la clavé en el semáforo que indicaba verde. Crucé la calle con Elara y entré a la librería, dónde me quedé contemplando minuciosamente el lugar. Era una librería antigua, pero común y corriente, no tenía una decoración mística ni nada por estilo.

No creo que vaya a encontrar lo que busco aquí.

Suspiré decepcionado y me di la vuelta en dirección de la entrada para marcharme. Justo entonces, escuché una voz llamarme por detrás, donde estaba la caja registradora.

-Oh, presi. Qué sorpresa encontrarte por aquí.

No podía ser. ¡Esa voz solo podía pertenecerle a Roberts! ¿Qué hacía él aquí? Tragué saliva, y me giré lentamente a mirarlo, como en las películas de terror.

-El sentimiento es mutuo -Le aseguré, mis palabras impregnadas de sarcasmo -. ¿Qué haces tú aquí?

-¿Acaso no lo ves? Estoy trabajando -Se encogió de hombros Hades.

-Pero, ¿por qué justamente aquí?

-Negocio familiar -Se limitó a responder -. Esta vieja librería le pertenece a mis abuelos.

Me quedé sorprendido. No esperaba que alguien como él fuera lo suficientemente responsable como para ayudar a alguien. Mucho menos a sus familiares.

Quizá lo había juzgado mal.

-Hey, Cedric -Me llamó de pronto Elara.

-¿Sí? -susurré con disimulo y dándole la espalda, deseando que Hades no me tomara como un loco que estaba hablando consigo mismo.