La Apuesta

Capitulo 13

Aunque solo ha pasado poco tiempo desde que me fui y decidí cambiar, he tratado de olvidarlo, pero simplemente no puedo, intente borrar cada uno de los recuerdos que tenia de él, cada imagen, cada beso, cada caricia pero no logro sacarlo de mi cabeza y mucho menos de mi corazón y se perfectamente que no lo lograre, no puedo olvidar al amor de mi vida de la noche a la mañana, no puedo. Recuerdo a la perfección cada centímetro de él, el sonido de su voz, su sonrisa, el brillo de sus ojos, absolutamente todo de él.

Por el día soy feliz, sin recordarlo, gracias a Evan y a los chicos que logran distraerme con sus ocurrencias pero al caer la noche cuando estoy sola, lo recuerdo y todas la imágenes de los dos se reproducen y mi corazón vuelve a la vida, vuelve a latir rápidamente como lo hacía cada vez que lo veía, pero al final aparecen Zac y Ashley burlándose de mí y ahí es cuando la tristeza se volver a apoderar de mí, de mis sentimientos. Desearía que todo fuera una mentira, que solo fuera un mal sueño, que él nunca hubiese hecho esa apuesta, que nunca me hubiese engañado con Ashley, pero la maldita verdad es que el solo me utilizo y no puedo cambiar nada

— Daira — la voz de Evan me saca de mis pensamientos

—¿Si?

—Hemos llegado — Evan voltea y sigo su mirada, es el local donde él se ha hecho sus tatuajes, donde me harán mi primer tatuaje — ¿Estas lista?

—Si, vamos — decidida me bajo de la moto, me quito el casco y arreglo el desastre que es mi cabello, camino hacia el local pero antes de cruzar la puerta Evan me detiene — ¿Pasa algo?

—Solo quiero saber si estas segura, ¿Enserio quieres hacer esto? — Me pongo enfrente de él y acaricio su mejilla

—Estoy segura, solo confía en mí, ¿Si?

—Confió en ti hermosa — pone su mano sobre la mía y nuestros ojos se encuentran haciendo que de nuevo todo a nuestro alrededor desaparezca

—Vamos — nerviosa por la forma en la que nos hemos mirado me giro rápidamente rompiendo el contacto visual y entro de prisa al local dejándolo fuera de este. Al lado de Evan he comenzado a sentir cosas que solo con Zac había sentido y me asusta, me asusta el pensar que yo sienta algo por el pero esto es simplemente imposible, debo de estar confundida, puede ser que esto que siento solo sea cariño y agradecimiento hacia él, pues ha estado conmigo durante este tiempo al igual que Arian y Dylan.

—¿Hola? — Pego un brinco cuando una voz desconocida me trae de nuevo a la realidad —Tierra llamando a la chica desconocida — Me giro para ver al dueño de aquella voz y me encuentro a un chico de tez morena y pelo negro mirándome con sus grandes he intimidantes ojos negros — ¡Hola! Bienvenida a la tierra — me sonríe y puedo apreciar una hermosa dentadura blanca — Dime hermosa, ¿En qué te puedo ayudar?

— Yo...quiero un tatuaje

—Pues déjame decirte que has venido al lugar indicado, has vendido con el mejor, has venido con Seth. Aquí hacemos un trabajo completamente higiénico, un poco caro eso sí, pero te garantizamos que no tendrás que ir al hospital porque se haya infectado, no nada de eso, te hacemos el tatuaje que desees sin que corras ningún peligro, es un noventa y nueve punto nueve por ciento garantizado — El chico alza sus pulgares y eso me hace reír, ha hablado como las personas de los comerciales, pero cuando lo vuelvo a mirar, él ya se ha puesto serio y me mira fijamente — ¿Qué te ha causado risa? Digo porque siempre te puedes ir a otro lugar, hay muchos aquí aunque claro ninguno tan seguro como el mío — dejo de reír al ver que Seth al parecer se ha enojado — No es verdad linda, solo estoy jugando — vuelve a sonreír y de forma juguetona me golpea en el hombro — Ahora dime, ¿Cómo te llamas?

—Daira Mason — extiendo mi mano para saludarlo pero el choca los cinco con la mía

—Mucho gusto Daira, yo soy Seth Reynolds y soy el chico más sexy de aquí — da una vuelta lentamente mientras hace un baile sensual, no puedo aguantarme y suelto una carcajada — Veo que te he caído bien, ¿no es así linda?