Capitulo 8
Maratón 2/5
—¿Cuántos hijos te gustaría tener—Pregunto Joel.——No lo se aún —dije—
—Yo quiero tener 10 —dijo riendo—
—Como ya te lo había dicho, como a ti no te dolerá por eso lo dices —el si estaba loco tener 10 hijos, que cree que soy un conejo que puede tener hijos de a montón sin dolor alguno, pero no era mala idea tener muchos hijos con el hombre que amaba con todo el corazón.
—Tienes razón, para que veas que no soy malo solamente tendremos 9, 5 hombres y 4 mujeres, ¿Te parece? —Dijo ingenuo—
—Que considerado eres por eso te amo —conteste sarcástica— Tu acaso quieres tener todo un kínder dentro de la casa o a caso quieres que me vuelva loca.
—Es solo para mantenerte ocupada amor y además muero por ser padre, así que no quiero perder más tiempo en esta charla y hay que empezar a crear nuestro kínder. ¿Te parece? —Pregunto—
—Magnifica propuesta, pero por ahora no puedo tengo que ir a visitar a mi madre que ya desde hace tiempo no la veo y tu deberías ir con la tuya que no les has ni hablado por teléfono —dije
—Tienes razón tiene tiempo que no convivimos en familia, pero ¿Qué te parece si primero vamos a ver a la tuya y luego vamos con la mía?
—Esta bien, nada más deja y tomo mi bolso y nos vamos –—subí rápidamente las escaleras entre a nuestra habitación y jale mi bolso que estaba sobre la cama, aproveche para dar un rápido retoque a mi maquillaje, rocié delicadamente un poco de perfume sobre mi y me vi por última vez al espejo, baje nuevamente las escaleras y cerré la puerta principal de la casa, camine por el jardín y llegue directo al auto subí en la parte delantera en el asiento del acompañante, dentro del auto ya se encontraba mi perfecto esposo esperándome para dar marcha a la casa de nuestras madres.—
Me encontraba en el Living de la casa de mi madre platicando con ella mientras que Joel se encontraba hablando por teléfono en el patio trasero de la casa.
—¿Han pensado en tener hijos?—Preguntó mi madre—
—Si lo hemos pensado—dije—
—Y bien. ¿A que acuerdo han llegado tú y Joel
—El loco de tu Yerno quiere tener 9 Hijos. 5 hombres y 4 niñas —reí—
—Me encantaría tener mi propio Kínder
–Bromeó mi madre——No es gracioso madre, como tú no los cuidaras en las noches, acaso no recuerdas como era de llorona Lumi de pequeña—
—Tienes razón, pero recuerda que no estás sola, estaré ahí para apoyarte en lo que necesites — solamente mostré una agradable sonrisa en mi rostro en modo de aceptación, estábamos de lo mas cómodas platicando de cualquier tontera con mi madre hasta que Joel se apareció
—Y bueno bellas damas, de que hablaban en mi ausencia –dijo—
—Platicábamos sobre el kínder que quieres tener y de cosas insignificantes –contestó mi madre—
—Verdad que seria grandioso tener nuestro propio kínder –dijo Joel
—Si seria grandioso —dijo mi madre— Quiero tener muchos nietos—
—No se preocupe que ______ y yo se los daremos sin problema —dijo Joel
—Si hagan sus planes ustedes solos, como a ustedes no les dolerá en tenerlos y mucho menos en cuidarlos –dije haciéndome la víctima——No seas dramática hija ya te he dicho que siempre estaré a tu lado apoyándote siempre que lo necesites.
—Si ,además siempre estaré yo ayudándote a cuidarlos y a protegerlos –dijo Joel besando mi frente, acción que tome como un gesto muy tierno de su parte, definitivamente el seria un padre demasiado cariñoso y perfecto para nuestros hijos.
—Bueno mucha charla por hoy madre, Joel y yo nos tenemos que ir, iremos a ver a mi Suegra porque aquí Joel no se a tomado ni la mínima molestia de tomar el teléfono y marcarle a su madre –dije mirando a Joel—
Nos despedimos de mi madre y nos marchamos a la casa de la madre de Joel, en el camino íbamos platicando de cosas insignificantes, hasta que llegamos a la casa de mi suegra, Joel como todo un caballero nuevamente me ayudo a bajarme del auto, el cerro el auto con llave y tomados de la mano caminamos por el largo pasillo que nos dirigía a su antigua casa, tocamos al unísono la gran puerta de madera a la cual rápidamente fue atendida por Angela la hermanita menor de el.
— JOEL –Grito de felicidad la pequeña –—Hola pequeña como has estado –le pregunto a su hermana mientras entrábamos al interior de la casa en donde Paty nos recibió con un gran abrazo.
—Ahora que te veo mucho mejor –Dijo Angela—
—Hola par de recién casados – dijo Daniel quien provenía de la cocina –
—Hola—salude con una sonrisa—
—Pasen chicos, no se queden ahí parados –dijo Paty, tomando asiento en uno de los muebles de el Living –
Yo pase al living junto con Paty y juntas tomamos asiento, mientras Joel se aparto por un momento de nosotras para formar plática con su primo Daniel
Narra Joel
Yo y ______Llegamos a la casa de mi madre en donde Angela me recibió como era de esperarse con mucha alegría y entusiasmo como siempre, mi primo Daniel nos saludo yo no respondí a su saludo, ya que desde que vio a ______ entrar a la casa nuevamente la quedo viendo de una forma no muy agradable para mí. _____ y mi madre fueron juntas a platicar así que decidí hablar de una vez por todas con mi primo para dejar en claro que de ahora en adelante debería respetar a _______ ya que ahora era mi esposa y parte de nuestra familia.