Me despierto y siento que mi cuerpo entero pesa. Estoy muy cansada ya que no he dormido mucho pensando sobre lo que hablamos ayer Nerea y yo. Alargo mi mano hacia la mesita de noche para agarrar mi móvil y así saber la hora:Las 9:58
¡Tampoco he dormido tan poco!
Bueno, sí...
Entro a Instagram y reviso una foto que colgué hace un día.
Me quedo un momento parada a observar la foto no sé por qué pero siento que tengo que recordar algo.¡Ay, no! se me olvidaba que hoy viene el niñero.
Me levanto y abro un cajón pequeño de mi cómoda, de ahí saco un paquete de chicles y me llevo uno a la boca. Tengo una manía, y es masticar chicle cuando estoy nerviosa o impaciente. No es que ahora me coman los nervios, pero tengo cierta intriga de quien me podría encontrar en el puesto de canguro.
Escucho sonar el timbre de la puerta y antes de nada me voy al lavabo corriendo para mirarme al espejo y asegurarme de que todo está en su sitio.
¡Afirmativo!
Voy a la puerta y me pongo delante de esta, mirándola con los puños cerrados, buscando el coraje clavándome las uñas en las palmas de las manos.
Vuelve a picar 3 veces seguidas y rápidamente, causando mi sobresalto.
¡Sé valiente Ariku, sé valiente!
Me relajo masticando mi goma de mascar y abro la puerta.
OH DIOS MÍO.
-Hola, buenas ¿tú eres Ariku verdad?- La verdad no escuché lo que decia, porque estaba ocupada repasando con la mirada cada milímetro de su cuerpo.- ¿¡Hola!?
Lo miro rápidamente a los ojos y noto el calor subir a mis mejillas como si de un cohete explosivo se tratara.
-¿D-dime?- Él se ríe
-Soy el canguro, encantado.- Se le dibuja una cálida sonrisa en la cara- ¿Puedo pasar? o... si quieres nos quedamos en la puerta todo el día.
Levanto una ceja sonriendo pícaramente.
-¿Qué tal si yo entro y tú te quedas fuera?- Voy a cerrar la puerta pero él pone el pie entre el marco y esta. Haciendo que yo no pueda llegar a cerrarla del todo.- ¡Eh!
-No me pagan por nada, así que déjame pasar.
Suspiro y le abro la puerta de par en par. Bufo y le doy la espalda.
-Haz lo que quieras...- Digo de camino al sofá.
Cuando entra, no puedo dejar de mirarle. Se le da cierto aire a... alguien... alguien de los cuales estoy perdidamente obsesionada.
-Dónde dejo esto?- Señala a su maleta fírmemente.- Voy a estar por las noches aquí también, ¿lo sabes?
¿¡QUÉ!? ¡MIERDA, NO HABÍA CAÍDO EN ESO!
-Ah, bueno... eso díselo a mi madre.-Digo con cara de estar muy sorprendida.
Qué vergüenza... no puede ser...
No puede ser que me esté gustando este tío.
¡Mi propio canguro!-¿A qué viene esa cara?- Se ríe. Como si fuera muy gracioso...- ¿Acaso no lo sabías?
Bufo y él imita mi sonido mientas se va a sentar en la mesa con el móvil.
Como se está un buen rato ahí en la mesa, lo lo observo desde el sofá. Observo cada detalle y defecto de su cara y cuerpo. Lleva puesta una camiseta blanca brillante (que parece ser nueva) junto a unos pantalones negros ajustados. Así hace que se le resalten los músculos de la pierna. Y no está mada mal... Pero la parte que más me llama la atención es el pelo, ese color de rojo desteñido o naranja bajo de saturación, me recuerda al pelo que llevaba Park Jimin (mi bias de BTS) ya hace tiempo.
Sigo observándole. Repaso con mi mirada la difuminada línea de su perfil. Es tan bonito y perfecto...Aunque hay algo que me pregunto desde que entró a mi casa. ¿Por qué llevará unas gafas de sol?
Decido preguntarselo.
-Oye, tú.
Él me mira y levanta una ceja sin soltar su teléfono móvil.
-¿Que haces con gafas de sol dentro de mi casa...?
El niñero carraspea su garganta y sigue ocupado con el móvil
Veo que no me va a contestar, así que me levanto del sofá y voy hacia él para intentar llamar su atención.
Me sitúo a su lado, fisgoneo la conversación que está teniendo con mi madre y hago una burbuja con el chicle antes de pegarlo en la mesa. Como veo que no funciona, le tiro de un mechón de pelo.-Calma, fiera.- Me mira y me agarra de la cintura, sentándome en su regazo con las piernas abiertas mirando hacia él.- No voy a responderte a esa pregunta tan tonta- Dice bloqueando su móvil y dejándolo de lado.
-Está bien, puedo vivir sin saber por qué alguien lleva gafas de sol en un espacio cerrado- Digo y pongo mis ojos en blanco.
Él ríe, me pone un mechón de pelo que estorbaba tras la oreja y a continuación se le dibuja poco a poco una sonrisa en la cara. Esa misma sonrisa se calca en la mía y él me pasa un dedo por mis labios ahora mismo relajados, estoy embobada en él y concentrada en tratar de descubrir la mirada que hay tras sus opacas gafas de sol.
Poco a poco su cara se acerca a la mía, haciendo que me altere por dentro.
¿Ahora qué hago? ¿Cómo reacciono?
Estoy muy confusa, pero para cuando me doy ya cuenta, ya nos estamos besando, haciendo que me suba la temperatura de repente.
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-Holaaa, pues nada, esta sería la introducción de la historia! Espero que os vaya gustando en general aunque os hayamos mostrado muy poca cosa...
Eeeen fin, dejad una estrellita para ver si os ha gustado y seguidnos, te seguiremos de vuelta! ^^
Por cierto... la siguiente parte ya empieza con lemon 7u7.
Att: 🐱Ariku🐱
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Aejeong [BTS]
AcakAriku y Shiku son dos alumnas de secundaria totalmente normales hasta que un día, dos chicos llamados Jimin y Yoongi, entran en su vida de una manera totalmente inesperada. ~Dos administradoras~ ~Historia con muchos giros~ ~Contenido Lemon~ ¡¡¡NO E...