Inlakes

Introducción

SPrologo

Me lo volvió a insistir, ayer también y de seguro la semana pasada también lo hizo. Si no empiezo hoy, la próxima semana volverá a insistir. La verdad es que sé que tiene toda la razón, así que decidí hacerle caso.
Gracias por el impulso, la verdad es que sin tí en este "mundo" no hubiera empezado nunca. Gracias de verdad por abrirme la puerta de esta nueva experiencia. Espero algún día poder conocerte, para serte sincero con poder verte sonreír no será suficiente, anhelo poder tocar tus pensamientos, descubrir tus ojos y acariciar tu pelo sin quemarme, sí así, cursi y todo, con ego y todo. De nuevo, gracias.

Este escrito se inserta en la hipermodernidad, término acuñado por Gilles Lipovetsky, en el cual la sociedad, la humanidad, se encuentra perdida, ya sea por el materialismo o por las posibilidades, sin embargo, Lipovetsky en algo erra, el arte aún puede cambiar el mundo.

Esto se trata del comienzo del fin de la hipermodernidad, y el paso a la trascendentalidad.

Secreto

Cuando desperté ese día, tuve la confirmación.
Siempre lo supe.
Existe algo que nos conecta de manera actualmente inconsciente, y algunos lo viven de forma secreta, no es sólo ficción, es real.

La mayoría de las cosas que he "descubierto" me sorprenden para bien y para mal, sin embargo, puedo sentir felicidad por las implicancias, pero esas mismas implicancias son las que también me generan un gran miedo. El solo hecho que algunos utilicen "herramientas sociales inconscientes" de manera oculta o clandestina, es algo oscuro, y tal vez, peor es que aquellos con esas capacidades especiales las repriman, las apaguen, y se entreguen al vacío de la materialidad, apariencias y una vida, sí, vida sin trascendencia.

¿Estoy siendo muy exigente?.
Puede ser, en toda vida existe trascendencia, sólo que en el tiempo y lugar donde descubrí esto, allí vivir de esta nueva forma, es algo común, y la experiencia ha sido tan aprendida y arraigada, que mi sintonización con los parametros morales actuales es compleja aún, y por tanto, los juicios son fuertes hoy en mí, pero la verdad es que sí, allá es practicamente una vida sin trascendencia el no estar conectado.

¿Conectado a qué?... a lo humano.

Debo seguir intentando adaptarme a este tiempo, no debo juzgar, pero aún soy humano.