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                  Miercoles 04:26 am.
No puedo más, se que prometí no volver a hacerlo pero ahora si que no aguanto más.
Como pudo atreverse a aparecer de la nada y decirme eso... y hacerme eso, no es justo no tiene ningún derecho y muy en el fondo no quiero hacerlo... pero no puedo... no puedo con todo esto, me duele... me duele demasiado... como para ignorarlo se que dije que ya lo supere... dije e hice creer a todos que soy fuerte... tan fuerte como una roca... pero nadie me dijo que aún con mi armadura hasta el más mínimo roce me afectaría y no quiero que nadie lo sepa... nadie sabe que lo hago, aunque me gustaría mucho decirselo a Leti... pero no la voy a hacer sufrir por mi culpa, ya es suficiente lidiar con mi mamá y todo por mi culpa.

Vuelvo a mirar lo que tengo en la mano y es que está es mi droga... esto es lo que soy... es lo que siempre he sido... y nadie lo puede cambiar ni siquiera yo lo puedo hacer... nadie lo puede hacer.

Sigo mirando la cuchilla en mi mano y sigo sintiendo las lágrimas caer por mi rostro y no me molestó en limpiarlas... porque no se detienen... nadie las detiene, el mundo me ha fallado... una vez más, de nuevo me hizo una mala pasada.

No aguanto más... las voces se pelean en mi interior "Hazlo... vamos no seas cobarde"

SERIA COBARDE HACERLO.

"Si no lo haces te sentirás peor"

NO... AÚN PUEDO AGUANTAR UN POCO MÁS... YO SOY FUERTE.

"No... no eres fuerte... nunca lo has sido"
Simplemente lo hago... paso la cuchilla por mi muñeca izquierda... y se siente tan bien... es como hace tiempo... la misma sensación... la misma paz, el mismo alivio.

Volví a despertar ese monstruo que vive en mi... pero no, yo soy ese monstruo, yo soy mis propios demonios y no lo puedo cambiar porque es lo que soy... un monstruo.

               Miercoles 06:57 am.

No pude dormir en toda la noche y tampoco pienso ir al instituto, no tengo ganas de nada, estoy en la misma cama, viendo las mismas paredes, con la misma posición, las rodillas flexionadas a la altura de mi pecho, con los mismos pensamientos.
Como siempre sin tener a nadie a quién llamar, juré que nunca más estaría en la misma situación... y he aquí, lastimada de la misma manera que antes, con el mismo dolor de antes, después de tiempo de haberme prometido no volver a ser la misma y me vuelve a pasar lo mismo... y vuelvo a hacer lo mismo, lentamente levanto la manga de mi buzo y suspiró al darme cuenta de que no fue una pesadilla, veo que lo volví a hacer y... no me enorgullece para nada.

Toc toc*

-Kataleya, ¿ya estás lista?- vete al carajo si piensas que voy a ir al instituto- Contéstame- me habla con voz autoritaria, siempre es igual.

Con un hilo de voz logro contestar:
-No iré.

-Esta bien- y escuchó sus pasos alejarse.

Y antes de darme cuenta me sumerjo en un profundo sueño aún con las lágrimas corriendo por mi rostro.

Su voz... su figura... repitiendo una y otra vez que todo es mi culpa, que yo soy la culpable... la misma sensación... esto solo es tu culpa...

De pronto el vacío... luego todo blanco... frente a mi un espejo, y mi reflejo demuestra lo que hago... no, lo está haciendo ella y soy yo la que sangro, mis muñecas, después mis piernas y yo grito para que pare y no lo hace y...

Me levantó sobresaltada en el piso llorando y tengo la respiración muy alterada, de nuevo pesadillas que me atormentan... al intentar pararme me duelen mucho las muñecas, que por la caída se volvieron a abrir y vuelven a estar sangrando.

                 Miércoles  12:43

No he salido para nada de la habitación ni siquiera para comer y al parecer a nadie le importa... apuesto a que mi madre ya mandó a Leti a comprar o algo porque en todo el día no la he escuchado.

¿Mi madre?... seguramente está paseando... con él, solo de pensarlo... solo con imaginarlo, me atormenta su mirada, fría...distante...cruel...llena de ira y maldad.

Me levantó hacia el espejo, y me duele... mucho pero lo ignoro, porque mientras el dolor físico se siente... el dolor del alma desaparece.

Es tu culpa, tu eres y siempre serás la culpable... si no fueras como eres nada de esto estaría pasando.

-¡¡Cállate!!- grito frente al espejo y recuerdo sus palabras.

Eres hermosa y es tu culpa.

- Eres hermosa, ¡es tu culpa!- lo digo mientras me comienzo a rasguñar el rostro.

Tu cabello es hermoso y perfecto.

-¡Ahora ya no lo es!- comienzo a dar vueltas alrededor de toda la habitación en busca de alguna tijera... y no la encuentro... y comienzo a jalar mi cabello con muchas fuerzas.

Vuelvo al espejo y observo unas inmensas ojeras, labios resecos y partidos, cara roja e hinchada de tanto llorar...

Como siempre, falta el brillo de mis ojos, antes de todo siempre lo tenía conmigo y ahora viéndome frente al espejo ya no me reconozco, no recuerdo la última vez que sonreí de verdad y no solo para fingir.

Prendí el teléfono y encuentro unas 20 llamadas perdidas de Joel, Mariana y Austin, veo que durante todo el día se han tratado de comunicar conmigo, leo unos 50 mensajes de ellos en los que me preguntan si estoy bien, que me sucede, porque no respondo y miles cosas más, pero no contesto a ninguno de ellos, no tengo ganas... ni de contestar ni de comer ni nada, solo quiero desaparecer y nunca volver...

               Miércoles 19:13

No he salido y nadie ha entrado en todo el día a la habitación.

Joel sigue insistiendo con sus llamadas pero no le contesto ni una sola vez, Leti tampoco a vuelto y no se porque, normalmente a está hora ella está abajo limpiando con música... pero ahora no se escucha nada más que el infinito silencio...

Las voces dentro de mi cabeza me dicen que lo haga de nuevo... antes de que el dolor se vuelva a hacer presente pero me doy cuenta que sin importar cuántas veces lo haga el dolor va a seguir aquí dentro de mi alma... tengo una lucha mental entre hacerlo y no, los demonios de mi cabeza me lo repiten una y otra vez... lo mismo como si fuera una canción que nunca termina.

Tu culpa, todo es tu culpa... siempre lo ha sido, todo lo malo sucede por tu culpa y nadie lo puede cambiar... ni siquiera tu misma.

N/A

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Bye fantasmones de mi vida nos leemos en la próxima.
Besos  😘

Confesiones De Un Alma Rota. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora