Al pasar por el río.

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Cuándo Nerta se despertó, todos ya se habían levantado, llevaban tiempo despiertos y hasta los elegidos ya estaban empezando su primera clase de defensa contra los del nuevo amanecer.

Resultaba que los acompañantes del Equipo especial habían empezado a entrenar a los chicos, Nerta consternada los miraba sudar a torrentes mientras Gerd gritaba a todo pulmón que lo hicieran más rápido.

Se sentó en una silla que estaba cerca de la improvisada zona de entrenamiento y respiro profundo, llenando sus pulmones de aire de la misma manera que lo hacían los chicos solo que un poco menos rápido.

Abner, Lesedi y Noreen llevaban desde las cinco de la mañana despiertos, una chica guapa y de musculosa constitución los saco de la cama y los puso a correr varios kilómetros sin parar y para sorpresa de los tres, no se habían cansado, pero poco después vino el entrenamiento real.

Gerd y Miranda otra de las integrantes del equipo especial, los habían puesto a realizar un montón de cosas que en su vida habían realizado.

Nerta miro como tomaban aire antes de que Miranda les gritara una orden para realizar una corta pero cansada rutina con las espadas.

Marta se acerco despacio hacia el estresado cuerpo que se encontraba viendo el riguroso entrenamiento de los elegidos, le tocó los hombros amablemente y se sentó en la silla que estaba al lado.

– !Hey!, Sé que piensas que es necesario seguir con el entrenamiento pero es preciso encontrar a Lena – dijo mirándola fijamente a los ojos
– Eso ya lo se, peroo....no estoy muy segura de dejarlos solos a todos ustedes – contesto Nerta con una mano en la frente
– Por eso no hay que preocuparse, yo puedo ir por ella – y diciendo esto, Marta se levantó y camino hacia la foresta, Nerta sin saber a dónde de se dirigía ni que mosca la había picado la siguió para reclamarle sobre su alocada propuesta.

Cuando al fin Marta termino de caminar sin aparente rumbo, Nerta miro hacia donde ella estaba mirando y vio un cristalino y amplio río.

– Marta, estás loca si crees que te voy a dejar ir allá sola – dijo Nerta con la voz llena de preocupación y un poco de enojo
– Sabes que lo que tú me digas no me detendrá, y aunque estés al mando y me lo prohibas yo voy a ir, no tengo nada que perder – contesto la nombrada sin voltear a verla
– Ni siquiera sabes dónde está, y en caso de que supieras que podrías hacer, y qué tal que esté con los del Nuevo amanecer, y además....– la voz de Nerta se redujo casi a un susurro – A demás tal vez tú no tengas nada que perder pero yoo....yo te perdería–.

Marta se volteó incrédula de haber escuchado eso último, tomo a Nerta por los hombros, la miro gelídamente y con la voz más seca y anodina que pudo emitir dijo;

– Eso paso hace mucho tiempo– y con un tono más condescendiente agrego – Tanto tiempo que ya no me importa todo lo que tu digas, total es mi vida, ¿Te quedó eso claro Nerta?– y soltando su agarre se dirigió de nuevo hacia el improvisado campamento a recoger sus pocas pertenencias.

Fue con Gerd y Miranda, les explico lo que iba a hacer, y que hacer en caso de ayuda, ellos como si nada, confiados en la experiencia de su compañera, la dejaron ir sin ninguna oposición, para cuándo Nerta arrivo al campamento Marta llevaba hace tiempo que se había ido.

Nerta sin ganas de que la vieran, se puso a preparar la comida para todos y a preparar lo esencial para explicarle todo a los elegidos.

Muy cerca de ahí, a Noreen le atraía más la idea de utilizar el contacto cuerpo a cuerpo en una pelea que las espadas o las dagas, pero sabía que lo necesitaba, todos lo sabían, así que puso su empeño en aprender y seguir con la clase de defensa personal con Gerd.

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⏰ Última actualización: Mar 06, 2018 ⏰

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