Entre el Cielo y el Infierno

CAPITULO I

"Los Ángeles lo llaman placer divino, los Demonios sufrimiento infernal, y los Hombres amor."

Emma

Suena la alarma y veo la hora, SON LAS 6:30!!? Salgo de un salto de la cama y me tropiezo con la sábana, me la quito de encima y corro al baño para poder alistarme ya que hoy es mi primer día en mi último año de secundaria; no puedo creer que ya el año que viene salga a la universidad. Abro la ducha y espero que salga el agua caliente para poder ducharme. Luego de esa resfrescante ducha, ya estoy más despierta, salgo y envuelvo mi cuerpo con la toalla, me lavo rápidamente los dientes para después salir del baño. Me dirijo a mi mesita de noche para ver la hora en mi teléfono: son las 6:40, voy a mi clóset y saco algo cómodo para ponerme, me coloco mis jeans ajustados favoritos con un suéter café que había escogido el día anterior, me pongo los zapatos y me dirijo al espejo a maquillarme un poco, algo muy suave.
Salgo de mi habitación, bajo las escaleras y me dirijo a la cocina, y encuentro a mi hermana desayunado.
—Buenos días dormilona— me dice.
—Buenos días— respondo.
Mi hermana se ve tan linda hoy, bueno todos los días se ve así, sus ojos grises destacan con su hermoso cabello negro. Su nombre es Mary, es 4 años mayor que yo, y es muy dulce con las personas pero cuando se enoja es mejor salir corriendo.
—Como amaneces? Veo que se te pegaron las sábanas— me dice riendo.
—Bien. Si se me pegaron un poco—digo.— Bueno después de ayer a cualquiera se les pegan.
—Tienes razón.
Ayer fue un día increíble, la pasamos muy bien mis mejores amigos y yo despidiéndonos de nuestro último día de vacaciones y digamos que nos pasamos un poquito con el trago. Me dirijo a la despensa y saco un tazón para servirme cereal con leche.
—Y cómo te preparas para hoy, hermanita?
—Bueno, me siento emocionada y nerviosa, pero ya sabes cómo son lo primeros días.
—Tranquila eso se te pasará en el transcurso del día.
—No quiero arruinarle su bella charla pero faltan 15 minutos para que entres.— dice mi hermano con una pinta de que se acaba de levantar.
—Cierto. Entonces come rápido mientras yo te espero en el carro.— dice Mary.
—Ok.— Respondo.
Mientras como mi nutritivo desayuno, observo la desaliñada pinta que carga mi hermano, la cual le sienta bien. Su cabello castaño claro combina con sus ojos color miel; su nombre es Jeliel, es muy amoroso conmigo al igual que mi hermana. Es alto y es el mayor de todos. En esta peculiar familia me siento muy consentida por mis hermanos ya que soy la más pequeña, y digo peculiar por cierto motivo que contaré más adelante.
Termino mi tazón de cereal, lavo mi taza, agarro mis llaves, mi bolso y mi teléfono, me despido de mi hermano y me dirijo al auto donde se encuentra mi hermana.
—Lista?
—Sip— digo mientras me coloco el cinturón de seguridad.
—Bueno aquí vamos.
Mientras mi hermana conduce mi teléfono vibra y me doy cuenta que es un mensaje de Maggie, mi mejor amiga.
—EMM, DONDE ESTAS!? Falta poco para que entremos.
—Lo siento, me quedé dormida pero ya voy vía.
—Me lo imaginé... Bueno apresurate que estoy aquí solita :,(.
—Y Paul?
—No ha llegado. Ya sabes cómo es él... Llegará a segunda como siempre.
—Bueno ya voy llegando, espérame allí.
