Lily: intenta no aburrirme Hyoga, haz que mi tiempo valga la pena...- observa a los cuatro hombres frente a ella, mientras que la espada que se mantenía clavada en el suelo, sacándola en un rápido movimiento tomándola de la empuñadura- aunque dudo que logres entretenerme si quiera un poco sin tu armadura...el único entre ustedes con armadura es Andrómeda...-
Shun:...-*no me gustan las peleas mucho menos cuando se involucra una mujer...no puedo herirla...*- sé que no quieres herir a nadie, en tus ojos puedo ver una inmensa tristeza, confusión incluso podría decir que no estas totalmente de acuerdo con lo que haces, no se lo que pasaron tu y mi hermano en esa isla...solo sé que debió ser terrible, déjanos ayudarte no hay necesidad de combatir seria una pelea sin sentido...-
Lily:... ¿ayudarme? ¿En que?...no necesito nada que provenga de ustedes...- se acerca a ellos atacándoles con su espada, en cuanto a Seiya y los demás no querían llegar herirla optando por solo esquivar sus ataques pero no podrían hacerlo por mucho tiempo- ¿qué pasa? ¿No me atacaran?...acabare con ustedes...-
Seiya: eres importante para Hyoga...y eres una mujer no puedo herirte, no es propio de mi lastimar a las mujeres...-
Lily: solo dicen estupideces...- comienza a realizar rápidos movimientos con su espada hiriendo a tres de ellos-
Shun:...¡¡Seiya, Hyoga, Shiryu!!...- observa a sus amigos en el suelo- por favor detente- sin embargo Lily seguía atacando, debatiéndose en si estaba haciendo lo correcto, existían dos familias en su vida; Ikki y Hikari quienes conoció en ese infierno por otra parte estaba Hyoga a quien había herido minutos atrás. Para los chicos era difícil pelear con Lily tenían tres razones en su contra la primera es que era una chica con quien se desarrollaba la batalla, la segunda ellos eran cuatro mientras Lily solo era una seria una batalla desigual y la tercera Lily era alguien importante en la vida de Hyoga. A pesar de no querer llegar a los extremos de herir a su familia Hyoga comenzó a atacar a Lily sin su armadura, mientras Seiya, Shiryu y Shun presenciaban el combate, ambos se encontraban respirando de manera agitada.
Hyoga: Li-Lily ya basta...- observa a la chica esperando que por fin logre entrar en razón lo que parece inútil- entiende que no quiero lastimar a la segunda persona importante para mi...sé que mi madre ya no volverá...desde que te conocí comencé a sentir la necesidad de protegerte de cualquiera que intentara hacerte daño, realmente...realmente no quiero perderte, eres mi hermana aun si no hay lazos de sangre entre nosotros yo así lo creo, y sé que tu aun lo crees, de lo contrario en el coliseo habrías intentado acabar conmigo desde que vi tu rostro...-
Lily: ¡¡basta!!...hablas de protección hacia mi cuando...no me protegiste lo suficiente... ¿Dónde estabas cuando mas te necesite?...en una asquerosa isla...¡¡en Siberia entrenando por una estúpida armadura!!...- se calla por unos instantes- La ley de amazonas no significa nada para mi, una mujer no puede ser considerada un igual tan solo por el siempre hecho de portar una mascara...yo le mostrare a cualquiera que una mujer también es fuerte que no necesita ocultar su rostro bajo la mascara por el simple hecho de ser mujer y temer a herirle...estoy segura que todos ustedes lo ven así...nos ven incapaces de luchar contra un hombre, un persona inferior...alguien débil...-
Hyoga: no es así...yo...-
Lily: temías herirme...eso prueba que soy débil para ti...-
Hyoga: eres mi hermana...no pretenderé ir por hay y herirte...no eres débil, eres mi familia Lily entiende por favor, te prometí volver...encontrarme contigo después de conseguir la armadura...sabia que la isla en la que entrenarías era atroz, sin embargo creí que esa promesa te alentaría a seguir de pie...luchando por volver conmigo...-
Lily: era un infierno...- dirige su mirada al suelo, cubriendo su rostro con sus rubios cabellos, comenzando a morder su labio inferior tratando de retener las lagrimas que amenazaban con salir, llegando aun punto en el que comienza a sentir un gran dolor en el pecho, la espada que sostenía en sus manos comienza a resbalarse hasta caer en el suelo- entrenar en un lugar así lo era, sentir que tu piel quemaba con tan solo percibir el aire que había en ese lugar, nuestro maestro...si es que así se puede llamarse era cruel, cada entrenamiento significaban heridas cada vez mayores a tal punto de no poder levantarte, si aun no te recuperabas a Guilty no le importaría solía decir que era una manera en la que aprenderíamos a odiar...odiar a todo humano...eliminar todo sentimiento...amor, alegría, tristeza...al ser optimista me costó reprimendas de mi maestro Guilty la mayoría de ellas se las llevaba Ikki, siempre nos protegía...-
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Eres la luz en mí oscuridad
RomansaIkki no fue el único en vivir el infierno en la isla de la muerte. Después de tanto calvario en ese abominable lugar, lograran conseguir la armaduras del elemento fuego...pero ¿a que precio? Hikari e Ikki tienen un corazón en el cual alberga el od...