Capitulo 1

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— ¡Yurio!—. Gritó un chico pelinegro al ver como su "amigo" caía en el hielo tras intentar dar un salto. Otra vez.— ¿Estás bien?—. Preguntó una vez que llegó a donde estaba, junto con otro chico albino.

— Si, si—. Respondió serio.— Da igual—. Se levantó y sobó su brazo que se había raspado levemente en la caída.

— Es la quinta vez hoy—. Dijo estresado el albino.— Esto nunca te había pasado. ¿Algo malo te ocurre?

— Claro que no—. Negó el rubio cruzándose de brazos.— Estoy perfectamente bien

— ¿No será porque tu abuelo no fue a ver tu última presentación y te sientes triste por eso?—. Cuestionó el pelinegro.

— ¡CÁLLATE, CERDO!—. Gritó el rubio.

— Así que es eso...—. Dijo tranquilamente el albino.— Vas a necesitar ayuda—. Los dos chicos lo miraron confundidos.— Fallas las coreografías que te pongo, y Yakov junto con Lilia ya parecen fastidiados con que no puedas dar saltos sin fallar. ¡Por suerte tengo la solución!—. Puso cara adorable con su típica sonrisa en forma de corazón.   

— Parece que pasar tiempo con el tazón de cerdo ya te está afectando—. Dijo el rubio.— ¿Qué se supone que planeas?

— Tengo una amiga en el equipo femenil de patinaje que tiene tu misma edad. Si le pido que te entrene seguro accederá

— ¡¿QUÉ?!

(...)

POV T/N

Me encontraba sentada en una banca fuera del estudio en donde se supone que debería estar entrenando, pensaba en cualquier tontería sólo para distraerme mientras admiraba la nieve que caía del cielo. Suspiré, de repente sentí como algo vibraba en el bolsillo de mi pantalón, era mi teléfono. Lo saqué y sin ver quien me llamaba conteste.

— ¿Quien eres?—. Pregunté.

— ¡Amazing!—. Escuché como gritaban al otro lado de la linea, provocando que alejara el celular de mi cara.

— ¿Viktor?—. Dije una vez que volvía a colocar el teléfono en mi oído.

— ¿Quien más va a ser? ¡Niña, extrañaba oírte!

Sonreí a más no poder.

— ¡Viktor! ¿Y ese milagro de llamarme? ¿Como te va en Japón?—. Pregunté sin contener mi emoción.

— ¡Increíble! Pero ese no es el punto, necesito que vengas acá para ayudar a una gata frustrada por el patinaje artistico

Sabía muy bien a lo que se refería.

— Lo voy a pensar, ¿Quien es?

— Yuri Plisetsky

Casi me ahogo con mi propia saliva.

— ¿Yuri Plisetsky?—. Cuestioné de forma calmada, había escuchado mucho de él, sin embargo, nunca lo he visto, ni siquiera en las presentaciones.

— ¡Sii! Anda ven, este chico es un caso perdido

Suspiré.

— Lo haré, pero sólo porque te debo un favor—. Luego de eso escuché como gritaba de alegría, me despedí y colgué.

No tenía mucho que hacer aquí, así que... No habría problema en ir a Japón, ¿O si?.   

Ice Girl [Yuri Plisetsky Y Tu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora