El muelle

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Ya pasaron dos semanas desde que me dieron el caso y me puse a investigar, lamentablemente todavía no conseguí hacer ningún avance solamente pudimos diferenciar una marca que el asesino deja en cada una de sus víctimas, el les dibuja un diamante en el pecho de sus víctimas además cumple un patrón de matar a una mujer jóven, un hombre un poco adulto (entre unos 40 y 50 años) y finalmente un adolescente no importa si es hombre o mujer. Ya va logrando cumplir dos veces su patrón.
Últimamente todo el mundo camina con miedo e evita los lugares de poca actividad. Esto hace que la ciudad este muy desanimada, los clubes nocturnos están completamente abandonados y nadie va a los restaurantes luego de las 9 de la noche es como un toque de queda.
Hoy me dirigía a la oficina cuando recibí una llamada de mi superior me dijo que un sujeto extraño andaba merodeando por el muelle, es un lugar muy poco poblado más que por trabajadores y algunos pesqueros por esto es extraño encontrar gente allí y más en estas circunstancias. Decidí ir a investigar por mi cuenta de que se trataba, me fui camino a aquél lugar y al llegar unos pescadores me dijeron que el tipo estuvo por ahí hace rato pero se fue hacia una especie de mirador abandonado.
En ese lugar los adolescentes van a tener citas, ya saben lo que pasa luego.
Estaba caminando hacia el mirador pero no llegué a encontrarlo. La ira que sentía en ese momento era muy grande ya que el presunto asesino se pudo a escapar de nuevo sólo me senté en el mirador a tomar un refresco pero no podía evitar sentirme extraño como su alguien me estuviera mirando a lo lejos...
A unos cuantos metros de allí se encuentra un pequeño bosque, no muy grande pero si muy espeso y difícil de entrar, era el lugar perfecto para una guarida. Aunque los policías ya rastrearon ese lugar al derecho y al revés. De cualquier manera decidí entrar, me resultó fácil entrar ya que de niño me gustaba mucho acampar y supongo que tengo algunos conocimiento y se como moverme por estos lugares, al entrar escuché que alguien caminando por ahí seguí el ruido y me encontré con un tipo, este ser inmundo estaba espiando a los jóvenes que iban a mirador y al parecer estaba en uno de sus momentos, lo encontré con los pantalones y los boxers abajo y su mano derecha ocupada. Con la izquierda sostenía unos binoculares que le ayudaban a espiar a la joven pareja. Inmediatamente saqué mi arma y se la puse en la cabeza
~Christian: Manos arriba, hijo de puta. Lo que estas haciendo es un delito federal estarás encerrado mucho tiempo. Enfermo
Grite muy enfadado el tipo no hizo mucho esfuerzo y se tiro al suelo le puse las esposas y allí quedó tirado en el suelo con los pantalones abajo. Llame a la brigada para que lo lleven debía esperar a que lleguen.
Todo estaba tranquilo hasta que escuche un grito de negación, rápidamente me doy cuenta que viene de la joven pareja pensé que era el asesino y tome los binoculares para poder verlos al parecer la chica estaba intentando frenar a su novio ya que este quería tener relaciones, no le importaba nada...
Deje bien inmovilizado al pervertido y fui corriendo donde estaban ellos.
Al llegar el chico estaba intentando violar a la chica. Le tenía sometida en el piso se bajó los pantalones hizo a un lado su falda y la penetró tan fuertemente que la hizo sangrar esa escena era repugnante podía sentir el dolor y odio de la chica a pesar de no ver su rostro y de que ya no gritara era como si aceptará su destino. Obviamente no me quedé brazos cruzados, tome un hierro que estaba allí y lo golpe con todas mis fuerzas en su espalda
~Violador: ahhhggg
Soltó una exclamación de dolor que se pudo escuchar hasta donde estaban los pescadores.
Se quiso levantar y golpearme pero lo evite y le di otro golpe en la entrepierna con mi rodilla. El golpe fue tan fuerte que quedó inconsciente. Luego intente ayudar a la chica pero en ese momento pude ver su rostro... No podía creerlo era... Ella, la chica del otro día...
No pude hacer mucho más que sólo verla, estaba ahí tirada al verme cubrió su rostro y se acomodó la falda. Estuvo tirada sin decir nada unos 20 minutos. Yo solamente me senté a su lado no sabía que decirle, las palabras no me salían.
Luego de unos minutos llegaron unos oficiales que había llamado, ellos se encargaron de los dos sujetos. Yo decí llevar a la chica a su casa, debía interrogar al sospechoso de los binoculares, pero el caso podía esperar ahora lo más importante era ella. La subí en mi auto y estábamos rumbo a su hogar, ella no decía ninguna palabra solo miraba fijamente hacía adelante. Intente sacarle conversación para olvidar el momento pero no conseguí nada. Probé todo, pero no, al llegar a nuestro destino ella se quiso bajar pero la detuve.
~Christian: por lo menos decime cómo te llamas. No se tu nombre.
Ella se limitó a mirarme, luego bajo su mirada y me dijo...
~Chica X: Emma...
Luego se bajó de auto y entro corriendo a su casa.
No supe más nada de ella, tenía que volver a mi oficina a hacer el papeleo e interrogar al sospechoso.

Miradas A Una CiudadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora