No, no era una broma.
Lucas estaba hablando en serio.
No se que hacía antes Lucas en su casa pero definitivamente no creo que pasara sus tardes en la cama.
-Escucha, yo salto primero y cuando te diga que saltes, saltas.- me indicó Lucas quien se comenzaba a preparar para saltar, ya estaba en la ventana solo le faltaba dar un brinco, justo antes de saltar volteó- No te va a pasar nada, es fácil.
Y salto.
Me asomé rápido para ver si no se había lastimado, sigo creyendo que este chico tenían demasiado tiempo libre.
Sus manos me indicaron que esperara tantito, caminaba silenciosamente para ver dónde estaba el sujeto pero el pasto no le ayudaba por qué ya había crecido demasiado y cada paso que daba se podía escuchar, el pasto estaba tan largo así como su cabello, bueno parte de el, ¿Como explicarlo?, su peinado era corto de los lados y largo de arriba pero le quedaba bien, se le veía bien y más por el tipo de color de cabello.
Después de asegurarse, camino más rápido y me hizo ademanes, quería que bajara ya y muy rápido.
No es que le tenga más eso a las alturas, pero soy muy torpe, siempre que corro terminó cayendo, todo los deportes me va mal, así que espero que el saltar no sea mi causa de muerte.
Ya qué sobreviví a lo que sea qué halla pasado, los canibales pero no sobreviví a un salto.
Bueno Hope, tú puedes me dije para mis adentros.
Salte.
Fue cosa de unos segundos, aterricé tambaleándome hacia atrás, Lucas me sujeto.
-Bien hecho Hope, eres muy valiente.
-Realmente no creo serlo, he estado estos días tratando de llevar tu ritmo pero es imposible.- dije seguido de reincorporarme, mi mochila no llevaba casi nada por eso no me pesaba.
-Lo has hecho bien, deberías de estar orgullosa de ti, porqué no importa que tan torpe seas, eres valiente, y eso es mejor que ser un ágil cobarde.
No le pude contestar porqué me dejo callada.
El me esta causando problemas, tiene la maldita razón en todo lo que dice.
Demonios, ¿Quien es realmente?
-Sera mejor que nos vayamos, no sabemos qué pase más tarde.- sugirió mientras miraba hacia la parte donde daba la calle, donde estaba el sujeto.
-Concuerdo contigo, debemos irnos enseguida.-no me presto atención, seguía viendo hacia la calle, volteé a ver lo que miraba pero no había nada, lo agarré de la mano y lo llevé a la dirección contraria.-Vámonos Lucas, ya va anochecer.
La otra dirección solo había un campo lleno de pasto, pasto, flores, árboles y más pasto, era lo único que separaba una unidad habitaciónal de otra.
Lucas seguía distraído, estaba anonado, no lo solté.
Cruzamos el pequeño "campo" pero no sabía dónde ir, podíamos ir a otra unidad y checar si alguien estaba vivo.
Mi intuición me dijo que fuera ahí, y lo hice, cruzar a otra unidad llevo unos minutos pero en ningún momento Lucas había dicho nada, eso me preocupaba.
-¿Te encuentras bien?- me pare a preguntarle.
-Si.
-¿Te das cuenta que es notorio tu estado? Acuérdate soy torpe pero no tonta.
El sonrió.
-Me estoy cansando de ver a esos sujetos matar personas, no se como ellos siguen viviendo.- Por fin habló, y dijo algo que es cierto, personas inocentes fallecieron y ellos seguían vivos.
-¿Crees que ellos tienen algo que ver con que fallecieran demasiadas personas?.
-Seguro fueron ellos.
-¿Pero, te diste cuenta que ninguno tiene alguna marca de bala ni siquiera de un rasguño, mucho menos de un golpe?, mi madre no tenía nada y no sé dónde está mi papá.-Le dije.
No dijo nada, nos quedamos un momento en silencio.
-No me había dado cuenta-. Y yo también no me había dado cuenta de que yo seguía agarrándole la mano, lo solté.
Después de eso nos dirigimos a la otra unidad, la que estaba detrás de la mía.
Comenzaba a tener hambre, pero no le quería decir a Lucas por qué yo seguramente me va a decir que me aguante o que espere hasta que entremos a una casa.
El gruñido de mi estómago sonó, ya no había manera de ocultar mi hambre, Lucas se volteó a mirarme inmediatamente cuando termino el gruñido.
-¿Tienes hambre?-me pregunto.
-No no no, estoy bien.- menti.
Pero para el colmo otro gruñido se escuchó.
¡Tengo una suerte!
Lo único que necesito es entrar a una de estas casas y comer, lo que sea, tengo demasiada hambre.
-No sabes mentir- hablo.
Yo no dije nada, solo entrecerré los ojos.
-Es que yo no estoy mintiendo, estoy diciendo la verdad, amiguito.- le dije.
Antes de que me contestara el sonido de una puerta abriéndose se hizo presente, volteamos rápidamente.
-¿Acoso es?.-le pregunte.
-Si.
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Invencibles.
Adventure¿Realmente no te has dado cuenta?Todo lo que vez no es real, es una farsa, tú eres una farsa,yo soy una farsa, todos somos una gran y terrible farsa, todos estamos en una gran mentira que necesitamos para vivir todos los días, no siempre, las farsas...