Campo de primavera de los cerezos en flor

Identidad

Abrí los ojos lentamente, la habitación estaba iluminada por los rayos del sol. Estaba en el hospital de konoha, lo sabia bien, la abrumadora noche, Tsunade-sama me quito el sello con mucha facilidad, ahora yo me sentía avergonzada por algo que con simpleza podía liberarme yo misma. Pero incluso recordé por que algo tan simple me afecto tanto, por que Karin tomaba de la mano a Uchiha Sasuke y con ese gesto clavo en lo mas profundo de mi alma una daga, sabia que emanaba tristeza, mi control del chakra perfecto así presencia a la manipulación de aquel nuevo contenedor desbloqueado. Lleve mi mano a mi mejilla puesto la sentí mojada y así era, de nuevo lloraba por todo lo que había pasado. Primero no sabia quien era, luego si, luego recordaba que no. Era Sakura, pero no Haruno, no Sabia quien era.. Una voz muy familiar me saco de mis pensamientos.

Ino tomaba mi otra mano con fuerza. - ¿Estas bien? - en su voz había angustia. - Prefiero estar muerta - le solté con frialdad, la misma que durante años me enseñó Uchiha, cortante, con un filo que rompe el alma a cada palabra, o bueno, con cada gesto. -¿Qué estas diciendo sakura? - Ino estaba desconcertada. -Debería estar muer... - sus gritos impidieron que terminara mi frase. - ¡Callate! - su sollozo se hizo presente, el poder de las palabras. Mi mirada se vio perdida en una esquina de la habitación después del grito ensordecedor de Ino. Acto seguido sus chakras los traicionaron, Naruto, Sasuke, Akazu, entraron de golpe, claro. Ino podía hacer que sus gritos llegaran al fin del mundo si era necesario.

¡Naruto! ¡Dile a esa estúpida que no vuelva a decir de nuevo eso! - Ino miraba a naruto.

¿Qué ocurrió? ¿Sakura-Chan? - su voz era de angustia y confusión. - Nada Naruto. Dije algo estúpido - no lo mire - Lo siento cerdita - tome con fuerza su mano, seguía sin mirar a nadie.
¡Estúpida frentona! - ino se lanzo encima de mi cuerpo y su sollozo adquirió aun mas fuerza. Me moví un poco y coloque mi otra mano en su cabeza para acariciarla. Ella seguía llorando, sin dejar de lado mi atenciones a Ino me dirigí al rubio. - ¿Que día es hoy Naruto? - mi voz seguía sonando fría. - Solo ha pasado una noche.. ¿Ya recuerdas Sakura-Chan? - me miraba, lo hacia, podía sentir sus ojos clavados en mi. Le mire y en mirada pude ver dolor, dolor por que mi rostro era ira y frialdad. - Dejenme hablar con Akazu. - fue todo lo que dije antes de mirar a la nada de nuevo. Naruto tomó a Ino y la saco de la habitación, Akazu se posicionó en el mismo lugar de ino pero sin perder la cordura, el azabache seguía con la mirada ónix en mi. - vete Sasuke, luego les explicó. - se fue sin hacer ruido, como si nunca hubiera estado de pie frente a mi cama.

Akazu esperaba mis órdenes. - Quiero saber ahora todo, todo lo de tu mundo, ya. - ella bajo la mirada y posiciono su mano en mi frente, lo único que salio de su boca fue - Dolerá.

Tal cual dolio. Todo lo que ella sabia lo sabía yo. También supe que esas personas murieron, mis padres.

Hace milenios mi gente encontró este mundo y decidió compartir conocimientos con la gente que vivía aquí. Todo esto fue poco antes de la creación del mundo ninja.

Les dimos el poder de ver el bien y el mal. Pero no contábamos con que su pecado más grande seria obtener poder.

Mi tía es Kaguya, el mal, mi madre es Kagura, el bien. Sin embargo llevo debería llevar el apellido de mi padre, Hashimoto, Hashimoto Sakura.