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—Y si te hieren o te lastiman no te dejes caer. Las estrellas siguen ahí, la luna no caerá, el sol no deja de brillar—

Cierto rubio caminaba por las calles con la mirada perdida, ¿Que mierda había hecho? la intento besar y en ese momento se percato de casi todos sus sentimientos hacia Hinata, entonces ¿Porque se apartó de su cara cuando estaba a punto de besarla?

Miedo

Estaba asustado de lo que pasara luego de ello, es decir, ¿Y si ella ya no le correspondía? ¿Y que si se olvido de sus sentimientos hacia el? Esas y más preguntas se formaban en su cabeza. El recordaba que la Hyuga había estado enamorada, pero ¿Y si ya no? Después de todo el nunca le dio una respuesta –Imbecil–

¿Que haría ahora? Se recriminaba a si mismo, lo que más le dolió fue la cara que ella tenía cuando la dejo en su casa.
Se veía horrible

FlashBack

Los dos iban en silencio, El Uzumaki mirando a otro lado un poco sonrojado mientras la azabache solo miraba hacia el suelo haciendo que su pelo tapara su cara. Naruto solo la veía preguntándose cómo no la había visto antes, Hinata era hermosa, perfecta, la quería toda para el.

—Naruto-kun, es aquí —paramos frente a una gran casa, más bien una mansión, era gigante.

—Oh bueno —ella se despidió con un simple adiós y camino hasta la puerta, Naruto la miro todo el tiempo, la ojiperla se notaba diferente, algo triste. El Shinobi no quería saber el porque, -seguramente sea mi culpa- pensaba, sinceramente no se equivocaba luego de ello comenzó a caminar directo a su casa tratando de entender aquello.

Fin del FlashBack

De ahora en mas solo le tocaba esperar hasta mañana, por lo que llego a su pequeño hogar mientras que dormir era lo único en su mente, sin embargo fue lo menos que pudo hacer al tener una noche llena de insomnio gracias a sus constantes recuerdos y pensamientos sobre la chica que poco a poco y sin darse cuenta entraba en su corazón, donde no tenia pensado salir por lo menos por ahora.

Ya cuando comenzó a dormirse eran las 7:00 a.m y tenía que ir a hacerle un favor a su amiga Pelirosa con quien quedó a las 8:30, por lo que no podía ponerse de impuntual o sino Sakura lo golpearía y eso no le gustaría para nada.

Se levantó cargando todo el sueño que tenía a causa del insomnio y se fue a preparar para salir. Dieron las 8:20 y salió corriendo del baño ya que se había quedado dormido e iba tarde, se vistió como pudo y corrió hasta que se chocó y calló sobre algo suave, sin esperar levantó un poco la vista y se encontró con la cara de Hinata toda roja, al lado de ella estaba Neji con un notable enojo.

—¡Quítate de encima Naruto! —gritó enfurecido.

A duras penas y muy avergonzado el rubio se paró de encima de la chica con el sonrojo más grande que a tenido, se disculpó y salió corriendo lo más rápido que sus pies le dieron y escucho como Neji le gritaba para que regresara.

Caminado ya más calmado por las calles de Konoha vio entre la gente un pelo rosa y supo enseguida que era su amiga así que la llamo a gritos, así ella se volteó y lo vio, pobre Uzumaki le iban a dar la golpiza de su vida por llegar tarde.

—¡Naruto! ¿Donde estabas? Llevo esperando aquí un gran rato —dijo para luego golpearle la cabeza.

—Lo lamento tanto Sakura-chan pero —paró en seco ¿que le diría? —Es que ¿tuve insomnio? —la llama de ira de la ojijade paro y lo miro con preocupación.

No me rendiré contigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora