¿Seguimos siendo amigos?

5

El viernes llego mucho más rápido de lo que esperaba aunque no puedo negar que tengo una pizca de emoción por la cita pero estoy segura que esa emoción se opacara pronto por mis nervios.

Me tiro en mi cama y cubro mi rostro con mis manos.

— no me digas que pensando en Adan.

Escuche a Jazmín pero ni siquiera me limite a decirle algo o al menos a quitar mis manos y mirarla porque era cierto, estaba pensando en Adan y en como se pondría si supiera que salí con Jesse.

—Ana. —.sentí como se hundió la cama. — Pense que ya era pasado.

Quito mis manos y la miro. —Piensas que olvidare todo lo que pasamos en cuestión de semanas. Toma tiempo Jazmín.

Ella suspira y se levanta. Toma mis manos para levantarme a mi también.

—Se que toma tiempo, pero enserio me preocupa verte triste por ese idiota. Ahora tienes a Jesse y debes concentrarte en eso y dejar atrás lo que tengas que dejar atrás y vivir el presente.

Asiento y la abrazo porque se lo mucho que se preocupa por mi felicidad.

—¿Crees que me veo bien?

Ella pone cara dudosa y pone su mano en su barbilla como si estuviera pensando lo que dirá. Sus ojos se pasan a mi cabello corto laceado, mi blusa mangas largas con unos diseños de triángulos y mis jeans ajustados.

—No puedo creer que algo tan simple se te vea tan bien. Te envidio

Ella sonríe y yo sonrío modelando para ella. Bajamos a la cocina a prepararnos un té.

—¿Quieres té?

Digo tomando el agua para ponerla a hervir.

—No.

—¿Porque nunca quieres de mí te? No voy a envenenarte o algo así

—El té verde sabe a pies

Ella me miró y se sentó en la pequeña mesa a unos kilómetros de la cocina. Cuando me mudé a Miami mis padres tuvieron la idea de enseñarme a ser responsable y independizarme así que me compraron este pequeño departamento. Conocí a Jazmín en el restaurante donde trabajamos. Recuerdo mi primer día de trabajo y en lo estúpida que fue Jazmín cuando estampo mi cara en un pastel. Dijo que era una vieja tradición a los nuevos pero creo que no era cierto.

Desde ese entonces Jaz y yo somos muy amigas.

—quedan pocas semanas de vacaciones. Me imagino debes de estar emocionada por volver al trabajo.

Puse el agua a calentar y me acerque a ella.—Sabes que sí. Hasta extraño a Derek

Ella me miro con los ojos bien abiertos. Es raro que esas palabras salgan de mi boca puesto a que Derek y yo vivimos discutiendo. Es irresponsable, irrespetuoso e irritable pero aún así extraño pelear con el.

—A puesto a que el también te extraña.

Dijo y sonrío de manera sarcástica. Me senté a su lado y suspire mirando al techo hoy era mi cita y estoy segura de que Jesse me reconocerá, sé que lo hará. Aunque no sé qué pasaría luego, estaríamos incómodos después de todo lo que paso en el pasado.