Capítulo 1.

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Un nuevo fic 2min que espero sea bien acogido, sé que tengo más fic's en progreso y que dije que no subiría nada antes de terminar "Deseo" pero simplemente no pude resistirme.

No tengo mucho más que decir, sólo que espero que les guste.

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Respiró profundo colocando su cabeza hacia atrás en sobre el hombro de su pareja, mientras sentía sus labios en su cuello dejar besos cortos que le resultaban demasiado relajantes, mientras sus manos entrelazadas reposaban en su abdomen; una sonrisa se formó en sus labios mientras sentía los dedos de su pareja moverse lentamente sin soltarlo, un momento que parecía perfecto en una mañana de un sábado cuando no tenían trabajo que hacer, era de cada fin de semana pero sin llegar a parecerles aburrido, porque esos momentos sólo para ellos no era algo que siempre pudieran tener, ni siquiera si trabajaban en la misma empresa, porque podrían encontrar momentos para estar juntos pero también era un lugar que respetaban y sabían que no trabajar juntos no significaba que podían hacer lo que quisieran.

Los besos subieron por su cuello hasta sus mejillas, girando su rostro para poder recibir aquellos labios que buscaban los suyos, en un beso lento y casi casto, sin necesidad de nada más que disfrutar el momento como cada sábado, cuando colocaban cojines sobre la alfombra de la sala de estar y se sentaban ahí porque decían que era más cómodo mientras estaban abrazados de esa manera, mirando películas algunas veces de todo género, que iban desde terror hasta dibujos animados, y todo parecía volverse mejor cada día, no importaba si llevaban tres años de matrimonio, no había algo que sólo fuera rutina y ya les aburriera porque siempre estaban encontrando nuevas cosas que no les permitía aburrirse.

Un suspiro escapó de sus labios cuando se separaron y cerró los ojos, sintiendo como su nariz se rozaba con la de su esposo, olvidándose por un momento de la película, porque ya la habían visto, era demasiado popular cuando eran niños, y ahora decidieron volver a verla, así que si no veían alguna parte daba casi igual, sabían la trama, y a pesar de que a veces veían películas ya antes vistas no siempre estaban distraídos, aunque las caricias algunas veces empezaban ahí y terminaban en la habitación.

—Min Ho —susurró alejándose un poco con una sonrisa.

Se soltó su mano derecha de la de su esposo y la guió sobre su abdomen, viendo como la una sonrisa de su esposo aparecía mientras sentía los movimientos que ahora eran más perceptibles, que semanas atrás, así como también las personas ya no confundían diciendo que había engordado, sino que notan que dentro de él estaba creciendo una vida, algo que parecía el complemento para sus vidas cuando creían que estaban la mejor etapa de ella, ya que tenían un trabajo estable que les había ayudado a pagar la casa en la que ahora vivían, que no era demasiado grande, ni muy pequeña, tenía lo necesario para que ellos pudieran vivir cómodos, habían disfrutados de algunos años siendo sólo ellos dos y tomaron juntos la decisión de que era momento de tener hijos, y todo parecía estar sucediendo en el momento correcto.

—¿Puedes sentirlo? —preguntó a pesar de saber que podía hacerlo.

—Sí. Está pateando muy fuerte, ¿te duele?

Negó con la cabeza, se había acostumbrado a sentirlo y mientras sus patadas no buscaban dejarlo sin aire creía poder soportarlo, de hecho, le gustaba sentirlo patear y que Min Ho también pudiera hacerlo, o cuando le hablaba en voz baja pidiéndole que no pateara demasiado fuerte después de que él hiciera muecas porque dolía, descubriendo que la voz de su esposo parecía gustarle porque el bebé lograba tranquilizarse, y se sentía un poco ansioso por poder tenerlo en sus brazos y esperar cuatro meses para conocerlo le parecía demasiado tiempo, pero sabía que era algo que no podía hacer antes y la sola idea de que pudiera suceder le daba nervios porque sabía que eran pocas las posibilidades de vivir de los bebés si no nacían dentro del tiempo correspondiente, no quería que su bebé pasara por nada de eso, aquello le aterraba.

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