Es aquí donde me llega karma y me pregunto ¿QUE MIERDAS ES LO QUE ESTÁ PASANDO?
Es el punto en el que te confundes y no sabes que sentir, si dejarme llevar por los vuelcos que provoca Dylan o los estremecimientos de Ly, chico al que acabo de conocer lo cual es un tanto inmaduro e irreal que sienta algo cuando él está cerca de mi o simplemente lo que puedo sentir con tan solo la presencia de ambos y resultaba frustrante el no poder controlarlo como lo he venido haciendo desde hace años, cuatro con exactitud
—He preguntado por ti.— Me estremecí, no temblé por completó... ¿Por qué? Me giñó el ojo. Y entonces el estremecimiento volvió arrasando conmigo.
—¿por qué habrías de preguntar por ella?— preguntó Dylan frunciendo el ceño más de lo que se podía esperar.
—Ella es mi amiga— respondió este adoptando una posición relajada, con sus manos dentro de los bolsillos de sus jeans.
¿Qué? ¿Dijo amiga? Pero si nos acabamos de conocer solo hemos cruzado palabra una sola vez, con razón tiene citas con la loquera de la universidad, está demente ¿sufrirá de alucinaciones?
—Hola.— No es cierto... Yo solo dije "hola". Que idiota soy. Soy una vergüenza para mi familia " si lo eres" gritó una voz en mi mente.
—Tú amiga no quiso conseguirme una cita contigo.— soltó Ly de la nada.
Este chico tiene un serió problema.
—Mae no tiene citas con extraños — y con conocidos tampoco.
—¿por qué das por hecho que soy un extraño?— preguntó Ly mirando a Dylan con una mueca de asco.
—Hasta hace unos días ella nisiquiera sabía quién eres tú. No existías para ella.— Explicó Dylan agriamente.— porqué de pronto apareces diciendo que son amigos, cuando en realidad los únicos amigos que tiene Mae somos By y yo.
La mueca de asco de Ly hacía Dylan cambió a una sonrisa burlona.
—Oye amigo no seas tan prepotente.— este suspira.— esperó volvernos a ver Mayle, me voy al parecer le molesto a tú admirador.
—Si largo, estorbas amigo.— respondió Dylan.
—¡Dy!— lo recriminé con la mirada.— Adiós.
Este solo asintió con la mirada y se marchó.
—Oye... ¿Que diablos Dylan?
—"¿Que diablos Dylan?"— me remedó haciendo una muy mala imitación de mi voz. — ¿que diablos? Mae tienes que alejarte de él es peligroso.
Sin poder controlarlo, me reí en si cara, solté unas cuantas carcajadas.
- Eso... - más risas - sonó muy... ¿cliché? ¡¡¡Por dios!!! Dylan esto no es un fanfic o un libro... Los chicos malos solo existen ahí en los libros y novelas. Ly es solo un chico con complejos... Simplemente está loco o está en proceso a eso.
—Hablo encerio Mae...
—¿Porqué mejor no me dices la dieta del capipaleta?
Este suspiro, y enseguida empezó a hablarme de los alimentos de capitán, los horarios y los días que estarían fuera y que yo haría de niñera con la lagartija ¿que demonios sabía yo de iguanas\largatijas? o lo que sea que sea esa mierda pintoresca.
Horas después entro a la pequeña estancia a la que llamó hogar, lo primero que diviso un ostentoso ramo de jazmines y tulipanes, destacando que la combinación era horrible Jazmines azules y tulipanes amarillos. Eso es de muy mal gusto y al frente de éste By con los ojos fijos en el ramo con una mueca indescifrable.
—¿Richart otra vez?— pregunté mientras dejaba mis cosas en el sofá y me ubicaba a su lado.
—Sorprendentemente no, no es Richart.— pronunció.
Elevé una ceja haciendo una mueca.
—Son para ti.— respondió a mi pregunta silenciosa.
—¿Qué?— Esta me extendió un pequeño sobre.
Traía nota... Tomé el pequeño sobre y lo abrí.
Por lo que muy pronto será.
Me prometí conquistarte y lo lograré amada mía.
A.R
Reí.
—Muy claramente A R se equivocó de "amada"— Volví a reír con más intensidad.
—Para mi no son— objetó.
Fruncí el ceño a la tarjeta del "amado", claramente se equivocó de remitente o que mierda se yo, pero estamos hablando de mi, la chica que a duras penas ha recibidos besos sin lengua claramente y con un himen a mediatas, obviamente las flores no son para mi eso está científicamente comprobado por la NASA.
—Vota esas horrorosas flores, de tan sólo verlas me provocan miopía.— gruñí tomando camino hacía mi habitación.
—No... A mi me gustan.— la oír decir antes de cerrar la puerta.
Y allí estaba en mi privacidad, mi muy desordenado cuarto con quince días sin saber que es una aspiradora, y al ver su aspecto eso es igual a una limpieza segura, adiós a la tarde de relajación y muchas historias de wattpad.
Esto era realmente desesperante, tener que limpiar mi habitación puesto que no tengo una madre abnegada que me limpiara mis desastre y me consolara las penas, eso me lleva a pensar que mi madre fue eso, una madre que cuidó de su hija hasta los dieciocho años casi "obligándola a alzar el vuelo", que tontería y es que mi madre fue la mejor de todas cuidó de mi ella sola y no por el cliché y muy recurrente padre irresponsable, papá dio la vida por nosotras, entró a un quirófano a donarle un riñón a mi madre pero sólo ella salió con vida.
Un día después nació Mayle por complicaciones.
El sonido de la puerta, hizo que perdiera el hilo de pensamientos.
—¿Si?— pregunté.
— ¡Tú inquilino ha llegado Mae!— oí decir a By desde el otro lado.
Dylan había llegado con la creación del demonio a la que su hermana llama mascota, había googliado y el reptil resultó una iguana, la cual "requiere cuidados especiales " mi madre necesita cuidados especiales y sin embargo no los tiene y todavía su locura la ha llevado a matar a nadie.
Al salir encuentro a Dylan sentado en el sofá con con una especie de pecera sin agua en sus piernas en la que se encontraba el Capitán.
— Hey —dije, este me miró.
— Hola de nuevo, voy con un poco de prisa así que te daré las indicaciones sobre sus cuidados, el es netamente herbívoro, así que cualquier plata comestible y que sea sana la comerá — sacó de su bolsillo trasero un pedazo de papel — acá te dejo la lista de las cosas que comerá.
Agarré la hoja sin siquiera darle un vistazo, simplemente la puse sobre la mesita en el centro, en donde mismos Dylan colocó el hábitat de capitán.
Dylan caminó hacía la puerta y yo lo seguí, parando en el umbral de la misma.
— Ten buen viaje Dy.
— Hasta pronto, hermosa Mae.
Dejando un beso en mi mejilla se fue, y lo del vuelco en el estómago volvió a suceder.
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Conspiración.
RomanceMayle Stiner, una chica a punto de salir de la adolescencia para integrarse al mundo de los jóvenes adultos independientes, saliendo ilesa de los sentimientos y hormonas adolescentes. Ahora que siente que su vida esta en el punto perfecto, sin coraz...