Campo de primavera de los cerezos en flor

Noche

Sasuke-kun... - Gimio mientras el entró de nuevo en ella.
Sus cuerpos estaban cubiertos por una delgada capa de sudor.

Sakura.. - gruño cuando levantó su pierna para enterrarse aun más profundo.

El aire estaba cargado por la pasión y el deseo de ambos.

El apretó los dientes al sentir las descargas recorrerlo, estaba por venirse, sintió el interior de ella apretarlo más y más, la forma en que se retorcia en sus brazos era la señal de que pronto acabaría también.

Unas embestidas más y gruño contra su hombro al descargarse por completo en ella, Sakura Gimio una vez más su nombre en el momento en que también llegó a su propio paraíso.

Te amo Sasuke-Jun... - el sonrió ladino.

Sasuke-kun.. - abrió los ojos cuando el sonido de la puerta lo trajo a la realidad. Estaban en el país de las olas, desde dos días atrás habían llegado a dicho lugar.

Y mucho antes había comenzado a tener esa clase de sueños, despertando con un gran problema en los pantalones.

Si relación con Sakura cada día se hace más fuerte, llevaban siete meses de viaje pero el quería formalizar las cosas aun más antes de hacer sus sueños realidad.

¿Sasuke-kun, estas bien? - Escucho angustia en la voz de Sakura.
Lo estoy, ahora voy - su voz salió ronca ¿Acaso pudo hacer estado hablando dormido?, un rojo tiñó su rostro, ni en su pubertad paso por algo tan bochornoso como sueños eróticos y ahora esa mata de pelo Rosa despertaba sus deseos en menos de los cantaban los gallos.

Después de encargarse de su problema y de una ducha fría, salió de habitación listo para el día, en recepción le pregunto a la anciana si había visto a su novia bajar ya que al ir por ella a la habitación no la encontró.

Fue por unos dulces a dos puestos de aquí - le aclaró con una sonrisa la mujer. El agradeció respetuoso y salió con dirección dicha tienda.

Sakura - la llamo, ella sostenía una bolsa pequeña y tenía la atención en el producto de adentro, al escucharlo lo miro con una sonrisa.

Sasuke-Kun, buenos días - el sonrió y golpeo su frente con dos dedos. El sonrojo no llegó, ya se había acostumbrado a esa muestra de afecto por lo en cambio sonrió ampliamente antes de acercarse, poner de puntillas y besar su mejilla.

Las muestras de afecto públicas eran algo que no se le daba a Sasuke, pero amaba esos fugaces momentos donde ella se permitía ese contacto.

Ha llegado algo para ti - sacó un pergamino de la bolsa en su cadera y se la entregó, Sasuke la estudió un momento.

Vamos, quiero leerla en la habitación - Sakura camino junto a él de regreso a la posada. Una vez ahí ella se instaló en la cama de Sasuke a comer un chocolate, Sasuke quedó sentado en el borde mientras abría el pergamino.

"Sigue horrible tu letra" - pensó al reconocer la caligrafía de su rubio amigo.

Hinata esta embarazada - Sakura casi se atragantaba con el chocolate, se arrastró de rodillas hasta quedar detrás de Sasuke y se inclinó a leer el pergamino.

Efectivamente la hyuga tendría un bebe, entre otras noticias.

Parece que Naruto va a formar su familia después de todo - Sasuke asintió. Noto un poco extraña la expresión de Sakura. En la carta decían que Hinata tenía apenas un mes y medio.

Sakura - la llamó. Ella elevó la vista, estaban tan cerca que río contra los labios de Sasuke cuando le robó el beso.

¿Sucede algo Sasuke-kun? - el le sonrió abiertamente, como sólo para ella.

Casate conmigo - Sus jades se cristalizaron de inmediato.
¡Si! - y se abalanzó contra él.

Te amo Sakura - ella beso su barbilla.
Y yo te amo Sasuke-kun - Pronto podría hacer realidad su sueño. Y nada tenía que ver aquello con la propuesta, pues en verdad amaba a la mujer de cabellos rosas, por que sólo con ella podía ser el verdadero Sasuke.

Aun que no veía nada de malo en cumplir el sueño de esa mañana.

....

No me maten amados míos, ya saben que se me va la inspiración y desde abril no publicaba nada sobre esta historia. ¡Los quiero!.

Y si, en el próximo cumplirá sus fantasías sexuales, ya se que quieren lemon.

P.D.

Sólo por ustedes estuve practicando mi escritura Sexual jajaja