Mi Jefe

Día 1: El Inicio

Al bajar del avión nos dirigimos al hotel, era una habitación con 2 camas, esto cada vez me tenía más nervioso, sonríe y dice...

- Voy a darme un baño... si quieres puedes acompañarme

Sentí mis mejillas sonrojarse, soy un idiota de 27 años que aún se comporta una melosa adolescente, respiré hondo y caminé lentamente, me quedé fuera del baño apoyando mis manos en la puerta, me armé de valor y entré, no sé qué me pasó, al verlo ahí, completamente desnudo bajo la ducha, había estado esperando por mí, quería que viera esa deslumbrante imagen, algo en mi cuerpo cambió y sin pensarlo saque mis zapatos como pude y entré así vestido a la ducha con él, sentía como si estuviese poseído, tomé sus manos y las puse sobre su cabeza, él sonrió y se acomodó para que alcanzaran mis labios a llegar a la fuente del sabor más agradable que eh conocido, mis manos se manejaban solas y yo solo disfrutaba que cada parte que recorrían, cuando el aire ya se había agotado nos separamos dejando un hilo de fluido que se negaba a separarse, me enfoqué en su cuello, mi lengua lo recorrió y el gimió y mi nombre salió en un gemido agónico, me abrazó y dijo

- Que quieres hacer...

sonreí y dije....

- Quiero hacerlo mío

Que?... que acabo de decir... quiero hacerlo mío?... yo?... Yo? hacerlo mío?... no entiendo a mi cuerpo, no me entiendo...

- Pues hazlo que llevo mucho tiempo deseándolo-

No sé qué ocurre me siento encerrado en un cuerpo que se maneja solo...

- Entonces si tanto lo ha deseado porque es que aún sigo vestido?...

Sus manos comenzaron a liberar cada prenda de vestir que traía conmigo, al acabar frente a frente, solo rocé su cuello y ambos reaccionamos aumentando nuestro sexo a su máxima expresión, comencé a besarle pero no quería detenerme, pero terminé aquel beso y lo giré, el agua corría por nuestros cuerpos, me acomodé y mientras mordía su espalda acerqué mis manos a su sexo mientras que con la otra mano me abría paso en su entrada, un dedo, luego el segundo haciendo que el comenzara a doblar sus piernas, el tercero y el emitió un pequeño grito de dolor, mordí nuevamente su espalda para continuar con mi lengua dibujando líneas, después de par de movimientos cambie los dedos por mi miembro, fue lo más maravilloso vivido hasta hoy, ese calor, esa sensación apretada en aquella deliciosa entrada, no me moví hasta que el me diera la señal, fueron segundos eternos, cuando estuvo listo comenzó a mover sus caderas, yo me dejé llevar y ya no importaba nada, cambie el ritmo y entre más gemía y pronunciaba mi nombre más salvaje era la embestida, los últimos ya no eran gemidos, eran gritos suplicando para que no me detuviera, acabamos al mismo tiempo, mis manos presionaban su cadera lo que lo mantenía aun en pie, al separarnos no éramos capaces de salir, nos dejamos caer en la tina y quedamos el abrazándome y yo solo pensaba en que aun estábamos en el avión y yo estaba en el más maravilloso de los sueños...

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Salí primero del baño completamente desnudo dejando ver mi cuerpo desnudo frente a alguien por primera vez... en la habitación me vestí, llamé a mi madre quien esperaba que me portara bien y me cuidara, corté un poco antes que el saliera y me dijera...

- Creo que esta noche te tocará cuidar de este anciano que has dejado lisiado-

No pude aguantar la risa y dije lo de viejo ni Ud., se la cree...

- Después de lo que acabamos de hacer aun me tratarás de Ud.,?

- Disculpa, tienes razón... lo de viejo ni tú te la crees y lo de lisiado creo que podría convencerte de volver a repetirlo, tal vez así componga lo que se desacomodó... (que pasa conmigo estoy muerto de miedo pero me sale de lo más natural un Seme dominante), me sonríe y dice,

- Quiero ver si se compone...

Lo tomé y deje caer sobre la cama, esta vez recorrí cada parte de su cuerpo por delante (disfrutando y recibiendo una agradable porción de leche fresca y calentita), hasta llegar a aquel lugar que había disfrutado, esa entrada que pedida ser penetrada una vez más, mi lengua entró y esto lo hizo emitir un sonido raro, fue tan salvajemente animal que me encendió al punto de no importar nada, solo dejé abundante liquido con mi lengua para poder abrirme paso, entré y fue perfecto, pero esta vez, cuando él estaba por acabar lo saqué y lo obligue a quedar de frente a mí, acomodé sus piernas alrededor de mis caderas y entré en él, fue la mejor decisión que eh tomado, ver su expresión, cada embestida era una alegría gráfica en su rostro, satisfacción, amor y placer... después de acabar juntos dejé caer mi cuerpo a su lado y él dice....

-- NO QUIERO DESPERTAR.... DÉJAME VIVIR ESTO CONTIGO PARA SIEMPRE—

No eres el único que no quiere despertar