Melody

Un nuevo insti, un nuevo día, una nueva mirada hacia un mundo lleno de colores,hacia un mundo colorido , donde la sinfonía que sale de tu voz, da diversos colores a mi triste corazón.

Releí las palabras, una y otra vez. Había encontrado esa carta en mi cama esta mañana, tras dejarme la ventana abierta. Tan solo llevo aquí una semana pero, al parecer, ya tengo alguien anónimo detrás. ¿Quién será?

Me visto rápido con una falda negra corta, una camisa blanca y unas botas. Salí de casa desganada, deseando llegar al instituto, mejor dicho, deseando retroceder y salir corriendo. De volver a mi antigua casa, y no mudarme más, de no querer comer como acto de rebeldía. Pero mis padres que también estaban sufriendo, sería injusto tener que darles yo, un problema más.

De este modo, decidí caminar hasta el instituto sola, ya que ellos se habían ido a trabajar a las seis, y mi nuevo instituto empezaba a las ocho. De camino allí encontré chicos que iban hacia el instituto, ninguno se acercó, pero todos murmuraban sobre mí.

Menudo diita me espera, suspiré.