Alex y los Chicos (EPN#2) | ✓

Capítulo 8.

Capítulo 8 — "Amor Restringido."

Colin POV

— Hola cariño. — Le sonreí, apretando los dientes.

— ¿Qué estás...? — Comenzó a decir inocentemente, mirándome.

La agarré por la oreja, tirando de ella hacia un rincón vacío de la tienda.

— ¡Ay! — Exclamó, alejándose de mí. — Eso me dolió.

— Bien. — Espeté.

— Bueno, ¿qué estás haciendo aquí? — Se cruzó de brazos, mirándome seria.

Sonreí, pensando por lo que había venido aquí.

— ¿Vas a decirme por qué demonios le pediste a Noel que te acompañara aquí de todos los lugares en el mundo? — Dije sin comprender.

Alex me miró desconcertada, dando un pequeño paso hacia atrás. — No hagas esto, Colin. Seguramente no dirías nada si lo llevaba a un hotel de mala muerte, pero sí cuando me acompaña de compras. — Dijo.

Por el rabillo del ojo pude ver a Noel tratando de escapar por la puerta trasera. Sintió mi mirada, y se dio la vuelta lentamente. Hice un gesto para que se quedara quieto.

— ¿Sólo de compras? — Me eché a reír, como un loco, ya sabes, ese tipo de risa que sólo oyes cuando vas a una institución mental. — Siempre haces lo mismo Alex. Le preguntas inocentemente si te puede acompañar a comprar ropa interior y luego, te arrepientes, lamentando no haberlo hecho. — Puse los ojos.

Alex me miró. — COMPRAS, Colin. COMPRAS. — No sabes como es Noel.

Negué con la cabeza. — Sé lo suficiente como para saber que la chica frente a mí es una idiota.

Alex resopló. — ¿Yo? ¿Idiota? — Se señaló a sí misma.

— Alex, que un tipo salga a dar una vuelta con mi chica es una cosa. Esto es completamente diferente. 

— Últimamente has estado exagerando mucho las cosas, Colin. Especialmente con Noel. ¿Cuál es tu problema? — Respondió, con un tono de dolor, haciendo caso omiso de mi comentario.

Me quedé alarmado de lo rápido que mi corazón latía. — Mi problema es... ese tipo de ahí. — Miré en la dirección de Noel, que estaba nerviosa enderezando su camisa y mirándonos tímidamente. — ¿Por qué no puedes verlo? La forma en la que te mira, la forma en la que actúa cuando estoy cerca... — Me pasé una mano por el pelo, estresado.

— ¿Cómo me mira? — Dijo con escepticismo.

— De una forma que no me gusta. — Ella me miró, sus ojos castaños ya no tenían ese brillo especial que siempre tenían cuando yo estaba con ella. La echaba de menos. — Tú crees que los chicos no te miran, Alex, pero sí lo hacen, y mucho.

Escaneé la tienda, entonces detecté a un chico skater fuera, con sus amigos, mirando a Alex como si estuviera hipnotizado o algo por el estilo.

— ¡Y un ejemplo es ese tipo que no puede ser más evidente! — Grité, lo suficientemente alto como para que pudiera oírme. 

Se sobresaltó, y comenzó a patinar lejos de donde estábamos con sus amigos detrás. Me volví de nuevo a Alex, su labio estaba empezando a temblar, mi chica estaba a punto de llorar. Suspiré.

— Piensa en ello de esta manera: — Empecé en voz baja, mirando el tatuaje de la cruz en mi brazo. — Si yo saliera con una chica a comprar ropa interior. ¿Cómo te sentirías?