Capítulo 5: No es tan difícil.

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-¿Cuál es tú nombre?- Le preguntó Kendra a la mujer que decía ser testigo.
-No quiero que sepan quien soy, sólo diré que vi un hombre que se llevaba a la mujer muerta en una camioneta negra sin matricula, ayer por la noche- Soltó.
-¿bien?, ¿Cómo era el hombre?- Pregunté, y Kendra me fulminó con la mirada.

-Era alto, caucásico, calvo, creo que usaba lentes, y no sé que más- Respondió.
-Gracias- Dijo Kendra y empezó a caminar hacia la salida.
-Has un pequeño esfuerzo por recordar algo más, concéntrate- Dije a lo que Kendra se paró en seco pero sin voltear.

-Bueno, había otro hombre más joven. Eso es todo, no recuerdo nada más- Dijo y se fue casi corriendo.
-¿Qué fue todo eso?- Preguntó Kendra.

-Así se interroga, no es tan difícil. Ahora sabemos que el "Depredador", no trabaja sólo y probablemente sea un negocio familiar, ya que si comete femicidio debe estar aislado de la sociedad, y tampoco está casa, quizás su mujer lo haya abandonado por otro hombre por eso piensa castigar mujeres- Le conté mi opinión a Kendra quien abrió los ojos como platos.

-En todos los años que llevo investigando este caso nunca había llegado a esas conclusiones, que son... Posibles- Respondió.

-No es tan difícil, querida, solo hay que pensar más como asesino- Confesé. -Ahora vamos a ver a los padres- Dije y Kendra asintió.


                   Entonces nos subimos al auto, y Kendra empezó a conducir.
                  Podía darme cuenta que ella era una chica verdaderamente capaz y muy inteligente, pero creo que las cosas que ha vivido, y sea cual sea el error que cometió en el caso, la han bloqueado y no está pensando con claridad, necesita mi ayuda, pero no entiendo porque me eligió a mi, habiendo mejores que yo, hay algo más, su mirada me lo dice pero no sé qué. Ella me llama la atención, creo que me empieza a gustar.


-¿Quien hará las preguntas ahora?- Pregunté.

-Podemos trabajar juntos, creo- Sugirió Kendra. Luego detuvo el auto y bajamos, fuimos hasta la casa y tocamos la puerta.
-Esto siempre es la parte más difícil, hablar con los familiares- Me afirmó Kendra con sus bellos ojos llenos de lágrimas.

-No es tan difícil si trabajamos juntos- Dije tomando una de sus manos, y mi otra mano la puse detrás de su nuca. -Tranquila, ya no estás sola, voy a ayudarte- Agregué y sentí esos nervios de puberto cuando está con la chica que le gusta, y esas incontrolables cosquillas en el estómago.

             ¿por qué de todas las chicas que puedo tener tiene que gustarme ella?, la difícil.

Misteriosa Mirada.Where stories live. Discover now