Damn, If you didn't want me back. -(Kookmin)-

Parte 1.

El estridente y molesto sonido de la alarma lo obligo a abrir los ojos.
Aqui lo teniamos, lunes otra vez. De cualquier manera, no era como si tuviera algo en contra de los lunes, solo que como a todos, le costaba un poco retomar nuevamente la rutina.

Apagó su alarma y echó un vistazo a la pantalla del movil. Aun faltaban 10 minutos para las 7:00 a.m, siempre despertaba 10 minutos antes para asi poder mentalizarse en que debia levantarse de su comoda y adorada cama. Su unica y eterna compañera fiel. Pero aunque le doliese en el alma debia hacerlo, Taehyung tenia clases en una hora y si no lo despertaba en estos momentos, ya no podria separarlo de sus preciosas mantas de One Piece.

Cuando al fin pudo levantarse de su cama se dirigió a la habitacion  de su pequeño hijo, quien estaba durmiendo en una posicion un tanto extraña. Parecia un gusanillo en su capullo, dormia boca hacia arriba y su cabeza colgaba de la cama. Sin mucho cuidado se acerco al pequeño, viendo como un surco de baba media seca marcaba su mejilla, suspiró y comenzo con su lucha diaria.

Despertar a Taehyung.

-Tae...-Lo llamó con voz suave, sacudiendo el pequeño hombro del menor. - Es hora de levantarse, hijo.- El menor se removió molesto, murmurando cosas en un idioma inentendible.- TaeTae... vamos, tienes que ir a la escuela y yo al trabajo, levantate.-

-Mhh ...No quiero ver a la vieeeja hooy...-Se quejó el menor aun con las pestañas pegadas. Jungkook rodo los ojos.

-No le digas asi a tu maestra, Taehyung.- Le retó, desenrollando las mantas alrededor de su hijo y sentandolo en la cama mientras esté fruncía el ceño aún con sus ojitos cerrados, frotándose la cara con las manitas.

-¡Pero si es una vieja fea y no me quiere!-

-¡Obvio que no te quiere! y sabes que eso es tu culpa..- y tenía razón al hacerlo, Tae le habíapreguntado a la maestra Dong si su rostro se veía así por algún accidente.

En verdad, Jungkook no sabía de donde sacaba Taehyung esas cosas. Aunque la vieja en verdad tenía cara de homúnculo.

-Solo le dije la verdad.

- Es tu problema entonces. No me importa, levantate enano.- Taehyung nego con la cabeza fieramente y se tiro de espaldas a su cama volviendo a cubrirse con las mantas.- Oooh no, niño que yo no soy tu madre. ¡Tu iras a clases quieras o no!-

El pequeño castaño de amplias orejas gritó algo como "¡Obligame!" desde abajo de las mantas. El treintañero solamente bufó, masajeando con fastidio el puente de su nariz pensando que recien era lunes y aun faltaba mucho para que su dia realmente comenzara.

Ya estaba viejo para esto.

Bien, ya era suficiente. Decidido y desde ya cansado, tomó a su obstinado hijo de las flacuchas piernas que sobresalian del cobertor y lo llevo cual saco de papas hasta el baño. En el camino, el pequeño gritaba y pataleaba gritando exageradamente, alegando maltrato infantil y lanzando promesas de venganza hacia su progenitor.

Cosa de todos los dias, a decir verdad.

Cuando la tarea titanica de alistar a Taehyung llego a su fin, se dirigieron al colegio del menor.

El pequeño de 8 años siempre hablaba mucho en los viajes a esta, bueno también lo hacía en la escuela, en el almuerzo, en la cena, en el cine o a todas horas pero a Jungkook le agradaba oirlo. Era un niño muy bueno y con una gran imaginación, aunque algo hiperactivo. Siempre hacia sus viajes en auto mucho mas divertidos y agradables, sacándole un poco ese estrés que siempre cargaba a esas horas de la mañana.

Era un niño con una gran personalidad aunque muchas veces habia discutido tanto con la madre del pequeño como con algunas maestras cuando estas decian que el pequeño tenia problemas de personalidad o deficit de atención. Pura mierda, por esas razones lo habia cambiado de escuela dos veces ya. Por suerte, la madre del pequeño al final tambien estuvo de acuerdo con el. Solo era un niño, hiperactivo y con bastante imaginacion y poco -por no decir inexistente- filtro a la hora de hablar. Esto ultimo, probablente habria sido lo que generaba molestia en las imbeciles de sus ex-maestras, porque Tae siempre decia lo primero que se le venia a la mente pero eso no era un crimen. Solo era un niño.