Amigos hasta el final {PAUSADA}

SEGUNDA PRUEBA: MARTES (3 de 4)

*perspectiva de MARI*

(NARRACIÓN)

Llegó el momento en el que la desesperación me empezó a agobiar, no había ninguna pista la frase "mira más allá de lo que tus ojos pueden ver" se repetía por mi mente una y otra y otra y otra y otra vez.

Esos tres símbolos no parecían significar nada, entonces, ¡que carajos tenía que hacer!

En un momento dando vueltas por la habitación me resbala con otra hoja y caí al lado de un frasco.

La hoja parecía ser el manual de instrucciones de el frasco (porque en la etiqueta del frasco ponía lo mismo que en la parte superior de la hoja).

(...)

Después de analizarlo un rato y leer comprendí que el frasco era de una sustancia que se llamaba tinta invisible y que se desvelaba con el calor. Decidí probar escribiendo algo en la parte posterior de la hoja con la tinta, prendí la vela y esto se desveló.

-Que cool- dije en voz alta. Iba a dejar eso a un lado cuando de un momento a otro se me iluminó el bombillo y me devolví a mirar el dibujo de la pared

"Mira más allá de lo que tus ojos pueden ver..."

*perspectiva de VALE*

(NARRACIÓN)

Acababa de descubrir el enigma que ya llevaba mucho tiempo destrozando me la cabeza, la serpiente, la espada y el águila no eran el único mensaje, y la única manera de mirarlo era con la vela.

Al acercar la vela se desvelaron las palabras "astucia con el numero 1 debajo, fuerza con el numero 2 abajo y coraje con el numero 3 abajo"

-¡En serio!- grité bastante frustrada. Llevaba dándole vueltas una media hora por lo menos y cuando creí que ya había encontrado la solución volví al mismo punto

-A ver Vale- me dije a mi misma- calmate y piensa, debe haber algo que no estas viendo aún.

Después de pensar un rato caí en la cuenta de que no había investigado la cueva así que decidí ir a mirar si había otra pista camuflada en este laberinto de preguntas sin respuesta.

*perspectiva de MARI*

(NARRACIÓN)

Haber ido a investigar la cueva me fue de mucha ayuda para descifrar este último acertijo:
En la cueva había 4 habitaciones, la del inicio y otras tres. En cada una de estas habitaciones había una gran pintura en una de las paredes (en una estaba la pintura de una águila, en otra la de una serpiente y en la otra una espada) y además había un botón en el piso de casa una de ellas.

Al principio, cuando fui eran figuras sin sentido, pero al desvelar esto entendí que: había un orden para pulsar los botones, aunque, bueno, aún no entendía el orden así que me concentré para descifrarlo.

(...)

Nada, absolutamente nada, esos dibujos no tenia nada que ver con las palabras.

En el momento en el que ya iba a declarar mi derrota apareció otra hoja de tinta invisible, al desvelarla y leerla una una sonrisa de oreja a oreja se dibujó en mi rostro.

-Mejor pista que esta no me pudiste a ver dado- se trataba de una leyenda que decía así:

"Cuesta la leyenda que hace mucho tiempo, en un lejano reino había tres soldados, uno muy asunto, uno con mucho coraje y otro muy fuerte los cuales no se conocían de nada. Un día el rey los llamó a los tres para combatir contra un gran y poderoso hechicero. Los tres aceptaron aunque de mala gana ya que en el momento que se miraron se odiaron al instante.
Cuando llegaron a la cueva dónde vivía el hechicero los tres empezaron a luchar por su lado por lo que el hechicero los pudo derrotar con mucha facilidad
-Al no luchar unidos los puedo derrotar, si no piensan luchar juntos una maldición sobre ustedes caerá- dijo el hechicero y lanzó un rayo convirtiendo a todos en algo distinto: al soldado astuto lo convirtió en una serpiente, al soldado con mucho coraje lo convirtió en un águila y al fuerte en una espada..."

Eso fue suficiente pista para como para ir por mi boleto de salida.

Primero pulsé el botón del cuarto con la serpiente , luego el de el cuarto con la espada y luego el de la habitación con el águila. Al pulsar este último la pared se derrumbó dejando ante mi una cueva más grande con dos puertas, cada una vigilada por un guardia...