Cortar
.Cortar, es lo único que creías calmante de dolor. Al comienzo suena un poco ilógico, calmar dolor con más dolor. Pero luego lo entiendes, el dolor físico contrarresta el dolor emocional, y la mayoría de veces es efectivo.
Un día solo colapsas de tantas desilusiones, tantas decepciones, tanto sufrimiento, y ese día en el que empiezas a notar todos tus problemas, haces el primer corte, no es tan profundo, ni tan insignificante, pero es el primero en dejar fluir un poco de tu dolor a través de la sangre, y puede que lo disfrutes, o solo te arrepientas de haberlo hecho, pero marca algo en tu vida, quizás importante, o insignificante.
Luego de eso puedes seguir dos caminos.
Entender que no está del todo correcto hacer eso, y no volverlo a hacer, o solo de vez en cuando con el fin de liberar el dolor, pero consciente de que no solucionará nada.
O resignarte a creer que es lo único que alivia tu dolor emocional y seguir haciéndolo, cada vez más profundo, más intenso, dejando claro el dolor que sientes marcado en tus brazos, piernas, o en todo tu cuerpo, e ir sintiendo cada vez más esa sensación de liberación, hasta que llegas a un punto en que los cortes no son suficiente, y desde ese punto en el que ya no ayudan a contrarrestar el dolor emocional, lo que suceda después es desconocido.
¿Lo entiendes, no?
Sabemos que no solucionará nada, pero de que es placentero, lo es.Y, ¿te ayudó en algo?; sólo cortar.
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Depression.
Short StoryNo apto para sensibles. [Si necesitas ayuda, mi bandeja de entrada siempre estará disponible.]