Estábamos en casa de Olivia, ya que nos pareció mejor que ir a la mía. Cuando salimos del hospital, hace dos horas, ninguna dijo nada en todo el camino y agradecía eso. Sabíamos cuando la otra necesitaba estar en silencio para pensar, claro que nunca habíamos tenido una situación asi.
Mi cabeza estaba repleta de cosas. En tan poco tiempo mi vida cambio rotundamente. Y un bebé, además de ser un cambio, era una enorme responsabilidad.
Siempre quise tener hijos, pero una vez terminada mi carrera. A los 19 nunca lo había pensado. Y sin olvidar que ni siquiera estoy en pareja. Con Tomás estamos bien, sí, pero no tenemos una relación. Ambos somos libres. O lo éramos, por lo menos en mi caso.
-¿Cómo te sientes?-dice Olivia rompiendo el silencio.
-No lo sé, tengo miedo. Me asusta no poder con un bebé, a no ser una buena madre-digo con los ojos llenos de lágrimas- Además no se como se lo va a tomar Tomás, es demasiada responsabilidad y yo la voy a asumir. No voy a decir que este bebé es un error, porque sería terrible y él no tiene la culpa de nada, pero no estaba en los planes de ninguno-digo llorando.
Mis amigas me abrazan y agradezco tenerlas. No se que haría sin el apoyo de ellas. Ojala todos tuviesen la suerte de tener un grupo tan unido como el nuestro.
-¿Sabes que estaremos contigo siempre, no?-pregunta Vicky. Yo solo me limito a asentir- No pienses tanto, sólo hablalo con Tomás y si no quiere hacerse cargo, él se lo pierde. A ese bebé nunca le faltara cariño.
-Es cierto Mags, nos tienes a nosotras, a tus padres. Al principio, para todos, será difícil asumirlo, pero ninguno te va a negar su ayuda-dice Olivia limpiando mis lágrimas con sus dedos.
-Gracias por estar siempre. No se ni como se lo diré a mis padres. Se van a decepcionar tanto de mi- y ahí me doy cuenta que también están ellos. Siempre se esforzaron para darme lo mejor y yo les voy a pagar así.
-No digas eso Magui, sabes que ellos te apoyaran. Tus padres son geniales-me anima Vicky.
-Lo sé, primero se lo diré a Tomás. Tiene todo el derecho a saber esto. Después será su decisión como seguir. Yo a la mía ya la tome, y es seguir con este embarazo- que raro suena decirlo.
-Si quieres nosotras estaremos contigo-propone Olivia.
-Es mejor que lo haga sola, pero gracias. Le mandaré un mensaje para vernos a la noche. Mis padres no estarán así que aprovecharé.
Tomó mi celular y le preguntó a Tomás si puede verme en la noche. A los minutos obtengo una respuesta positiva. Es hora Magui, tú puedes con esto también.
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Siempre el mismo amor
RomanceMi nombre es Magdalena pero todos me dicen Magui. Tengo 19 años y estoy en segundo año de fotografía. Cuando mi mejor amiga me dijo que haría una fiesta para festejar su cumpleaños nunca imagine como iba a terminar esa noche, y mucho menos lo que...