Guardo el teléfono y enciendo las radio para poner un poco de música y que suerte están pasando mi canción favorita, Shape Of You, le subo y empiezo a cantar. Estoy muy contenta por encontrarme con mis amigos, Maggie y Paul, son los mejores siempre han estado allí conmigo en las buenas y las malas. Maggie es súper extrovertida, me encanta su forma de ser, es una pelirroja muy divertida, siempre se le ocurren cualquier cantidad de locuras. Y bueno Paul es quien la acompaña en sus locuras, al igual que yo, el es rubio con unos ojos verdes bellos al igual que ella, yo diría que harían linda pareja.
—Bueno llegamos, Preparatoria HavenHill's.— me dice mi hermana.
—Gracias. Mejor corro antes que me dejen afuera.
—Si creo que es mejor. Tienes para el almuerzo?
—Sip.
—Te paso buscando o te regresas con Maggie?
—Tranquila yo me regreso con Maggie.
—Bueno chaíto... Te quiero.
—Igual. Cuídate.
Corro a la puerta antes que la cierren y logro entrar entre la multitud de alumnos que hay, nuevos y viejos. Me dirijo a mi casillero a dejar mis cosas; logro llegar y encuentro a mi amiga junto a él.
—Porque tardaste tanto??
—Hola, como estas? Yo bien, gracias.— le digo.
—Me importa una mierda, estaba yo solita aquí rogando que uno de ustedes apareciera.
—Si yo también te quiero.
—Bueno apresurate que vamos tarde.
Termino de dejar los libros y nos dirigimos a nuestra primera clase: Matemáticas. Quién quiere ver Matemáticas tan temprano?? Cuando entramos, el profesor ya estaba llenando la pizarra, nos sentamos y le guardamos un puesto a Paul por si aparece. Ya sentadas podemos observar que no hay nuevos, somos los mismo del año anterior. Mientras el profesor da la bienvenida más aburrida le hablaré un poco de mi. Mi nombre es Emma Jackson tengo 16 años y estoy en el último año de la Preparatoria HavenHill's, y no soy cualquier chica, ya que yo soy un ángel. Mis hermanos y yo fuimos enviados con una sola misión: Proteger a los humanos de los demonios que habitan aquí en la Tierra.
—Srta. Jackson?— dice el profesor haciendo que salga de mis pensamientos.
—Ah?
—Le pregunté que si me podía hablar de lo que acabo de explicar.
—Dando la bienvenida? Cierto?— respondo cuando alguien toca la puerta.
El profesor se acerca y la abre, y aparece un chico como de 1.80 de alto con unos imponentes ojos verdes y desaliñado cabello castaño.
—Llegando tarde el primer dia.
—Disculpe no volverá pasar.— responde el chico.
—Eso espero. Adelante tome asiento.
—Gracias.— dice y se sienta en un puesto que había al frente de mi.
—Muchachos les presento a Dorian Thomson, el estará con nosotros en este nuevo año. Bueno como les decía, este año será un poco rudo para ustedes ya que están próximos a una universidad así que a ponerse las pilas. Ya dicho esto saquen sus libros para empezar la clase.
Por fin termina la clase y me apresuro en guardar mis cosas en mi bolso y dirigirme a la puerta, cuando salgo me encuentro a Maggie con Paul.
—Y tu donde te habías metido?— le pregunto a Paul.
—Es que la cama estaba muy sabrosa y no la quería dejar.
—Bueno te perdiste la maravillosa charla de bienvenida que dio el Sr. Scott.— digo sarcásticamente.
—Y ese quién es?— pregunta señalando al nuevo.
—Se llama Dorian Thomson, es nuevo.— dice Maggie.
—Pensé que este año no habría nuevos.
—Si yo también.— digo.
—Bueno vayamos por algo de tomar a la cafetería.— sugiere Paul.
—Ok.— respondemos Maggie y yo al mismo tiempo.
Al dirigirnos a la cafetería, noté que el chico nuevo no dejaba de mirarme; no sé porqué siento una mala vibra, como si él ocultara algo.
—En que tanto piensas?— me pregunta Maggie.
—No, nada importante.
—Bueno ok vamos.