~El niño del Faro~

sueño

Todo era tan raro, parecía un sueño, JB estaba totalmente impactado al ver que ese chico estaba flotando en el aire, más bien ese chico controlaba el aire!
, y en su cuello colgaban dos gemas, una color blanco y además la tan ansiada gema verde.
¡Pero esto era imposible!, con tanto impacto JB cayó al suelo y quedo completamente inconsciente. Días más tardé, JB despertó pero no tenia idea alguna de dónde se encontraba, hasta que se dio cuenta que estaba en un hospital en la gran ciudad, no sabia que al parecer servicios sociales se iba a hacer cargo de el de nuevo, pero surgió de la nada una nueva alternativa, una supesta familiar decidió hacerse cargo de JB, el sería trasladado a su nuevo hogar, con una supuesta hermana mayor que también sobrevivió al accidente del faro.
No pasaba ni una noche en la que JB se preguntaba si todo lo que vivió en su orfanato fue real, ya que fue diagnosticado con severos problemas mentales, y dudaba sobre la existencia de aquellas personas que parecían ser sacados de un cuento de hadas, asi que mejor decidió olvidar todo lo que había estado en su pasado y siguió su rumbó hacia su nuevo hogar.

Llego el gran día, donde JB se rencontraria con su hermana, JB bajo del avión y fue a recoger su maleta, en la sala de llegadas se encontraba una chica de aproximadamente veinte años con un cartel que señalaba aquellas iniciales "JB" y al costado un pequeño dibujo de una faro, JB se acercó lentamente y al llegar, empezó a entrar en llanto y le dio un gran abrazó a su hermana.

-como sabes que todos me llaman por mis iniciales- dijo JB entre lágrimas

- cuando eras pequeño lo primero que dijiste fue "JB" asi que nuestros padres decidieron que esas serian tus iniciales, eso es algo que no se olvida- dijo la joven secando sus lágrimas

-pero si esas son mis iniciales, ¿cuál es mi nombre?- pregunto muy confuso

-tu nombre siempre fue Jackson Beck, pero siempre de cariño todo mundo te llamaba JB- menciono la chica de una manera muy contenta

- vaya nunca hubiese pensado, que me llamaria de esa forma- dijo un poco triste

-que pasa?, no te gusto tu nombre?- menciono la chica un tanto desorientada

-no...no, claro que me gusta mi nombre, solo que es una noticia muy fuerte y no tengo palabras-

-bueno, ya es hora de ir a tu nuevo hogar- dijo la chica en un tono alentador

-si claro, pero no me has mencionado tu nombre-

-ah, disculpa, mi nombre es Luna, pero me puedes llamar como gustes-

-si, que lindo nombre-

-gracias, pero se hace noche y tenemos que irnos-

-de acuerdo- dijo que el chico un tanto dudoso

Luego de pronunciar esas palabras la chica lo llevo hasta una camioneta, la cual los llevaria hasta el centro de la ciudad. JB seguía muy confuso, esto de tener una hermana era muy nuevo y no sabía de que manera reaccionar, pero algo que le llamo mucho la atención era un collar que poseía la chica en su cuello, era un simple liston que tenia unas piedras brillantes incrustadas, solo lo que más llamaba la atención era que estas piedras brillaban con y sin la necesidad de la luz, lo que le resulto muy extraño...

Una hora después, llegaron a una gran mansión en el centro de la ciudad, esta contaba con muebles muy costosos y finos, lo cual hacia sospechar mucho más a JB.

- aquí viviremos?- dijo JB con mucha duda

-si, verás, de pequeña también fui dada en adopción, solo que me adoptó una pareja muy rica que no podia tener hijos, hace dos años ellos murieron y al no tener más familiares me dieron una herencia millonaria, con la cual me mantengo economicamente-

-vaya suerte con la que saliste hermana-

-si, jajaja- dijo luna muy nerviosa

- y con tal mansión, donde dormire yo?-

-claro, ven sígueme...-

La chica llevo a JB hasta un cuarto más grande de lo que uno se podria imaginar, pero en la cama había tres collares con los mismos colores que JB ya conocía.

-que es eso?- dijo JB señalando hacia la cama

-No es nada, solo son unos collares que se me olvidaron aquí mientras arreglaba tu cuarto anoche- dijo la chica muy nerviosa

- de acuerdo?- respondió JB muy dudoso

-solo en esta casa hay una regla y es no entrar al sótano, de acuerdo?-

-de acuerdo-

-bueno, yo ya me tengo que ir a dormir, dejare que te instales y que explores un poco la casa-

La chica se despidio de su hermano y se fue a dormir, JB se instaló y exploro un poco la casa, pero estaba muy agotado por el viaje, se puso la pijama y se fue a dormir. A las doce de la noche JB despertó, se le habia ido por completo el sueño gracias a un sonido que provenía de la casa, se armó de valentía y decidió ir a investigar, JB tardó horas en buscar por toda la inmencidad de la casa, hasta que al final de un pasillo en total oscuridad debajo de la puerta había una luz roja y se escuchaban unos gritos como de horror y tortura, justo cuando JB estaba apunto de entrar en aquella habitación, sintió una mano en su hombro y un fuerte escalofrío recorrió todo el cuerpo de JB...