That Girl

Decisión final

TORI'S POV

Había despertado con muy buena actitud, era de esos días donde me sentía indestructible, quién diría que la persona que logró ponerme así, fue la misma que hizo que todo se fuera para abajo.
Jade, Jade, Jade... su nombre resonaba en mi cabeza, como la canción que había escrito Robbie, en mi mente había mil cosas pero más estaba ella. Y me gustaría decir que todo era para bien, pero no, la razón por la que no podía dejar de pensar en ella era por el tal Tony.
Creí que yo le gustaba, pero la muy perra sale con que se va a casar con ese wey. Yo soy mejor que él, de hecho, estoy segura que él le atrae por lo que había dicho Cat, tenía muchas cosas en común conmigo: llamarse Tony Vela, ¿eso qué?, las terminaciones 'ri' y 'ga' suenan mejor. Ser medio latino, a simple vista se ve igual de americano que Jade, de no ser por su acento no creería que fuera mitad mexicano igual que yo, sólo que yo sí parezco latina.
Intenté distraerme con Beck, no puedo negar que él me hace sentir especial, pero aún así había algo que no me dejaba actuar con normalidad, obvio yo sabía por qué.
Cuando Beck me llevó a casa ésta estaba sola, y dado a que no tenía nada que hacer, supuse que sería una buena idea visitar a Jade, sinceramente me valía un pepino sí tenía compañía.
Su casa se encontraba a treinta minutos de la mía a pie, tiempo que me sirvió para repasar lo que le diría al llegar. No debía actuar como una novia celosa, porque no lo era, pero tampoco podía permitir que me cambiara de la noche a la mañana por un chico random que conocía de no sé dónde. Maldita sea, Tori, ¿Quien soy yo para decirle con quién estar?, estoy haciendo justo lo que ella con Beck y conmigo, agh, ni siquiera sé por qué me molesto, no es como que se vayan a casar de verdad, ¿verdad?.
Cuando llegué a su casa noté que no estaba su auto, ni el de sus padres. Era posible que el pequeño Jason estuviera en casa, toqué el timbre por lo menos tres veces y no hubo respuesta. Sabiendo que la casa estaba vacía estuve a punto de dar marcha atrás a mi visita, pero me sentía algo reprimida, desde el fin de semana no había podido interactuar con Jade de la manera que me gustaría, es decir, los pocos momentos que había compartido con ella me fueron insuficientes, pues no habíamos podido conversar a solas, siempre conseguíamos la interrupción de terceros. Para mi, eso era tiempo perdido, algo que no me podía permitir, así que no dejaría que pasara otro día sin tener algún otro tipo de cercanía.
Pude haberla esperado en la entrada, pero su casa era muy elegante, posiblemente si a algún vecino se le ocurría observar la fachada me miraría como una intrusa, no quería meterme en problemas, por lo que realicé el segundo plan. Fui a la parte de atrás y con la ayuda de unas escaleras móviles que habían a un costado de su cochera, subí por ellas hasta llegar al piso superior, exactamente la ventana de su habitación. La ventana estaba abierta, así que no tuve ningún problema para ingresar.
Una vez adentro, no supe como proceder. Su habitación era ciertamente conocida para mi, había pasado la noche ahí muchas veces antes, pero jamás había estado sin Jade conmigo. Sabía que cuando llegara se molestaría por invadir su privacidad, pero no haría nada indebido, por lo menos nada que no hiciera bajo su presencia. No sabía donde estaba ella, y no quería adivinar porque entonces la respuesta probablemente sería "con Tony", lo detesto, ¿Qué no se hartan?; todo el tiempo que duró las clases no se despegaron, incluso juraría que la vi sonreír, y no con una sonrisa macabra como la que usa siempre, éstas parecían sinceras, estúpida Jade, bipolar como la mierda.
