—Así que conociste a su abuela —Les podía ser muy insoportable si se lo proponía, no dejaba de preguntarme como me fue ayer en la tarde.
—Si señorita y es una señora muy amable
Era el momento del descanso así que hablábamos tranquilamente en una de las mesas de la cafetería
—¿Vas a regresar hoy al hospital?— Preguntó, con una de esas sonrisas Tan picaras que la caracterizan a ella.
—Si lo voy a hacer le prometí a Mildred que estaría ahí, hasta el día en que el despierte.—Terminaba de comerme mi hamburguesa por que pronto se agotaría el tiempo del descanso.
—¿No te da miedo que te descubra?— Que negativa esta señorita!!
—Tienes un plan, deberías haberte venido toda de negro, yo ando unas gafas, para que vallas de incógnito
—Jajajaja eres increíble lo sabes— Claro que lo sabes— Su abuela me dio su número de teléfono, por si el despierta antes de lo previsto, porque...— ella me mira asombrada
—Si Leslie ella tiene teléfono
—No pos yo no dije nada
—Pero lo pensaste—Además era super mala disimulando.
—Touche
—Como te decía, porque ella quiere seguir con esto del misterio de las notas, dice que le parece algo romántico y que tal vez eso anime un poco a su nieto...—Termine de contarle
—¿Anime un poco?—preguntó ella
—JA! Eso mismo pensé yo.
Después de eso tocaron el timbre para regresar a clases, y caminamos hacia nuestra clase de literatura, le dije a Leslie que andaba muy preguntona y ella solo dijo;
—Curiosidad mi lindo chihuahua, curiosidad—mientras me desordenaba el cabello...Ahhhhhh si que es insoportable.
