LO QUE OCULTAMOS TRAS NUESTRA MENTE

CAPITULO 3

Cerré mis ojos en espera de mi muerte.
Y de pronto Dave cambia su actitud como si hubiese olvidado lo que estaba a punto de hacer.
Dejó caer la navaja y en un rincón con las manos en la cabeza y con sus rodillas recogidas se movía hacia delante y hacia tras. Estaba tan asustada, confundida, no entendía nada y luego sólo me quedé ahí sentada en el suelo un poco traumatizada por lo ocurrido minutos atrás.
"¡NOOO! ¡OTRA VEZ NO!"
"¡ESTUPIDOOOO! ¡YA CALLENCEEEE, ME TIENEN ARTO!"
-¡DAVE!-.Me acerqué a él con temor pero debía tranquilizarlo.-Calma,aquí estoy ¿Con quién hablabas? Calmate aquí no hay nadie que pueda lastimarte-.
Estaba desesperada este chico no se tranquilizaba estaba teniendo un ataque de histeria.
-Liv,perdóname-.Tenía los ojos hinchados de tanto llanto, pero en sus ojos podía ver que decía la verdad.
-Te perdono Dave, ahora calmate-.Me acerqué y me sente con él, por un largo rato todo se mantuvo en silencio, vi mi reloj y marcaban las 2:00 pm.
-¡Carajo!, Dave, las clases acabaron hace una hora;nos hemos saltado la mayor parte de la jornada-.No pareció importarle ni si quiera se movía tenía una mirada lejana. ¿En que estará pensando? ¿Qué clase de chico es?.
-Liv...-.Lo miré, tenía la mirada perdida.
-¿Si?-.
-Fueron las voces, yo no quería hacerlo, ellas me obligaron-.
-¿Las voces? Pero..yo no escuché nada..-.De seguro me está mintiendo.
-Liv.. Liv...tu no puedes escucharlas, ellas viven en mi cabeza-. Alzó su cabeza me miró fijamente y tenía esa sonrisa de oreja a oreja.La última vez que vi esa sonrisa él trató de asesinarme y volvió mi temor.
-¿Por qué te pidieron que hagas eso?-.No podía ser cierto o solamente esta jugando conmigo otra vez.
-¡JAJAJAJA!-.No paraba de reír.
-¡DAVE DEJA DE JUGAR, ME ASUSTAS!-.sentía un nudo en mi garganta quería llorar.
-Enserio eres tan..tan ¡ESTÚPIDA!-.Se puso de pié y comenzó a caminar en círculos. -Es claro que aún no lo entiendes.Ellas se sintieron amenazadas y amenaza...-.Lo interrumpi y terminé su oración.
-Amenazadas...por mí ¿Por qué?-.Mi temor de repente se convirtió en un interés por escuchar lo que este chico tenía que decir.
-Es obvio Liv-.hizo muchos chasquidos con sus dedos delante de mí.-Tu serías mi amiga y a ellas, las olvidaría y ya no tendrían control sobre mí-.poco a poco iba entendiendo; Dave tiene un problema mental.
-Dave, ¿Qué te parece si hablamos a fuera?-.Tenia que sacarlo de ahí, dentro de este lugar perdí la noción del tiempo,en espera de alguna respuesta al fin decide hablar algo.
-Está bien, hemos estado aquí por mucho tiempo-.por fin decía algo coherente.-Lo sé, nos perdimos el primer día de clases y de seguro estaremos en problemas-.reí un poco, al salir de ese lugar se podía observar el brillante sol que por un momento no me permitió visualizar nada.
Estaba dispuesta a preguntarle si es que tenía algún tipo de problema mental o si es que veía a un psiquiatra o si sólo simplemente se trataba de una broma de primer día de clases.
-Hola soy Dave Castle, tu debes ser Liv Harrison te sientas al lado mío, ¿Qué hacemos aquí?-.De inmediato lo quedé viendo con una cara de sorpresa al darme cuenta de como era posible que podría olvidar todo en un instante.
-Vamos Dave, deja de jugar conmigo; ya dije que te perdonaba-.noté en su cara que estaba confundido.
-Disculpa, pero realmente no sé como llegué hasta aquí contigo pero que gustó conocerte; aunque no hablamos...Bueno nos vemos mañana-.Salió corriendo.
¿Pero qué demonios le pasa a ese chico? Grité tan fuerte como pude, y me sentí tan.. tan.. aliviada.
Pero mañana estaba dispuesta a interrogar a ese chico, hasta averiguar que demonios tiene en su mente y que lo impulsa a tomar tan estúpidas decisiones.