Ya había pasado algo de tiempo y ella no regresaba, estaba aburrida y no quería encender la televisión porque después de todo no era mi casa, no me sentía a gusto usando sus cosas. Me puse a ver algunas cosas que tenía en su pared, como pósters de bandas, su colección de mariposas muertas y algunas fotos interesantes de diferentes lugares que ella misma había tomado. Recordé que una vez la vi guardar una selfie que nos tomamos con mi cámara instantánea en un álbum de fotos, y me tomé la libertad de buscarlo en su cajón, ella me lo mostró una vez, así que su privacidad no aplicaba ahí. Abrí el álbum y la primera foto que me encontré fue una de su familia, sus padres lucían felices, ella tenía como ocho años y cargaba a un bebé, el cual deduzco que era Jason, no puedo describir lo adorable que se veía, a su sonrisa le faltaba un diente, era una nena aún, demasiado tierna y bonita a mi parecer. Seguí mirando algunas fotos similares, sólo que ella y Jason iban creciendo progresivamente, al mismo tiempo que las sonrisas de su familia se iban desvaneciendo, lo cual me partió totalmente el corazón, díganme incoherente pero odio ver que la chica que me hizo pasar malos ratos, viva en decadencia. Después de las fotos familiares venían fotos con sus amigos, obvio que no reconocí a los de su niñez ni pre-adolescencia, me llamó la atención que tenía varias fotos con el mismo niño en diferentes lugares, estuve a punto de ignorar ese hecho pero encontré una descripción al pie de una foto:
"Te extrañaré mucho Jade, espero que nos podamos ver de nuevo alguna vez.
-Tony"
Wow... ¿Ese niño tan feo es Tony? No puede ser el mismo que conocí esta mañana, porque debo admitirlo, Tony Vela era bastante apuesto. Aunque viéndolo bien..., tiene un gran parecido con el niño de las fotos. Agh, el idiota la conoció antes que yo, como sea, Jade me quiere a mi.
Seguí hojeando el álbum, entre las fotos comenzaron a sobresalir algunas fotos de ella y Beck, por alguna razón eso me hizo sentir inferior; ella parecía tan feliz y brillante estando con él, de verdad me dolió que terminaran, eran la pareja perfecta. Y ahora estaba yo entre los dos, ¿Qué clase de persona soy?
Las últimas páginas tenían más fotos de todo el crew, aunque más de ella y yo. Su belleza me opacaba, pero bueno, su belleza opaca a todo el mundo.
Decidí regresar el álbum a su lugar, todo bien hasta que sentí como mi dedo se había enredado a algo, no le tomé mucha importancia y lo jalé, me di cuenta de que lo que enredaba mi dedo era el tirante de uno de sus sostenes, rápidamente lo puse en forma para guardarlo en el cajón, pero tenerlo en mis manos..., sabía que era algo raro pero no pude evitar acariciar la prenda delicadamente. A decir verdad, era más grande de los que yo usaba, y sólo por curiosidad me lo medí sobre mi ropa mientras me miraba en el espejo. Si ella estuviera aquí probablemente me degollaría, no sé en que estaba pensando. Por fin lo puse en el cajón.
Me senté un rato en el sillón que había, pero seguía aburrida, comencé a bostezar y pensé que sería buena idea tomar una siesta; apagué las luces de la habitación y me aventé sobre la cama, al hacerlo reboté y caí al suelo, lo cual me pareció muy divertido. Repetí la acción y conseguí lo mismo, inconscientemente empecé a reír, subí a la cama y di más brincos, cada vez se fue haciendo más divertido y no quería parar, mi cama es dura y la de ella parecía un trampolín; por un momento había olvidado por qué estaba ahí, mi risa crecía al mismo tiempo que la velocidad de mis saltos, todo eran tan divertido hasta que repentinamente se abrió la puerta de la habitación mientras las luces eran encendidas y una silueta gritando corría hacia mi dirección apuntandome con unas tijeras.