La mañana hacia aparición nuevamente, leonardo con mucha flojera se levantó no se levantó muy deprisa ya que no tenía que hacer nada aquel día ya que era feriado; sus amigos irían a inscribirse en la universidad donde iba el pelinegro, leonardo vio en la despensa lo que faltaba de comer y lo anotó en una lista. Tomó las llaves del perchero y salió del departamento, bajando las escaleras y saludando al conserje salió del departamento; camino unas cuadras hasta llegar a el supermercado, entró tomó un carro y se dispuso a pasearse por los pasillos para ver que es lo que necesitaba en casa; cuando carro estuvo repleto de las cosas que necesitaba se fue a la caja registradora a pagar por todo.
Al salir comenzó a sentir un poco de frío, subió un poco su bufanda y comenzó a caminar en dirección al departamento; calles después fue abordado por la persona según el más desagradable del universo.
-¿¡estas siguiendo me?!- grito el ojo azul nervioso y molesto
-no, es simple casualidad pero hay que Aprovechar esa casualidad, te invitó a un helado o un café tu decides - hablo con una sonrisa oji verde
-¿porque abría de aceptar tu invitación?- preguntó con el señor fruncido
-porque es mi manera de disculparme por todo lo que te hecho desde que te volví a ver- hablo no muy convencido de su respuesta
-me imaginó que es eso, por que si no- hablo leonardo levantando la mano con intención de golpearlo
-¡tranquilo tranquilo! - detuvo raphael
-ok, te aceptó la invitación del café - aceptó leonardo
-bien -
Raphael vio las pesadas bolsas que llevaba leonardo, se acercó a el tratando de tomar las bolsas
-espera ¿¡que haces?! - grito quitando las bolsas del alcance de raphael
-es obvio, te voy a ayudar con las bolsas- dijo el pelirrojo con una sonrisa - se ven pesadas y no voy a permitir que las lleves todas así que pasamelas
Leonardo en modo desconfiado le entregó las bolsas, comenzando por fin la caminata hacia la cafetería, todo el camino fue silencioso; al llegar rápidamente escogieron una mesa, la cual estaba mirando hacia la ventana. Un mesero de no más de 23 años les tomó el pedido y en 15 minutos se los fue a dejar; la velada como la caminata fue silenciosa, al terminar leonardo iba a pagar lo que consumió pero raphael como buen caballero no lo dejó y pago todo.
Ambos jóvenes caminaron fuera de la cafetería hacia un puente que quedaba frente al mar, como ya era de noche raphael decidió llevarlo para ver la luna sobre el agua ya que se veía preciosa; al llegar ambos se apoyaron en el pasamanos mirando la luna en silencio, raphael de pronto miro a leonardo cuando la luna estaba perfectamente alineada con el rostro de leo haciendo que sus ojos brillarán con un azul más profundo y hermoso. Sus ojos no se separaron de el en ningún momento y leonardo parecía no percatarse de ello, fue entonces que leonardo despegó la vista de la luna y miró a raphael; fue entonces cuando el pelirrojo fue acercándose hacia el pelinegro con intención de besarlo, leonardo al ver la intención de raphael no hizo nada por moverse y evitarlo.
Raphael al sentir los labios de leonardo profundizó más el beso, después de unos minutos leonardo se dio cuenta de lo que Raphael hacia e inmediatamente se separo de el cubriéndose la boca con sorpresa; retrocedió dos pasos tomando las bolsas de las manos de raphael, dirigió la mirada hacia el pelirrojo se dio media vuelta y comenzó a correr en dirección a su departamento.
Raphael quería detenerlo pero ya era demasiado tarde, volvió a dirigir su mirada hacia la luna angustiado de lo que acabó de hacer.-que mierda hice......quería sentir nuevamente sus labios pero........me equivoque.....acabó de arruinar mi oportunidad para conquistarlo de nuevo.......
Continuará
.....
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SECRETOS
Romance¿Como seguir con una vida que esta llena de mentiras? eso es lo que vivo cada dia, cada día son mentiras, una mentira tras otra, ¿cuantas mentiras seré capaz de soportar? soy leonardo saki y esta es mi historia